Medicine

By evabetancortg

69.6K 4.7K 431

Después de tantas mentiras, es hora de contar la verdad aunque con ello le cueste vida. A cada paso suyo es u... More

Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 36
Capítulo 37
Capítulo 38
Capítulo 39
Capítulo 40
Capítulo 41
Capítulo 42
Capítulo 43
Capítulo 44
Capítulo 45

Capítulo 8

1.5K 115 21
By evabetancortg

- ¿Entonces la chica y tú...?

- Compañeros de trabajo -Aclaro mi garganta con nerviosismo.

Observo la estancia, es impoluta, llena de lujos, jamás había presenciado algo igual, el hombre de la entrada ya no está en su sitio, parece que se ha ido. Trudie desliza el albornoz de seda por sus hombros dejándolo caer sensualmente, no aparta la mirada de mi cuerpo ni un segundo. Sus manos agarran con fuerza el cuello de mi camisa obligándome a caminar hacia atrás quedando sentado en el amplio sofá con ella encima de mí. Mueve sus caderas desesperadamente, acaricia algunos mechones rizados de mi cabeza, desabrocha la camisa viajando por todo mi abdomen desnudo. Sus labios son duros, asimétricos, torpes a decir verdad, no encajan del todo con los míos, coloca mis manos sobre su trasero pidiendo que lo masajee para intensificar el agarre.

- ¿Dónde está tu guardaespaldas? -Rompo el beso recuperando el aliento.

- No te preocupes, se va a su casa cuando tengo compañía.

Una sonrisa maliciosa se me forma en la cara, desabrocho la corbata tan rápido como puedo, la enredo alrededor de su nuca pegándola de nuevo, poco a poco rodeo su cuello con ella y giro sobre nosotros dejándola bajo mi agarre. Aprieto ambos extremos estrechando la tela sobre su garganta, comienza a notar la fuerza, le falta un poco de aire y forcejea con mis musculados brazos para que me aparte, mi agarre comienza a temblar de la euforia, la miro con más deseo que antes, admiro cómo el brillo de sus ojos desaparece lentamente. Suelto de golpe cuando se que está muerta, mi dedo roza su piel hasta su abdomen bajo rozando la lencería. Le quito la ropa interior, está desnuda sobre su sofá, muerta y pálida, busco una bolsa para guardarla y hago lo posible para evitar huellas y marcas que me delaten, uso guantes para limpiar la estancia, su cuerpo y todo aquello que he tocado.

Desaparezco sin molestarme en mostrar una buena presencia, mi actitud está intacta, satisfecho con el resultado. Cuando abro las puertas a la calle ahí está Atenea tiritando, se abraza a sí misma con sus brazos, me dirige una mirada cargada de incordio pero le sonrío arrogante, conozco muy bien los sentimientos que eso le provoca.

- Has tardado dos horas -Reprocha molesta-. O bien eres una máquina sexual o tuvo que invitarte a una larga cena con postre.

- Me encantaría regodearme de lo primero -Guiño un ojo en su dirección, rueda los ojos fastidiada y más sonrío-. Pero eso dejo que lo compruebes tú.

- ¿Entonces? -Suena impaciente, irritada.

- Me aburrí muy rápido, ¿Sabes? Cuando mis padres me compraban un juguete solía durarme unas pocas horas hasta que lo rompía, porque no eran tan divertidos como en la propaganda.

- Harry... -Tapa su cara con ambas manos negando desesperada-. Si las has matado... -Su dedo impacta en mi pecho con descaro-. Vas a ser tú quien se lo explique a Zayn.

- Encantado.

- Bien, porque mañana tienes que presentarte ante él -Asiento anotando mentalmente cómo debo prepararme para un jefe de un sector desconocido-. Tenemos otro problema.

- ¿Cuál? -Señala a la pared donde están nuestras caras, a su lado un nuevo cartel me sorprende-. Mishel Donovan vista última vez en el Psiquiátrico West Pines la noche del miércoles, si la ven, llamar inmediatamente -Leo en voz alta sin creerme del todo lo que veo-. Fantástico, ahora tenemos una verdadera loca suelta por ahí, matando a todo aquel que le moleste cómo respira.

- Tú has matado a tu primera clienta por aburrimiento, creo que os parecéis bastante.

Me lo recrimina entrecerrando los ojos, me juzga con la mirada, elevo los hombros con inocencia. Después de un pesado suspiro pide un taxi, este nos lleva de nuevo hasta la entrada del sendero, ya deben ser las doce de la noche entrada la madrugada oscura. No hay iluminación hasta la llegada a la casa, esta muestra el salón encendido, alguien ha entrado.

Al pasar la puerta vemos a Liam junto con un extraño, este va tatuado, descansa en nuestro sillón con las piernas bien estiradas, ríen mientras brindan con unas cervezas en lata, no parecen borrachos.

- ¿No íbamos a vernos mañana? -Dice ella tan sorprendida como yo.

- Ya te he dicho, hago lo que quiero cuando quiero -Parece una autoridad aunque Atenea no se incomoda con sus palabras, sigue siendo la misma borde de siempre-. Me apetecía conocer al asesino de una interesante clienta.

- ¿Cómo...?

- Yo lo sé todo -Vuelve a cortarla-. No os molestéis en disculparos, habríais provocado una gran perdida de dinero sino llega a ser porque tengo su número de cuenta y nadie la echará en falta.

Atenea parece relajarse tomando asiento, hasta el momento yo también estaba tenso.

- Por cierto, soy Zayn, tu nuevo jefe -Se levanta a mi altura y estrecha su mano con fuerza para saludarme-. Harry ¿No?

- El completo responsable de lo sucedido.

- Ah... Así que fuiste tú solito -Masajea su mentón pensativo, me mira de arriba abajo y sonríe tan arrogante que siento verme en un espejo-. Pensaba que no te negarías a un buen sexo.

Niega divertido, no han venido a buscar nada tan solo a presentarse y hacer par de preguntas sobre lo sucedido hoy que todavía no quieren decir cómo supieron tan rápido lo que ocurrió. Aún así, me alegra que se encarguen de arreglar mis desastres y quedar fuera de culpa. Tomamos un par de cervezas, ella se niega pero igual mantiene una conversación bastante fuera de su tono, incluso puede pasar por una chica normal.

Se van a eso de las dos de la mañana, llevan un par de copas encima pero se mantienen en pie, por otro lado Atenea a penas se molesta en dirigirme la mirada antes de irse a dormir. Tumbado en el sofá, tapado con la manta gruesa, pienso en Mishel; ¿Porqué huiría? ¿Sería por mí? ¿Está buscándome? ¿Tendrá celos de Atenea al enterarse que me fui con ella? ¿Aprovechó la oportunidad porque nosotros nos fuimos?

Masajeo mi frente intentando descifrar el enigma, es imposible que nos encuentre en el bosque, apartados del mundo, en todo caso a ella la pillarán infraganti en cuanto dé la nota por la ciudad. Quiero encontrarla, algo en mí me obliga a protegerla o proteger al mundo de ella, no lo tengo claro pero es un sentimiento que jamás he expresado en mi interior y ahora está brotando, me asusta. ¿Por qué con Atenea no me pasa? No quiero protegerla, o es que quizás no necesita que la protejan.

...

Siento una presión en mi cuerpo, algo me hunde en el sofá, no puedo abrir los ojos tan rápido como me gustaría ni enfoco a la persona encima de mí. La claridad me deja ver al fin a la morena a horcajadas, tiene su cara muy cerca de la mía, puedo oler su aliento mentolado, frunzo el ceño confundido pero no hago ademán de apartarla.

- ¿Qué haces? -Mi voz suena más ronca de lo normal por el poco uso durante el sueño.

- Verificar si reaccionas rápido a una amenaza.

- ¿Eres una amenaza?

- Podría serlo, un cuchillo en mano y ya no estarías aquí.

- Últimamente estás muy a la defensiva -Ambos tomamos asiento despacio, coge una taza de café posada en la mesa y le da un sorbo.

- Estoy atenta, has matado a una mujer por aburrimiento sexual, no sé que te detiene a matarme mientras duermo por cualquier tontería parecida.

- ¿Entonces estás alerta?

Asiente mientras inspecciona su móvil, al parecer tiene muchos mensajes en él y contactos, yo en cambio solo tengo su número y el de Liam quien si tiene algo que decir va primero hacia ella. Me recuesto de nuevo mirando el techo, escucho las teclas pulsarse con ligereza, ríe por lo bajo algo que me parece extraño de ella, luego se levanta para pasearse hasta la cocina. Inconscientemente viajo por su cuerpo, sigue siendo extraordinario, anchas caderas, justa cintura, piernas trabajadas, abdomen plano, pecho esbelto, brazos musculados, cuello estirado, mandíbula marcada, pómulos, grandes ojos claros, fina boca rosada, no puedo dejar de admirar lo diferente que es al resto.

- Zayn quiere vernos hoy, tiene que darnos nuestro dinero y quiere hablar contigo.

- ¿Ahora te chateas con él?

- ¿Algún problema Styles? -Enarca una ceja girando hacia mí-. No me voy a creer que te pongas celoso o algo parecido.

- ¿Yo? -Me siento ofendido por su acusación-. Solo estoy deseando que te quiten esa cara de amargada con un buen polvo.

- Solo se me quitará cuando vaya a tu entierro -Muestra una sonrisa forzada, sarcástica.

En mi interior comienza a brotar las ganas de acorralarla, poner mis manos en su cuello, me levanto despacio caminando en su dirección, se ha dado cuenta pero no hace nada por evitarlo o alejarse. Deja todo lo que tiene en sus manos sobre la mesa, espera que esté frente a ella, cuando logro verla más de cerca retiro un mechón detrás de su oreja, sigue tan seria como antes. Mi cuerpo se aprieta contra ella tan fuerte que su espalda impacta en la nevera, me doy el gusto de sonreír con suspicacia por tenerla bajo mi control, no es más fuerte que yo. Con brutalidad atrapado su garganta con mi mano, la aprieta ligeramente e inclino su cara hacia arriba para que quede viéndome, sus fosas nasales bufan de la molestia que siente en este momento. Acerco mis labios a su cachete, su piel sigue helada, rozo con ellos cada centímetro de su cara, torturando la situación, inhalando el aroma mañanero, el café de su boca, muerdo con sutileza el lóbulo de su oreja y cuando estoy por acercarme a sus labios, una mano tira de mi cabello hacia atrás, golpea un puñetazo en mi mejilla, una patada en mis partes más débiles, cuando voy a atraparlas por la zona herida impacta una rodilla en mi cara.

- No vuelvas a tocarme así -Escupe sus palabras con ira, señala con un dedo amenazante-. Jamás.

Creo innecesario tener que contestar, desaparece de la casa con un gran portazo. Puedo intuir que irá a ver a Zayn, mi móvil vibra, es una dirección de almacenes abandonados, un número desconocido. Me recupero del dolor, cambio la ropa y voy hacia ella caminando y luego en taxi.

El lugar no es nada del otro mundo, por fuera pasa desapercibido aunque por dentro llamaría la atención de cualquier pervertido. No me resulta difícil encontrar con la mirada a Zayn quien habla amigablemente con Atenea, por alguna extraña razón ríen y brindan con unas copas de champán. Me acerco hacia ellos esquivando a las diversas mujeres semidesnudas que intentan tirar de mi chaqueta, tocando mi cabello y rozando mi cara para engatusarme.

- No te esperaba tan pronto -Dice el moreno alzando las manos en alabanza-. Pero no me disgusta.

- ¿Y el dinero? -No tengo paciencia, al menos no después de jugarme el cuello por una droga que no se venderá.

- Todo tuyo -Saca un fajo de billetes debajo del asiento, lo estira para que lo recoja con sutileza y sonríe como si viera la desesperación en mis ojos-. ¿Por qué no nos sentamos? Tenemos mucho de qué hablar.

Todos tomamos asiento, él en un sillón encuerado, a su alrededor bailan varias chicas que trabajan para sus servicios, le acarician y viajan por toda su ropa, no parece molestarle, es como si no las sintiera cerca. A mi lado, Atenea mantiene el entrecejo fruncido, aprieta la mandíbula incordiada con la situación, sus dedos juegan entre sí mientras mueve la pierna derecha con nerviosismo y yo solo observo a ambos, parecen tener un duelo de miradas entre ellos, es incluso raro de presenciar.

- Esta vez no quiero muertes -Informa alzando la voz, usa un tono de autoridad que no había empleado cuando quiso reprocharme la muerte de Trudie-. Es muy importante que estéis armados, algunos de mis hombres irán con ustedes para transporte y cubrir espaldas.

- ¿Drogas? -Pregunta ella sin cambiar de expresión, él niega con una sonrisa pero no muestra los dientes.

- Tienen algo que me pertenece, una persona.

- ¿En ese caso no es más fácil matarlos?

- ¿De qué me sirve matar a alguien si lo que quiero es que me respete? Una boca muerta no puede hablar y quiero que hable, que asuste a todo aquel que intente jugármela.

- Nada de muertes -Afirma dirigiéndome una mirada amenazante, se lo promete al jefe pero me reta a mí.

- Tendréis que ir de noche, así será más difícil que se lo esperen. Uno de mis chicos pasara a buscarles a las doce, él os llevará hasta la dirección donde encontraréis a vuestra caballería escondida entre las sombras, sed cuidadosos con vuestros pasos.

Ambos asentimos, parece satisfecho con el encargo, se inclina de un impulso para levantarse, copiamos su acción quedando cara a cara, extiende una mano hacia Atenea quien la estrecha con gusto y luego hacia mí, de un apretón nos despedimos. Nos acompaña hasta la puerta de salida, allí no se hace presente la música sensual ni los murmullos, guardo el dinero ganado en el dobladillo de mi pantalón y vuelvo a enfrentarme a esa cara arrogante por milésima vez.

- ¿Se puede saber a quién tenemos que sacar? -Dice recordando que el encargo es sobre alguien y no sobre algo.

- A mi hermana -De repente su semblante es serio, no le hace gracia hablar de ello o quizás no le guste dar información de más-. Hay muchas mujeres en ese antro.

- Si se parece a ti será fácil reconocerla.

- Más bien se parece a ti -Deja salir una mueca poco razonable, ninguno entiende a qué se refiere, apenas vuelve a su expresión neutral-. Sacadla y seréis recompensados.

- ¿Tenemos un nombre?

- Scarlett.

Continue Reading

You'll Also Like

2.8K 79 4
Historias diferentes por días especiales cuando dos personas se unen o se reencuentran en circunstancias algo peculiar. Espero que les guste como las...
215K 18.4K 15
¿Cuánto esta bien entregarle al otro? ¿Con cuanto alguien se siente satisfecho? Dinero, fama, éxito.. O tal vez... ¿nuestra propia vida? Fiorella se...
502K 84.3K 69
Kylian Craig tiene claras dos cosas: enamorarse debilita y todo se puede negociar, así que cuando se da cuenta de que una de sus más grandes inversio...
202K 10.3K 71
Aqui encontraras frases unicas de algunas películas famosas de disney, os espero y te guste.... Vos si te gustan no olvidéis votar y comentar!! ¡¡...