Damian.
El cuerpo de la agente Thai fue arrastrado hacia la mesa de control. Este cayó violentamente sobre el frío metal y la sustituta de victoria, al parecer llamada Amera, sin perder el tiempo comienza a conectarla a miles de cables que aparecieron de pronto. Como si de la nada sirvieran. Uno de los tres chicos, de nombre Kian, que anteriormente estaba en la habitación tratando de cazarlas apareció de pronto con un ordenador portátil y lo conecto a un lado.
Le habían inyectado el un suero experimental que ayudaría al cuerpo recordar.
—Es experimental - comentó- aún no lo hemos probado en humanos y cabe la posibilidad de que no salga bien
—Me da igual. Quiero ver cómo salió de aquí.
—Las descargas electroestáticas que ha recibido le han dañado la parte de la memoria. Pero si tenemos suerte habrá sido una pérdida de varias horas de recuerdo. No en su totalidad- empezó a explicar el chico.
—Conecta ya.
Kian asintió y escribió algo en el teclado del portátil. Un ruido de maquinaria pesada invadió la habitación y sentí como Amera me empujaba lentamente hacia atrás. Me tendió unas gafas y nos posiciónamos en la pared opuesta a donde la Agente Thai se encontraba.
Un cristal bajo delante nuestra. Se veía limpio y transparente.
Me entraron ganas de tocarlo. Parecía frágil y a la vez iba a servir de protección, pero me frene. Coloque las manos tras la espalda y permanecí erguido observando.
El cuerpo de la agente Thai se envolvió en un haz de luz que se convirtió en una especia de esfera redonda que la cubrió por completo.
Proyectaba una luz brillante azul y blanca. Como la electricidad en estado puro y su cuerpo se movió de pronto como si de una descarga se tratara.
—Le estamos administrando pequeñas descargas en el cerebro para estimular su funcionamiento.
— ¿Algún momento en concreto para ver señor?- preguntó Kian como si hablara de la programación televisiva.
— ¿Cuándo fue la última vez que fue vista en la agente?- pregunté.
—En la cena.
—Media hora después de la cena- ordene.
—Muy bien- el chico susurro más para sí mismo que para el resto de presentes.
Acerco la pantalla hacia mí y pude ver cómo unas imágenes salían en ella.
Entonces lo comprendí.
Eran sus recuerdos.
En ellos veía el pasillo blanco. Era como mirar tras sus ojos.
Caminaba observando el lugar hasta llegar a la biblioteca. Todo se volvió oscuro y luego se hizo la luz.
Observe sus manos palpar el muro y el pilar de un lado de la biblioteca hasta que éste se movió.
— ¿Qué es esto?- pregunté irritado -¿Desde cuándo hay escondites?
—No lo sé señor- aseguró el chico que seguía tecleando algo a un lado de la pantalla. Unos extraños geogrificos aparecían de la nada.
Observe como caminaba por una especia de túnel hasta llegar a algo que era una habitación. Un tanque de cristal a un lado. Dos Mesas paralelas y un suelo negro.
La imagen desapareció durante segundos hasta que reapareció en el momento en el cual sus ojos miraban al su alrededor como si estuviera en una caja cerrada.
Aparecieron unos pies y seguidamente unos ojos que reconocía en seguida.
Una mirada asustada y de alerta mostraban los ojos de Shao. Observe como se metía en el interior de aquel habitáculo
La imagen desapareció, apareció y de nuevo se borró.
Me estaba enfadando. Perdía el hilo de lo que podía ver.
— ¿No hay sonido?
—Aún estamos trabajando en ello señor- aseguró Kian.
La imagen empezó a parpadear. Pero fue suficiente como para ver unos pies, luego al científico Miani con unos papeles. Luego atado a una silla y seguidamente traspasando una pared. Para seguidamente desaparecer mientras que Thai corría hacia él.
La habitación, los muros y finalmente las ¿cloacas?
Saltó al río desde una altura de vertido y la zona desértica de pruebas.
Nada cuadraba y a la vez todo parecía tener una lógica desconocida.
Cuando la imagen desapareció definitivamente reconstruí el resto de lo sucedido hasta la captura y solo entonces, cuando se apagó la luz que envolvía su cuerpo la observe de una manera distinta.
—Id a ese lugar. Quiero que inspeccionéis cada rincón de la biblioteca y que se prohíba la entrada allí al resto de alumnos. - ordene- quiero el informe lo antes posible.
—Sí señor.
—Y que grabéis todos lo que encontréis. Utilizad las cameras de 360º.
— ¿Qué hacemos con la chica señor?
—Esperad que despierta y sacadle toda la información. Ponedle vigilancia extrema.
— ¿Quiere que nos encarguemos de ella?
Me estaban preguntando si quería que la mataran. Pero no era el momento.
No cuando sabía algo que se me escapaba.
Solo cuando obtuviéramos toda la información pensaría si deshacerme de ella.
—"¿Qué más da una menos?"
—No- dije al final.
Abandone la habitación y camine por los pasillos hasta mi despacho para seguidamente sentarme en la mesa y encender el ordenador.
Busque los planos en él y los observe detenidamente. Muy pocos eran los que podían tener accesos a ellos. Solo los que habían trabajado hasta llegar a los rangos más altos.
— "Hay pocos uniformes rojos- pensé"
Y me di cuenta que una de ellas era Victoria y que estaba desaparecida.
Descolgué el teléfono la mesa y este dio dos cortos tonos.
—Encontrad a la Agente Victoria. - ordene y colgué enseguida.
Para centrarme de nuevo en los planos que aparecieron en la pantalla. Busque en todos hasta llegar a los primeros que teníamos datados del 1942 y en los cuales si aparecieron los pasadizos ocultos que antes no había visto.
Los acerqué despacio para apreciar como una red, nada ordenada recorría todas las instalaciones mediante unas construcción que se encontraban en la antigua cede de experimentación (actual biblioteca) y en la sala de máquinas que actualmente estaba cerrada.
Mande a imprimir el plano y la impresora tras ponerse en marcha escupió un A3 en blanco y negó donde se veía con total precisión todos los pasillos. Y solo cuando en el ordenador los superpuse en las nuevas instalaciones con el terreno seccionado me di cuenta que había una salida al exterior.
Solo una
Al mismo sitio en el que encontramos a las dos agentes novatas.
Deslice el conjunto de los antiguos planos al programa de simulación. Este lentamente los escaneo y leyó los datos que en ellos había. Y poco a poco empezó a formar un perfecto 3D de la zona
Primero vino el terreno que con sus anclajes de zapatas soportaba el peso de las instalaciones. Siguió con los muros interiores y las diferentes habitaciones hasta que llegó a la superficie.
Con varias teclas que pulse lo envié hacia un proyecto que se abrió saliendo de la mesa y formó el 3D. Con las manos lo hice mover y observe como era. Había cosas que ahora no estaban y entonces volví a la mesa.
Me conocía el lugar por completo. Tantos años aquí, empezando como un simple agente hasta llegar a dirigir este lugar, me habían permitir conocer cada rincón del edificio.
Extraje los nuevos planos de hacía cinco años e hice lo mismo que antes. Con la ayuda del programa forme el 3D y solo entonces los superpuse los dos.
Eran muchas líneas así que aísle las que no eran necesarias para ver los pasillos ocultos de una Segunda Guerra Mundial.
Pero lo que más me llamó la atención fueron los túneles que subían por la montaña que a un lado yacía. Se enterraban en su interior y como si pasadizos hechos por unas hormigas subían hacia su cúspide. Ocultos bajo las piedras de una montaña que hasta hacía pocos minutos parecía ser sólida en su interior.
Era una mega construcción jamás vista antes por mí.
Me volví a dirigir hacia el ordenador y extraje la memoria del primer proyecto, para quedar atónito antes lo que allí se escondía.
Si alguien se enteraba y tenía acceso a él.
Tendría en sus manos algo sumamente peligroso.
Holaaaaaa!! Pues el capitulo prometido. Espero que lo disfruten. Como comente anteriormente.
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