Decir que había quedado sorprendido por esa nueva faceta que estaba conociendo de Jimin era poco, tenía más que claro que el Omega era fuerte pero no se esperaba que hasta el punto de dejar a alguien con tres costillas rotas y todo el cuerpo lleno de moretes.
Al llegar a su casa después de haber dejado a Seung en la casa hogar le contó a su padre lo sucedido y él se encargó de investigar todo lo referente a ese alfa que se atrevió a tratar de esa manera al menor. Ya le habían citado para poder darle un escarmiento y evitar así que volviera a tratar mal a otros omegas.
En ese momento se encontraba dudando en si ir o no a la habitación de Jimin, quería pedirle algo pero no sabía si aceptaría o no. Tendría valor y lo haría, de todos modos no perdía nada.
—Jimin —toco la puerta con sus nudillos suavemente —¿Pudo pasar?
—Adelante — al escucharle entro —¿En qué puedo ayudarte? — preguntó mientras dejaba de lado el libro que estaba leyendo.
—Venia a preguntarte algo — cerró la puerta y se acerco hasta él —Pero no se cuál será tu respuesta — mordió sus labios con nerviosismo.
Ya pasaron unos cuantos días desde que salieron y casi se besaban, en ese momento quiso colgar en el árbol más grande a Seung por interrumpir pero no podía hacerlo porque se ganaría un regaño por parte del Omega. Sentía que las cosas iban cambiando poco a poco y con eso se refería a que tenían más encuentros que al cabo de un rato se volvían más íntimos. Podía decir que se estaban haciendo más cercanos porque ahora hasta las conversaciones eran más fluidas.
—No le des tantas vueltas al asunto y dime — le vio divertido — Si no me lo dices no sabré que es lo que quieres.
—Le matas el suspenso al asunto — soltó una risita —Como ya sabrás, falta poco para que sea luna llena — recibió un asentimiento —En la manada ese día hacemos una especie de celebración en dónde acampamos en el bosque para así tener un contacto más directo con nuestro lobo y disfrutar la noche con nuestras familias. Quería saber si quieres acompañarnos — rasco con su dedo su mejilla —Te preguntó por cortesía porque es más que obvio que no dejaré que te quedes tu solo aquí.
—Si dirías eso entonces para que preguntas — rio con gracia —No me dejas opción así que si — se encogió de hombros —Acepto ir con ustedes.
—Te aseguro que disfrutaras mucho ese día — dijo convencido, la emoción comenzaba a burbujear en su interior —Me aseguraré de que así será.
—Si es así, lo esperaré con ansias — Jungkook le contagio la emoción y gracias a él ahora estaba impaciente por que llegara ese día, quería ver cómo celebraban en la mandada.
🐾🐾🐾
Los días pasaron con tanta rapidez que les sorprendía demasiado, la noche de luna llena había llegado y Jimin se encontraba emocionado, más por todo lo que Jungkook le conto.
—¿Así que todos cambian al mismo tiempo e inician una cacería? — el alfa asintió —Eso suena genial.
—¿En tu manada no lo hacían?
—No, ese día lo que hacíamos es que nos reuníamos entre familia y amigos, nada más.
—Que aburrido — soltó sin pensar y se arrepintió porque pensó que el Omega se molestaría.
—Un poco, me ha llamado la atención por todo lo que me cuentas, ¡ya quiero que sea esa noche!
—Yo igual, quiero mostrarte las costumbres de la manada — se acerco e hizo a un lado los cabellos castaños, su alfa se emociono al ver cómo se ponía nervioso el pequeño cuando se acercaba demasiado.
Quería decirle que era su alfa destinado, pero temía como reaccionara ya que Jimin creía firmemente que otro alfa lo era, sentía que solo era cuestión de tiempo y tendría paciencia, poco a poco iba teniendo más cercanía con él así que no apresuraría nada.
La noche llegó y con ello Jimin estaba tan emocionado que le causaba ternura, no paraba de ir de un lado a otro en la cabaña diciendo que ya quería ir al bosque, con los días han tenido una mejor relación con el matrimonio Jeon y ellos en una ocasión le dijeron que le han tomado cariño como si fuera su otro hijo.
Sus padres le habían dicho que se adelantará junto a Jimin, después le alcanzarían porque primero debían organizar la comida que llevarían por si un dado caso les diera hambre.
—Entonces, ¿No sé reúnen entre amigos? — pregunto mientras entrelazaba sus manos detrás de su espalda al mismo tiempo que caminaba junto al alfa.
—No, preferimos pasar este día con nuestras familias, ya sabes — se encogió de hombros —Es un momento más íntimo en dónde se disfruta estar más que todo con la familia o tu pareja — al escuchar eso se sonrojo, sabía que Jungkook no lo había dicho con doble intención pero su Omega últimamente se comportaba de una manera muy distinta cada vez que el pelinegro estaba cerca, parecía un adolescente hormonal.
—Es interesante — trato de cambiar la plática, porque si seguía así, Jungkook notaría su sonrojo. Llegaron al centro del bosque y quedó impresionado al ver la gran cantidad de familias que habían al rededor, en el centro de todos se encontraba una enorme fogata para que el lugar no estuviera lleno de oscuridad, entre los árboles se veía como pequeños cachorros jugaban entre si mientras en otros lugares se veía como familias recién llegaban al lugar para acomodarse y esperar la media noche.
A lo lejos observo a los amigos del alfa y estos al ver que habían llegado les saludaron para después seguir con sus familias acomodando todo.
—¿Qué te parece?
—Es muy lindo todo — siguió viendo a su alrededor —Es un ambiente muy acogedor, es como si todos fueran una enorme familia.
—Y así lo es — regreso su vista al mayor —Nosotros en esta manada mantenemos un gran sentimiento de unidad, es quizá por eso que somos de las mandadas más fuertes.
—Tienes mucha razón, por eso ustedes son de los más fuertes y su unión con todos los miembros es algo admirable, en mi manada si éramos unidos pero no a tal punto como aquí.
—Cada lugar es distinto, no necesariamente tenemos que ser iguales.
—Tienes razón.
Vio fijamente al Omega que admiraba con ojitos brillosos el bosque, se notaba a kilómetros que le estaba gustando el ambiente en el que estaba, además, también se podía notar que estaba disfrutando todo, al inicio tenía miedo de que a Jimin no le gustará pero resultó siendo lo contrario, al parecer le gusta el ambiente hogareño que permanece en la manada.
—Ven conmigo — le pidió de pronto, el menor se mostró confundido.
—¿A dónde?
—Solo sígueme y verás — tomó su pequeña mano y comenzó a guiarlo entre los árboles ganándose miradas curiosas de los presentes.
Al ir caminando lo único que se podía escuchar era el sonido del crujir de las ramas que eran pisadas por ellos, cada vez más se iban alejando de dónde estaban los demás y tenía curiosidad por saber a dónde se dirigían, le había preguntado a Jungkook varias veces hacia donde se dirigían pero este solo se limitaba a contestar que pronto llegarían.
Sus manos seguían entrelazadas y no le molestaba, es más, le agradaba la cálida sensación que le transmitía esa enorme mano que apresaba la suya. Jungkook se detuvo haciendo que también lo hiciera, observo el lugar que se encontraba oscuro, solo era iluminado levemente por los rayos de luna que se colaban entre la espesura de los árboles.
—Aprovechando este día tan especial, quería enseñarle en dónde están ahora — jalo la mano de Jimin haciendo que quedará frente a su cuerpo —Siempre que es noche de luna llena me gusta venir aquí y quiero mostrarte el porque — le dio la vuelta al Omega que quedo viendo al frente.
—¿Qué es-? — calló abruptamente al ver cómo pequeñas lucecitas amarillas comenzaban a iluminar el lugar de a poco hasta que finalmente terminaron adornando toda la zona —Esto es bellísimo — murmuró viendo embelesado todo.
Era una vista mágica, las luciérnagas se habían encargado de iluminar toda esa parte dándole un toque mágico al bosque, sobre todo por la gran cantidad que se han reunido ahí.
—Lo es — murmuró de igual forma Jungkook, se acerco lo suficiente como para posicionarse detrás de Jimin y envolver sus brazos en su cintura —Pero conozco algo aún mucho más hermoso que esto — coloco su barbilla en el hombro del Omega disfrutando el rico aroma a frutos rojos que provenía de su cuello.
—¿A si? ¿Y qué puede ser más hermoso que esto? — no podía desviar su mirada del paisaje, sentía que si lo hacía todo desaparecería y quedaría como un producto de su imaginación.
—Tú, muy claro está — al escucharle enmudeció, se esperaba cualquier cosa menos eso —Eres hermoso, Jimin.
—No hablas enserio — llevo sus pequeñas manos a las del alfa dejándolas encima de las suyas.
—Hablo muy enserio, desde el primer momento en que te vi lo primero que pensé fue en lo hermoso que eres — acaricio de forma suave el vientre del Omega, sintiéndose feliz por como se estremecía bajo su tacto.
—¿Por qué piensas eso de mi? — volteo su cabeza encontrándose con la penetrante mirada del alfa —Es decir, soy como cualquier Omega, puedo afirmar que hay mejores y más hermosos que yo.
—Puede que lo hayan, aunque lo dudo mucho. Tú me cautivaste desde el primer momento, eres un Omega distinto, tu personalidad, tu fortaleza, todo de ti te hace único y provocas que mi alfa se altere por eso.
Abrió sus ojitos sorprendido al escucharle, ¿Entonces Jungkook sentía lo que comenzaba a sentir? Su Omega estaba alterado y todo se debía por la presencia de ese alfa con un rico aroma a miel y limón.
—No lo entiendo — hizo una mueca —Se supone que este es un compromiso por conveniencia, ¿Por qué debería creerte? ¿Cómo no sé qué es un plan para hacerme caer ante ti?
—Porque si así fuera, yo hubiera hecho esto desde un inicio —no lo diría en voz alta pero le dolía un poco la desconfianza de Jimin, pero aún así no se rendiría y avanzaría lo más que pudiera —Te he dado tu espacio y poco a poco me he ido acercando porque quiero hacer todo bien, quiero demostrarte que no soy como aparentaba en un inicio y quiero que veas lo muy capaz que soy de amarte y dar todo por ti.
—J-jungkook, tú… — sé sintió desfallecer ante aquella declaración, no sé lo esperaba y ahora el ambiente había cambiado haciendo que no supera que decir o hacer.
—Me gustas — declaró — No puedo decir que te amo porque no tenemos mucho tiempo de conocernos pero si estoy seguro que tengo una fuerte atracción hacia ti — una fuerte ternura se instalo en su pecho al ver los ojitos brillosos de Jimin que le notaban incrédulos, ese pequeño ser aparentaba rudeza cuando en el fondo era un pequeño muy dulce al cual quería proteger de todo el mundo —Aún no me crees, ¿Verdad? — no espero respuesta y juntó sus labios con los de Jimin disfrutando la textura de estos. Los movió de forma suave incitando al Omega a que correspondiera y así lo hizo, con timidez movió los suyos acoplándolos a los del alfa, sus manos que aún permanecían juntas fueron apretadas por las recientes sensaciones que llegaban a sus cuerpos.
Una fuerte descarga atravesó el cuerpo de Jimin que abrió levemente sus ojitos cuando se separaron del beso, observo a Jungkook y lo que vio hizo que quisiera llorar, el mayor le veía con adoración y amor, tanta que le sorprendía porque según ellos, antes no se querían.
—No quiero presionarte, pero no podía aguantar más, quiero ser tu alfa y que tu seas mi Omega — con delicadeza le dio la vuelta quedando frente a frente —Dame una oportunidad, quiero mostrarte que puedo enamórate, que soy alguien digno para que tú y tu Omega me acepten como su alfa, solo quiero una oportunidad y ya, si esto no funciona no insistiré más.
“¿Cómo puedo decirte que no si me miras con ese hermoso brillo en tus ojos? Mi Omega ya te acepto como su alfa, el único que aún no lo hace es mi parte racional por temor a salir lastimado”.
Quería decirlo pero sería muy apresurado de su parte, además tenía miedo de abrirse a Jungkook tan pronto, por eso sería mejor llevar las cosas con calma.
—Al estar a tu lado, nuevas sensaciones invaden mi ser, no sé que es y tengo un poco de miedo por averiguarlo, hace tiempo mi corazón fue lastimado y tuve una perdida enorme que no quiero volver a repetir, puede que esto sea diferente y mi Omega quiere darte una oportunidad pero no sé que hacer.
La frustración era evidente, quería llorar, estaba feliz por la confesión de Jungkook pero el miedo de enamorarse y perderlo estaba latente ahí pero también quería arriesgarse y volver a enamorarse.
—Entonces hazle caso a tu Omega — sus dedos se entrelazaron — Deja de lado por un momento el lado racional y hazle caso a él y a tu corazón, en muchas ocasiones nuestro lado animal es quien sabe que es lo que en verdad queremos.
Lo medito unos segundos, lo que decía Jungkook era muy cierto, su Omega le pedía desesperadamente que le diera una oportunidad al alfa, le decía que no era una mala idea, que se dieran la oportunidad de nuevamente ser felices y se sintió mal en ese momento ya que por culpa suya su Omega también ha estado sufriendo todo este tiempo, ya era momento de que le permitiera ser feliz.
—Haré lo que me dices, mi Omega quiere darte una oportunidad y eso haremos — sonrió suavemente al ver cómo Jungkook sonreía emocionado
—Gracias, muchas gracias — fue apresado por los fuertes brazos del pelinegro y cuando reacciono le devolvió el abrazo —Ya verás que serás muy feliz, me encargaré de eso.
Esas palabras hicieron que todo el miedo que sentía desapareciera, al ver la reacción del alfa supo que había tomado una buena decisión. Acomodo su cabeza en el hombro del pelinegro y suspiro contento al sentir como su aroma le envolvía de forma suave, se sentía muy bien estar entre sus brazos y en ese momento aunque fuera raro sintió como su gato comenzaba a restregarse de forma cariñosa en el lobo que recibía gustoso la muestra de cariño
🐾🐾🐾
Después de aquella declaración regresaron a dónde estaban los demás miembros de la manada reunidos, se sintió un poco cohibido al tener todas las miradas sobre él, al parecer Jungkook noto su incomodidad porque le tomo de la mano para seguir caminando hasta llevarlo a dónde se encontraban sus padres ya preparando el lugar donde se quedarían.
Se apresuró a ayudar a Minki que se encontraba extendiendo una manta en el suelo junto a Seunghyun para que pudieran acomodarse en el suelo.
—Pensé que tardarían más tiempo en regresar — comento Minki al mismo tiempo que ponía una canasta con comida sobre la manta, después se dedicó a observar a Jimin —¿Todo está bien?
Volteo hacía Jungkook que platicaba con su papá y después regreso la mirada a la mujer —Todo está perfecto.
La mujer le dedico una sonrisa cómplice lo cual hizo que se sonrojara un poco, aunque no lo dijera, sabía que ella noto un cambio.
—Ya casi será media noche — Jungkook llegó detrás suyo y le abrazo por la cintura —¿Cambiarás junto a nosotros? — lo medito unos segundos para después negar.
—No, solo los veré desde aquí — se removió acomodándose mejor entre sus brazos.
—¿Estas seguro? Si no puedo quedarme a hacerte compañía.
—Tranquilo, yo me quedaré aquí, ve junto a tus padres y disfruten esta noche, se lo importante que es para los lobos la noche de luna llena —el alfa asintió no muy convencido y depósito un beso en su mejilla. No sé acostumbraba a las nuevas muestras de cariño pero no le incomodaban tampoco.
Cenaron y hablaron de cualquier cosa para que pasará el tiempo, contaban anécdotas de tiempo atrás, cuando la manada no era tan grande y apenas estaba en crecimiento, también Minki le contó sobre cómo Jungkook desde que era un pequeño ha sido un caprichoso y competitivo de primera.
La luna llegó a su punto exacto en el centro del cielo y todos comenzaron a prepararse para poder cambiar a su forma lobuna, Jimin quedo maravillado por la gran cantidad de lobos que estaban en ese lugar, todos de diferentes colores y tamaños. Cuando vio a Jungkook desnudándose desvío la mirada avergonzado, solo cuando los huesos dejaron de tronar regreso su mirada hacia él quedando sorprendido.
El lobo castaño que veía en sus sueños estaba justo frente a sus ojos, parecía un sueño pero no era así, Jungkook al parecer noto su asombro así que se acerco a él y comenzó a lamer su mano con suavidad.
—Así que tú me estuviste cuidando en mis sueños — comenzó a acariciar detrás de sus orejas, el lobo cerró sus ojos e hizo hacia un lado su gran cabeza en dirección de la mano que le acariciaba —No puedo creerlo — murmuró —Esto es tan confuso, ¿Por qué estuviste en mis sueños? — abrió nuevamente sus ojos mostrando un hermoso y brillante gris.
El lobo solo se le quedó viendo fijamente y cuando se escuchó un aullido por parte del lobo Seunghyun salió corriendo en dirección de los demás lobos, solo ahí noto que la gran parte -por no decir que todos- había cambiado y ahora se encontraban iniciando la cacería de luna llena.
Se acomodo mejor en la manta y atrajo sus piernas hasta su pecho, una suave sonrisa se instalo en su rostro al observar cómo a lo lejos Jungkook correteaba siguiendo una liebre que iba de un lado hacia otro escondiéndose entre las raíces de los árboles. Le parecía muy tierna la manera infantil que se estaba comportando el alfa, cuando regresará a su forma humana tendría que darle muchas respuestas.
No entendía como era posible que su lobo se apareciera en sus sueños, era imposible, nunca había visto al lobo de Jungkook ¿O si?
El sonido de una rama quebrándose le alertó así que desvío su mirada del alfa, agudizó sus sentidos sintiendo de pronto una extraña tensión en el lugar. Observo a sus alrededores tratando de encontrar algún movimiento o algo que le alertara pero nada, parecía que todo fue algo provocado por su mente.
Se relajo en su sitio analizando todo el lugar, a lo lejos los lobos jugaban entre si pero sabía que ninguno de ellos fue el causante de ese ruido.
Detuvo sus ojos en un extraño bulto negro que se encontraba oculto entre la maleza, sintió que su sangre se congelo ante los dorados ojos de ese lobo negro que se camuflajeaba entre la oscuridad de la noche.
No podía apartar la vista de ahí, no quería hacerlo, eso debía ser una jodida broma.
—¡Jimin! — al escuchar como su nombre era gritado desvío su mirada encontrándose a Jungkook preocupado ¿En qué momento cambio a su forma humana? —¿Estás bien?
Abrió su boca levemente mientras le detallaba, ninguna respuesta podía salir de su boca, por eso solo se limito a asentir y desviar su mirada hacia el lugar donde antes estaba ese lobo, solo que ahora la diferencia era que no había nada.
—Algo me dice que no estás bien — se arrodillo frente al Omega y le tomo por los hombros —¿Puedes confiar en mí?
Mordió su labio para después soltarlo y suspirar —Puede que esto sonará tonto — llevo una de sus manos hacia su cabello y tironeo de el por la frustración —C-creo que acabo de ver a alguien importante.
—¿Pero por qué estás tan alterado? Si esa persona es alguien importante debería alegrarte el haberle visto — insistió otra vez, no le gustaba cómo se encontraba el Omega, temía que por como se encontraba tuviera un ataque de pánico o ansiedad. Dejo suaves caricias cuando guardo silencio, al parecer pensando en su respuesta.
—Por que esa persona ya está muerta.
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