Los lobos gruñían bajo al sentirse amenazados por los otros. Las manadas de Jeon y Park se encontraban agrupadas en posición de defensa, atentos a la manada de Youngbae.
Ningunos hacían movimiento alguno, lo único que se escuchaba era el sonido de sus respiraciones pesadas acompañadas de sus gruñidos. Una pequeña señal y la pelea iniciaría.
—No pensé que regresarías — la voz gruesa de Youngbae hizo eco en el lugar —Pensé que una vez estuvieras en brazos de ese alfa no volverías — la burla se hizo presente —Veo que aún quieres a Geonhak.
Sus manos tomaron la espada que estaba clavada en el hombro del pelinegro y la removió introduciéndola aún más provocando que gritos de dolor se escucharán.
—¡Déjalo! — grito desesperado Jimin al ver cómo empezaba a perder la conciencia —No le hagas más daño del que ya le has hecho.
—Dime Jimin, ¿Que harás? — Jungkook se puso alerta al ver que ese hombre se acercaba —¿A quién escogerás? —primero señalo a Jungkook y después a Geonhak —Debes decidir, no puedes quedarte con los dos.
—¡Deja de joderlo! — los dedos de Jungkook hormiguearon al sentir como sus garras querían aparecer —¿Tan miserable eres como para no dejar qué sea feliz?
—Quizá si — trono su cuello y nuevamente sus ojos blancos aparecieron, los cerró breves segundos y cuando los abrió ya habían vuelto a su color natural —Quiero a Jimin, no dejaré que me lo quiten ahora que está tan cerca de mi, ni tú, ni nadie impedirá lo que quiero.
De un movimiento rápido, sin que nadie se lo esperara, Youngbae corrió hacia Jungkook llevándoselo consigo iniciando la pelea.
—¡Jungkook! — Jimin trato de ir en su ayuda pero unos lobos se colocaron frente a él, desenfundo su espada en el momento que estos le atacaron.
Prefería pelear siendo un humano, al cambiar a su forma animal se volvía más ágil pero un blanco más fácil al ser más pequeños que los lobos.
Una horrible pelea había iniciado en el momento que la noche cayó, lobos peleaban entre ellos luchando por asesinar al enemigo y temía por los miembros de su manada.
A lo lejos vio a su padre peleando en su forma animal al igual que Hoseok que se mantenía en su forma humana, no pudo detallar bien en dónde estaban los demás pero sabía que estaban ahí. Desvío su mirada hacia el cuerpo de Geonhak y corrió hacia él notando su estado. Su cuerpo estaba bañado en sangre y prácticamente se encontraba inconsciente, si no hacia algo moriría ahí mismo.
Por otra parte, Jungkook se encontraba luchando contra Youngbae quien le sorprendió por la gran fuerza y agilidad que tenía al momento de pelear. El alfa le empujo lejos metiéndole a ambos entre los árboles, este le dio un puñetazo en el rostro y se quejo al sentir como el hombre rasguñaba parte de sus brazos con uñas muy grandes y afiladas que no noto antes.
Jadeo cansado pero aún así se abalanzó sobre Youngbae, ambos rodaron en el suelo dándose golpes y rasguños tratando de debilitar al otro, Jungkook sintió como las zonas que ese mago tocaban ardían y asumía que estaba usando wolfabe. Retrocedió unos pasos cuando Youngbae iba hacia él a toda prisa, con fuerza impacto su pie en su rostro haciendo que cayera al suelo y se retorciera ahí. Quería convertirse en lobo pero su cuerpo estaba demasiado cansado y el veneno burbujeando en su interior le debilitaba cada segundo que pasaba.
De reojo pudo ver cómo cuerpos de lobos se encontraban tirados en el suelo mientras otros lobos seguían peleando al igual que algunos se mantenían en su forma humana.
Jimin se encontraba peleando contra unos lobos al igual que Hoseok trataba de ayudarle pero eran demasiados, la espada blanca se encontraba bañada en sangre mientras seguía siendo usada para pelear.
Trato de ir en su ayuda pero unas garras se insertaron en su espalda y grito de dolor al sentir como se enterraban aún más, después de eso su cuerpo fue tirado contra un grueso tronco haciendo que golpeara su cabeza y la sangre comenzará a resbalarse por su frente y cuello.
—J-Jimin — murmuró viendo de forma borrosa como el mago iba en dirección de ellos.
El Omega al escuchar la voz de su alfa levanto su rostro y de entre los árboles vio salir algo totalmente diferente. Un hombre de cabello demasiado corto con venas negras atravesando su rostro que le daban un aspecto tétrico al igual que sus ojos blancos sin vida salía de entre los árboles, sosteniéndose a estos con sus largas y filosas garras.
—¿Quién es? — preguntó confundido Hoseok —¿Y Jungkook?
—E-es Youngbae — ambos voltearon a ver a Geonhak que había sacado la espada y dejado a un lado, con dificultad se sento en el suelo sosteniendo su herida —Esa es su verdadera apariencia — Jimin se acercó para ayudarle a sostenerse —Al parecer, Jungkook logro hacer que usará mucho de su poder mágico — tosió y con su mano tapo su boca dejando después a la vista la sangre que ha expulsado —A-al parecer, su magia se está acabando y está dejando ver su verdadera cara — sostuvo con fuerza el brazo del Omega —Jimin, se está debilitando.
—¿Tenemos una oportunidad para acabar con él? — limpio el sudor de su mejilla dejando una mancha rojiza ahí.
—Debemos hacer que gaste más poder — busco con su mirada su espada que se encontraba en el mismo lugar que había quedado tirada cuando se encontró con Youngbae —Ve por mi espada y entrégasela, s-solo así lo lograremos.
—Al tener tu espada y no ser el dueño de esta su poder se incrementará y será corrompido — murmuró entendiendo su plan y el alfa asintió dándole la razón.
—Solo así podremos debilitarlo. Youngbae bebió tu sangre y por eso ahora es más fuerte pero con esa espada todo el poder que ha recibido será arrebatado.
Hoseok que escucho todo se ofreció a traerla, una vez la tuvo Jimin en sus manos suspiro.
—¿Y si no funciona?
—Lo hará, una vez este débil podre ponerle fin a su vida — con cuidado saco el collar plateado que Jimin vio antes —Su alma y la mía están sujetas a esto — agitó levemente el collar, la piedra negra brillo al tener contacto con la luna —Cuando este débil aprovecharé la oportunidad y lo destruiré.
—P-pero tú — observó desesperado al alfa y después a Hoseok que presenciaba todo sin saber que hacer —No puedes, por favor.
—Ey, Jimin — acaricio con delicadeza sus cabellos — No te preocupes por eso, después de todo, yo siempre moriré.
Mordió con fuerza su labio, no quería hacerlo, no quería que otra vez Geonhak se sacrificara, no quería perderlo una vez más.
Un aullido lastimero acompañado de unos quejidos se escuchó, el cuerpo de un lobo fue tirado contra unas rocas haciendo que el crujido de los huesos se escucharán.
—¡Papá! — sus ojos se humedecieron al notar el cuerpo de su padre que no se movía en el suelo. La ira inundó su cuerpo, más lobos rodearon a Youngbae que reía escandalosamente al ver lo que había hecho.
—¡Hazlo, Jimin! — el grito de Geonhak hizo que reaccionara.
A pasos veloces se acercó a Youngbae y le tiró desde una distancia prudente la espada oscura, en el momento que fue sostenida vio como una especie de corriente oscura aparecía entre las manos y la empuñadura.
—Pelea, Youngbae — con su espada apunto al mago que le detallaba con burla, por una extraña razón no hablaba, solo se limitaba a reír y gruñir —No dejaré que sigas dañando a los que amo.
Apretó con fuerza el agarre y suspiro tratando de calmar su mente y corazón, debía ponerle fin a esto.
Cómo si fuera un borrón frente sus ojos, Youngbae se movió desde su lugar llegando hasta Jimin tomándole por sorpresa, el Omega coloco su espada frente su cuerpo deteniendo el impacto. El choque metálico se hizo presente al momento que ellos peleaban, la misma oscuridad apareció pero está era más intensa e iba rodeando poco a poco el cuerpo del mago.
El castaño tomo impulso con uno de sus pies para girarse y hacer un corte profundo en el costado de Youngbae que grito al sentir la herida.
—¿Y Jimin? — Jungkook llegó hasta Hoseok y Geonhak con lentitud sosteniendo su cabeza que no paraba de sangrar.
—Esta peleando con ese maldito — señalo Geonhak al frente, limpio su mejilla que no paraba de sangrar en la zona en dónde recibio un zarpazo haciendo más grande la herida que fue hecha hace dos años.
Se puso de pie y casi cae al suelo si no fuera por Jungkook que le sostuvo con Hoseok.
—Estas muy herido, Geonhak — dijo Hoseok preocupado.
—No es nada, deberías ir con el alfa Daesung — señalo el lugar donde algunos lobos se encontraban protegiendo el cuerpo inconsciente —Jungkook, debo pedirte un favor.
—¿Qué es lo que quieres? — preguntó confundido.
—Llévame hacia ellos— señalo el lugar donde el castaño seguía peleando con el mago.
—¿Pero qué dices? Estás mal herido, es un suicidó que vayas ahí.
—Estoy consiente de eso — comenzó a caminar con cautela de que no fueran vistos —Por eso cuando tengas la oportunidad toma a Jimin y aléjalo de ahí lo suficiente para que este seguro.
Jungkook asintió a las palabras del alfa y le llevo hasta donde pedía, no era sabedor de los planes que tenía pero se veía seguro de lo que estaba punto de hacer. No le llevaría la contraria y haría lo que le decía, ambos tenían el mismo propósito de proteger a Jimin y lo harían.
—Déjame aquí — susurro —Aléjate y cuando tengas la oportunidad llévate a Jimin, ¿Entendido?
—Entendido — murmuró en respuesta.
Ambos alfas reaccionaron en el momento que Jimin había logrado hacer que la espada cayera de las manos de Youngbae cuando le hizo un gran corte en el abdomen y manos, cuando la soltó grito y llevo sus manos hasta el lugar herido que no paraba de sangrar. El mago después sostuvo su cabeza viendo con molestia a Jimin, su cuerpo temblaba debido al cansancio. Geonhak sostuvo su cabeza al sentir el deseo de pelear y manchar sus manos con la sangre de ese alfa que le estaba ayudando.
Golpeo con una mano su cabeza para reaccionar, Youngbae quería nublar su mente para apoderarse de ella y hacer que peleará para ayudarle, así como hizo aquella vez que se enfrentó a Jungkook en el bosque.
Sus alarmas internas se encendieron al ver cómo corría en dirección de Jimin con intención de matarlo, su juicio se había nublado y ya no le importaba nada. Tiro a Jungkook hacia un lado para evitar hacer una locura y corrió en dirección de dónde ellos se encontraban, escucho el grito del alfa llamarlo pero no le hizo caso.
Se colocó frente el cuerpo de Jimin que se encontraba tirado en el suelo e hizo una mueca al sentir como las garras llenas de veneno impactaba en su espalda. El castaño sintió como un déjà vu se hacía presente al presenciar cómo otra vez Geonhak le protegía de esa manera.
Jimin sintió como su espada le era quitada y en ese mismo instante Geonhak la clavaba en el pecho del mago.
—Eso no funcionará — dijo con voz gruesa y llena de burla.
—Yo creo que sí — le mostró el collar y cuando Youngbae lo noto trato de arrebatárselo pero ya era muy tarde.
Con una roca Geonhak la golpeó haciendo que se quebrará.
El mago sostuvo su cabeza mientras enterraba sus garras ahí al sentir como todo su poder estaba desapareciendo al igual que su vida se estaba acabando.
—¡Eres un imbécil! — gruño las palabras al mismo tiempo que se retorcía en el suelo —¡Tu felicidad no durará mucho! — poco a poco fue dejando de moverse al sentir que ya no tenía fuerzas —Nunca serás feliz.
El cuerpo dejo de moverse a los pocos segundos dejando ver cómo se iba descomponiendo quedando solo cenizas en el lugar.
—Lo sé — respondió débil.
Cayó rendido al suelo cuando su cuerpo se sintió desfallecer, las fuerzas lentamente estaban yéndose de su cuerpo.
—Geonhak, t-tu — Jimin que había sido llevado lejos por Jungkook se acerco seguido del alfa al lugar en dónde se encontraba tirado —E-estarás bien, pronto lo estarás.
—N-no te preocupes por eso, Jimin — acaricio sus mejillas suavemente —Finalmente esto acabo y podrás ser feliz, ya no habrá nada que amenace tu felicidad.
—¡No quiero ser feliz a causa de tu muerte! — grito comenzando a derramar lágrimas.
La pelea finalmente ha terminado y las manadas Jeon y Park fueron las vencedoras, todos se encontraban a un costado observando la escena en silencio mientras Taehyung y Hoseok se encargaban de atender a Daesung.
—Sabias que esto pasaría — tosió y sonrió levemente al recomponerse —Ya no pertenezco a este lugar, mi vida anteriormente ya había llegado a su fin y ahora debo regresar al lugar al cual pertenezco. No llores, Jimin, sonríe así como lo hacías cuando éramos más pequeños.
El Omega negó mientras seguía sollozando, aferró sus manos al pecho del alfa y sollozo más fuerte al ver cómo los pies de este comenzaban a convertirse en cenizas.
—J-Jungkook, por favor — dirigió su mirada al chico que se mantenía a una distancia prudente —Prométeme que lo cuidaras, promete que protegerás, amarás y harás feliz a Jimin, es lo único que te pido.
—No debes pedirlo pero aún así te lo prometo, te aseguro que cumpliré mi promesa— sintió pena ante la escena, era algo demasiado doloroso, finalmente todo acabo pero el dolor aún no desaparecía en los corazones de la manada Park, nuevamente veían como alguien que apreciaban debía partir.
Si bien no conocía a Geonhak y deseo matarlo, ahora se sentía fatal sabiendo que su tiempo se ha acabado, él fue alguien importante para su pequeño y ahora su despedida era muy difícil.
—Gracias — el alfa suspiro viendo el cielo estrellado, frente a sus ojos luciérnagas comenzaban a hacer su aparición alumbrando la oscuridad del bosque al igual que las estrellas —Sabes Jimin, te amo y siempre te amare — el menor tomo su mano y la apretó —Por eso, no llores, se feliz y sigue a delante, aunque ahora sientas que no puedes, hazlo. La vida sigue y tienes que afrontar esto. Tienes a personas que te aman, así que sigue luchando todo lo que puedas, se feliz con Jungkook, ama y se amado por ese alfa que ha demostrado lo mucho que te adora — las lágrimas empañaron sus ojos y se deslizaron hasta el suelo llegando a perderse en la grama —Vive mientras puedas y se feliz, recuerda que siempre estaré a tu lado cuidándote.
—Te quiero, Geonhak, gracias por todo— recibió una risita en respuesta.
El cuerpo del alfa lentamente se fue convirtiendo en cenizas dejando ver por última vez como sonreía con sus ojos cerrados mostrando lo aliviado que se sentía. La mano que antes sostenía Jimin desapareció dejando la sensación de vacío. Una brisa fresca apareció llevándose consigo las cenizas y las luciérnagas se encargaron de acompañarlas en su recorrido.
Jungkook abrazo con fuerza el cuerpo de Jimin que lloraba desconsolado en el suelo, su corazón nuevamente dolía ante la perdida de alguien que en su tiempo amo y no merecía sufrir de esa manera. Grito y grito aferrándose al cuerpo de la persona que amaba y saco todo el dolor que su corazón había albergado desde hace mucho tiempo, ahora por fin podía sentir que su corazón se encontraba liviano y en paz al dejar ir esa parte tan importante de su pasado.
El amor que sentía por Geonhak ahora es diferente, sigue siendo importante en la vida del Omega pero se dio cuenta que no le amaba de la misma manera romántica que antes, ya no es igual porque su corazón pertenece a Jungkook.
Al fin ya no se aferraría al recuerdo de Geonhak y ahora podía dejar que se marchara en paz prometiéndole que sería feliz junto a Jungkook quien era la persona que amaba, su alfa destinado, porque si, hace unos días que estuvo en contacto directo con su parte animal tuvieron una larga y profunda plática en dónde descubrió que lo eran.
Aún llorando con ayuda de Jungkook se levantó de su sitio y se aferró a su cuerpo.
—¿Estás bien? — preguntó preocupado el pelinegro sosteniendo por la cintura al Omega.
—Lo estaré — sonrió leve para después dirigirse hacia donde estaba los demás que al verlo se hicieron a un lado dejándole pasar.
—Jimin — murmuró Hoseok y después dirigió su mirada al lobo café que estaba con sus ojos cerrados.
—¿Cómo está papá? — se sentó en sus rodillas y acaricio la cabeza de su padre con lentitud.
—Esta muy débil — el castaño apretó sus labios al escuchar eso —Cuando Youngbae le lanzó metió sus garras cerca de sus costillas haciendo que una buena cantidad del veneno entrara en su sistema — Hoseok trago grueso y desvío su mirada —No sabemos si sobrevivirá — Jimin abrazo al lobo escondiendo su rostro entre su pelaje.
Taehyung abrazo a Hoseok que tenía los ojos llenos de lágrimas y observaron con pena al menor que lloraba. Jungkook se acerco hasta él y acaricio el cuerpo del lobo mientras lágrimas también caían de sus ojos al sentir el dolor de una posible perdida.
—No quiero perderlo, Jungkook — sollozo —No quiero perderlo a él.
—Y no lo harás, tu padre es fuerte — paso su mano por la espalda del omega para reconfortarle y mostrarle su apoyo. Esperaba que sus palabras fueran ciertas y Daesung se recuperará, Jimin no soportaría una perdida tan dolorosa.
Seunghyun aún convertido en su forma animal aulló a la luna siendo seguido por los demás lobos que se encontraban ahí, a lo lejos se escucharon más aullidos acompañando el miedo y dolor que los miembros de ambas manadas sentían. Todos se encontraban tristes y le pidieron ayuda a la diosa Luna por Daesung, para que esté pudiera recuperarse y así la felicidad por fin llegará a las manadas y se quedará con ellos.
🐾🐾🐾
Bueno pues, ¿Que puedo decirles jeje?
Probablemente algunas quieran matarme así que me iré rápidamente de aquí antes de que logren atraparme 👀
Quejas y reclamos hacia la autora pueden colocarlos aquí —>
Los amo mucho mis amados bebés, gracias por apoyarme con esta historia, son los mejores❤️
PD. Con algunas escenas me inspire del mv de Comeback home de Oneus, si gustan véanlo, es genial y más o menos algo así me imaginé que sería está pelea solo que ahi no hay lobos.