Me siento tan mal, y sé que no soy la única. Así que mejor será darles un respiro. ¿Recuerdan esa frase de "todo pasa por algo"? Espero que ahora tenga sentido.
PD: Jodido Liam
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CAPITULO DEDICADO A:
zzZ_Aaaaaaaaa ughzouis Camzx_x
*Firma aquí para dedicación*
Harry suspiró cansado al terminar de leer el caso de simulación que le había otorgado el profesor, luego de su semana de suspensión se sorprendió bastante al notar que su clase tenía tarea para esta y cinco vidas más. Habló con cada maestro para consultar acerca de cada materia, uno de ellos le entregó un pase VIP para irse literalmente a la mierda. —Hijo de puta... —masculló cuando vio la calva brillante del profesor alejarse.
Lo peor es que ahora tendría que hacerse el amable con el resto de sus compañeros para que le prestaran los apuntes de la clase del profesor McQuaid.
Sin embargo no tiró la toalla y siguió siendo un grano en el culo de sus maestros consiguiendo la mayor parte del material que habían pasado esa semana. Ahora estaba en su casa leyendo una de sus tareas para el laboratorio de simulación criminalista.
—Jodida mierda.. —Gruño lanzando la carpeta color naranja con el sello "secreto" estampado diagonalmente en color rojo a la cama—: denle el caso más difícil al gilipollas que estuvo suspendido. —Un tintineo proveniente de su celular lo sacó de sus pensamientos, lo tomó entre sus manos y sonrío. Un mensaje.
"¡FIESTA EN CASA SIGMA!" Enviado por Nicholson. 20:38 pm.
"Dime cuando compañero" Enviado por Harold. 20:39 pm.
Puede que la conversación sea algo formal para dos universitarios, pero Harry evita relaciones muy cercanas, sin embargo, con Nick Jennings, un tipo que vivía en los barrios aristócratas de Londres, se han tratado de aquella forma por joda de Harry al molestarlo con su situación económica.
"Este sábado, ¡corre la voz!" Enviado por Nicholson. 20:41 pm.
El rizado asintió, tendría que rogarle a su mamá que lo deje ver la luz del sol. Y se río de sí mismo por que aún a los diecinueve años debía pedirle permiso a su madre, maldice el día en el cual gasto lo ahorrado para un departamento en aquella Harley Davidson que en este mismo instante estaba guardada en su garaje.
Tendría que tomarle la palabra a Louis, el gnomo le dijo que lo acompañaría a una fiesta. Sin embargo, Harry no especificó cual. Ya que en la semana hubieron bastantes. Y mañana hablaría con él. —Ahora a combatir el crimen. —Susurró abriendo su MAC para escribir el informe.
...
Con su espalda contracturada, Harry despertó sobresaltado casi a las ocho de la mañana del otro día, corrió guardando su computadora, el cargador, la carpeta color naranja que le estaba dando un leve dolor de huevos, tomó un cuaderno 'x' y un lápiz. Se duchó anoche así que no se preocupó tanto por aquello, se lavó los dientes y bajó corriendo las escaleras hasta la sala de estar. Caminó hasta el ganchillo a un lado de la puerta principal donde mantenían las llaves colgadas. Buscó las de su moto, no estaban. Entro en pánico, observó el reloj mural y joder, diez minutos. Bajó su mirada hasta el platillo donde aveces, sólo aveces dejaba caer las llaves. Tampoco.
Volvió a correr ahora hasta la cocina, sus padres con una sonrisa tomaban su desayuno. Apretó los dientes. —Se puede saber... dónde mierda están mis llaves.
Anne sonrío con alevosía. —Oh cariño... —Alzó con el dedo índice un brillante juego de llaves con una guitarra de llavero.—¿Hablas de esto?
Harry suspiró, acercándose para tomarlas con las manos. Su madre fue más rápida y las escondió en su regazo. —¡Ya mamá, se me hace tarde!
—Estás castigado Harry. Ten mi auto. —Le tendió sus llaves.
Un estruendoso bufido salió del rizado. —Estás loca... ¡ES UNA MINI VAN! Soy malditamente mayor, dame las llaves de MI moto.
—No.
...
Entre estruendosas carcajadas Harry entró al hall de la universidad. Les envió una gélida mirada a cada uno y volvieron a sus asuntos, pero ver a entrar a Harry Styles en un "mamá-móvil" no era algo que ocurría siempre. Fue hasta su casillero y guardó su computadora y accesorios dentro dejando solo el cuaderno y el bolígrafo en su mochila. Un coqueto muchacho que estudiaba psicología le sonrío. Harry lo ignoró. Causando un farfullo de indignación de parte del chico.
Dos horas después Harry salió hecho un zombie de su clase. Fue hasta su casillero y... oh no. Unos asquerosos hormonales se estaban comiendo la boca justo en su locker. Sacó toda su fuerza interna y los empujó haciendo que estos se caigan. —Oh lo siento —con sus manos tapando su boca con falso asombro puso de pie a la zorra que antes estuvo en su lugar— no fue mi intención cariño. —Volvió a su posición inicial y frunció el ceño—. Pero, apreciaría que ustedes dos hijos de la gran puta se vallan a follar a otro puto lugar. Gracias. —Tomó sus cosas y fue hasta la biblioteca por ser el lugar con mejor fibra óptica de todo el establecimiento.
Entró y divisó una cabeza castaña junto a una rubia. Caminó hasta ellos y se sentó. O calló sobre la silla, como quieran. La cabeza castaña se alzó en su dirección. —¡Harry! —susurró con entusiasmo.
—¡Rata! —Susurró de vuelta el rizado con diversión—. Oh tú... —Volteó a ver a Kim con un ojo entrecerrado.
—¿Qué estás haciendo aquí Styles? —Kim musitó con dureza. —Malvabisquito no dejes que te engañe... Es un idiota.
—Lo sé —Volvió a sonreír Louis bajando su azul mirar a su libro de biología.
—Bueno ignórenme yo sólo vengo a trabajar. —Dijo Harry abriendo su portátil para continuar su trabajo.
Louis com aquella curiosidad que lo caracterizaba fijó su mirada en el sobre naranjo que Harry dejó sobre el mesón, volteó a ver a su amiga y esta leía y tomaba variados apuntes sobre los variados experimentos que se realizaron con objetivo genético.
—Uh Harry... —susurró el castaño.
—¿Qué? —Respondió con brusquedad.
Louis bajó su mirada sonrojándose. —Uh, ¿qué es esa carpetita naranja que tienes ahí?
—Un día de estos alguien matará a tu perrito con tanta curiosidad, ¿no crees enano? —Kim levantó su cabeza mirándolo con curiosidad.
—Serás imbécil... La curiosidad mató al gato. —Harry sonrió con auto suficiencia.
—Su gato se llama "perrito", tonta.
—Dios malvabisquito, ese es el peor nombre para un ga...—Kim calló al ver los ojos acuosos de su amigo—: ¿D-Dije peor? ¡Nah, es más ahora mismo iré a buscar un gatito en la calle para bautizarlo como "perrito 2"
«Shhh» Escucharon de la amargada bibliotecaria que recorría los pasillos.
Los tres bajaron sus cabezas. —¿y que es? —señaló Louis con sus deditos la carpeta.
—Oh, es un caso de simulación. —Explicó Harry entregándole su tarea a Louis quien le dio una ojeada con Kim.
—¿Y qué debes hacer con esto? —Preguntó la rubia devolviéndole el caso a Harry, sintiendo un leve escalofrío después de haberlo leído, Louis no entendió mucho de aquello.
—Debo hacer un informe detallando cada instancia legal desde su desaparición en un ámbito policial, luego médico con su respectiva necropsia, su juicio y la investigación para dictaminar al criminal para darle su sentencia final. —Susurró Harry escribiendo cada uno de los pasos acordé a la situación que el profesor le había otorgado.
—Wow... ¿Pero en tu caso...? Dice que la mujer estuvo desaparecida por más de diez años... ¿Como debe hacerse? —Volvió a preguntar Kim aún mas interesada en el tema.
Harry suspiró. —Los casos de secuestro son los más difíciles de resolver sin duda porque al no encontrar el cuerpo no pueden ser "olvidados" por así decirlo, se requiere información tras información, interrogatorios a personas cercanas y no tan cercanas a la víctima, es una mierda más o menos acojonante.
...
Luego de pasar un agradable momento los tres, se separaron del rizado porque cada uno tenía su clase correspondiente. Kim y Louis, por suerte tenían juntos. Harry mientras estaba solo se golpeó mentalmente por no hablarle a Louis de la fiesta. Ya luego lo llamaría.
Otras dos horas y un Harry digno de The Walking Dead, caminó hasta la cafetería donde se encontró con Nick. Lo saludó y hablaron un poco.
—Entonces, ¿irás? —Preguntó Nick mientras elegía entre lasagna de microondas o una ensalada César.
Harry sonrió de lado. —Por supuesto, jamás me perdí una fiesta de Sigma, son la gran polla. —Dijo mientras tomaba una porción de lasagna y una lata de coca-cola. Siguió a Nick que se había decidido por la ensalada y pagaron por su comida para irse a sentar a la esquina cerca del ventanal gigante.
—Genial, escuché que esta vez no escatimaron en gastos... Aunque habrá más seguridad que en el desfile de la reina. —Dijo mientras le daba un sorbo a su jugo.
El de ojos verdes frunció el ceño. —¿Por qué?
Los ojos color avellana de Nick se entrecerraron. —¿Cómo que "por qué"? ¡Por lo que sucedió en el jodido baile!
Los recuerdos azotaron la mente del rizado haciéndolo estremecer, sacudió su cabeza alejando esos pensamientos. Una bandeja color azabache opaco se posó sobre la mesa, era sostenida por unas manitos muy pequeñas, levantó su mirada y unos tímidos ojos azules le saludaron. —¿P-pu-puedo s-sentarme aquí? —Tartamudeó Louis con algo de miedo porque Harry claramente le había dicho hace unos días en su casa que sí amaba su vida no se atreviera a hablarle en público.
—¿y tú amiga? —Cuestionó Harry mirándolo con una ceja alzada.
—L-Liam la invitó a comer fuera.
—Okay, siéntate. —Louis sonrió sonrojado.
El otro chico miro de reojo al pequeño. —¿Cómo te llamas, eh?
Louis lo miró. —Louis.
—¿Irás el sábado a la fiesta? —Preguntó con una ceja alzada y una sonrisa que Harry quiso borrar de un solo golpe.
—¿Fiesta? —Inquirió el castaño sonando sorprendido, el chico (aún desconocido para él) asintió— Uhm, no lo creo —Respondió terminando con el labio inferior hacia afuera—, no me han invitado.
Nick sonrió enternecido. —Eres una cosita preciosa. —Recibió un golpe bastante fuerte de parte del rizado en su brazo pero lo supo disimular. —Es una fiesta de fraternidad, no necesitas invitación, solo debes pertenecer a la universidad.
—¿Fraternidad?
—Sí. —Le entregó una tarjeta color blanco antes de pararse y retirarse llevándose su ensalada a medio comer.
Louis curioso como siempre frunció el ceño y volteo aquella tarjetita.
—¿Qué es esto Hazz? —Preguntó Louis acercándole el papel a Harry.
—Es el nombre de la fraternidad más importante de la universidad, y tú irás a esa fiesta. —Lo señaló.
—¿Por qué?
—Porque me lo prometiste maldito enano traidor.
...
El día sábado llegó como uno de esos días inolvidables en Londres, un sol precioso desde el inicio de la mañana hasta el final de la tarde cuando Harry ya había salido de la ducha y buscaba un outfit bastante cómodo como para toda la noche. La noche anterior le había rogado a su padre que lo dejase llevar su auto. El cual impasible lo ignoro hasta que le dijo que no podía llegar a Louis en la moto. Sonrió guardando las llaves en su pantalón. Se puso una masculina loción, seguido de un suave perfume con toques de madera.
Tomó su cazadora de cuero y bajó, despidió de sus padres y manejó hasta la casa de su madrina. Subió la escalinata y tocó suavemente la puerta apoyándose de lado con toques chulos. Jay apareció en su campo visual con una humeante taza de té. —Oh cariño, ¿qué haces aquí?
Harry sonrió besando la mejilla de su madrina. —Vine por Louis.
—Oh... Harry. —Una incómoda Jay lo miró desde el umbral de entrada—, mi Lou no está en casa.
El rizado apretó la quijada y asintió disimulando su descontento. —Okey, yo le llamo. Adiós. Corrió al auto tomando su teléfono con brusquedad.
«Llamando, 'Maricón bonito'» un timbre, dos... —"¿Hola?"
—"¿Donde estás enano traidor?"
—"Oops, se me olvidó llamarte Hazz. Estoy con Kim en su casa, y sí iremos. ¿P-puedes venir aquí?"
El rizado se relajó solo un poco, aún con el mismo tono brusco anterior le respondió. —"Envíame la maldita dirección"
—"No maldigas"
Y cortó.
Cinco segundos después, la dirección de la rubia estaba entre sus mensajes. Condujo hasta allí y cuando la robótica voz de su GPS dijo "Ha llegado a su destino" tocó la bocina. Louis vistiendo una camiseta ceñida al cuerpo enseñando sus deliciosas curvas, junto con un pantalón muy apretado y unas zapatillas Adidas clásicas apareció por la puerta. Harry bajó del auto y sintió que su boca se secó. —Abrígate. —Le dijo mientras al mismo tiempo siguiendo sus instintos animales lo tomaba de forma posesiva de su pequeña cintura y besó su cabeza.
Louis asintió enseñándole su sudadera que llevaba en su mano. Era negra y se le notaban unas líneas blancas. Era Adidas también. —¿Adidas te contrató o algo así?
El castaño se alzó de hombros. —Kim dijo que me veía bien.
Harry asintió. —Muy bien. —Terminó con la distancia que los separaba y hizo suyos aquellos delgados y deliciosos labios.
—¡Ey, afuera de mi casa no! —Chilló Kim saliendo con un corto vestido color negro con aplicaciones de encaje y cuello de "Peter pan", lo complementó con una chaqueta corta de eco-cuero y unos botines bordeaux.
—Maldita rubia—masculló Harry recibiendo un golpecito de Louis, el rizado robó un suave beso y subió al auto. Seguido de ambos enanines.
...
Al llegar pudieron notar la genial fiesta que se estaba produciendo en el interior de Sigma Theta Tau. Tanto Louis como Kim soltaron un "wow" al unísono causando la risa del rizado.
—Miren nada más... —Una voz se escuchó por sobre la música electrónica del lugar, los tres pares de ojos voltearon hasta dónde provenía la voz, un alto muchacho quien vestía una chaqueta de vestir con la insignia de la fraternidad los recibió. —Nuestra presidenta estudiantil ya ha llegado... —Caminó hasta Kim y besó el dorso de su mano. —Un gusto, soy Ethan.
—Kim, soy Kim Stanford. —Soltó un risa nerviosa.
—Hola Harry... —Saludó Ethan con un leve abrazo al rizado.
—Que tal estirado. —Harry sonrió— Uh el es Louis —Señaló al pequeño— Mi... Uh, Louis.
—Hola, por favor. Disfruten la fiesta.
Los tres caminaron entre los sudorosos cuerpos que bailaban y frotaban unos contra otros, el DJ hacía un muy buen trabajo mezclando canciones en vivo. Las luces de neón iban de un lado a otro en forma de láser, una gran barra de bocadillos y por lo que Harry alcanzó a ver en el patio la fiesta estaba en sus apogeo también. —Iré por uno tragos, ¿quieres algo? —Harry susurró a Louis en el oído. El castaño miró a Kim.
La rubia sonrió. —Vodka, quiero mucho vodka. —Gritó dejándose llevar por la música.
—Y-yo no sé. —Se avergonzó Louis. Recibió un beso de parte de Harry y lo perdió de vista. El castaño sintió un tirón de su brazo.
—Ven malvabisquito, ¡baila conmigo!
Y así se mezclaron entre los sudorosos cuerpos en la improvisada pista de baile y con movimientos sueltos y descordinados comenzaron a bailar. Cuando Harry volvió con un vaso de Whisky y dos de vodka con naranja, con Liam pisándole los talones cada uno bailó con su pareja correspondiente.
En un momento de la noche Louis se sintió mareado, pero a la vez más vivo que nunca. Harry comenzó una guerra de chupitos por dinero contra Mike un jugador de fútbol.
—¡Bebe hijo de puta, bebe! —Gritaban todos los presentes en el patio. Harry ya llevaba diez chupitos de tequila en su organismo y el récord de la casa eran veinte.
Louis reía tomado de su brazo de a ratos girándole el rostro besándolo.
—Mira enano... —Con dificultad Harry gritó con un vasito con una sustancia translúcida de unos 40° en su interior—, este es por ti. —Se lo llevó a la boca y lo bebió como si este fuera agua.
Louis volvió a reír complacido. Dejando que Harry volviera a besarlo mientras sus traviesas manos recorrían su cuerpo. El rizado lanzó un grito de victoria, seguido de los vitoreos de los presentes. Mike quien no quería perder, bebió tres más quedando uno arriba del rizado. Quien envió todo a la mierda y se empino media botella de tequila. —Soy el puto campeón, coronénme hijos de perra.
Recibió sus cien libras de premio y se llevó a su trofeo con patas dentro para seguir bailando hasta que su organismo no pueda más.
¿Pueden creer que YO suba capítulo y aún no ha pasado la semana?
Wow, porque yo no.
Y eso es todo familia, dale Like si te ha gustado, un besazo. Hasta pronto.
All the Love.
Ingrid x.