Capítulo 54

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-La Encargada te raptó, Lila.-era Diego.-como hizo nuestro padre.

-No es lo mismo.-estaba rodeada, si intentaba algo no le funcionaría.

-Es verdad. Él no asesinó a nuestros padres.-asintió Luther.

-Escúchame, Lila. Naciste El 1 de octubre de 1989, el mismo día que todos nosotros.-le explicó Diego.

-¡Atrás!.-gritó ya asustada cuando notó que nos acercábamos a ella lentamente.

-¡Detente! ¡Espera! ¡Oye! Lila, basta.-la llamó Diego.

-Yo confíe en ti. Te conseguí empleo, te presenté a mi mamá, ¡y me abandonaste!-aprovechó y le reclamó.

-¡Para salvar el mundo!.-gritó.-la encargada te está usando, Lila.

-Te equivocas. Ella me crió. Me ama.-Lila de negaba a aceptarlo y lo entendía, toda su vida entera siendo manipulada.

-Si, ¿Sabes qué?.-Lila miró a Luther.-el amor no debería doler tanto.-le sonrió tiernamente a lo que Lila respondió con un gesto de asco.-lo intenté.

-Tenemos que matarla.-Cinco se volvió a preparar para pelear.
-¡Cinco!.-lo regañé por lo bajo.
-¿Qué?.-cuestionó.
-Basta.-lo apunté.

-Yo me encargo.-le dijo Diego.-Lila, ¿quieres la verdad? Es peligrosa. Y tienes miedo de lo que hará con todo ese poder nuevo. Por eso me arrastraste a La Comisión. Porque sé lo que es amar a gente peligrosa. La diferencia es que... Es recíproco.-sonrió después de mirarnos a todos.

-Cállate.-susurró al borde del llanto.
-Lo único que ella ama es el poder. En cuanto no pueda usarte, va a traicionarte, y sé que, en el fondo, lo sabes.-él ya estaba muy cerca de ella.

Y sabía que ella no le hacía nada porque lo amaba.

-No me conoces, Diego.-él se acercó aún más.

-¿Eso crees?. Sé que podemos ser tu familia si nos lo permites.-ofreció y ella nos miró uno por uno.

Hubo un silencio donde todos esperábamos atentos a su respuesta pero un estruendo repetitivo comenzó a llegar a mis oídos antes de que pudiera reaccionar, un montón de balas volaron.

Lo último que sentí fue como mi cuerpo caía al suelo en cámara lenta.

Cinco Hargreeves.

Mi cuerpo después de una lucha reaccionó y abrí mis ojos.
Miré a mi alrededor viendo todos los cuerpos sobre el suelo, puse más atención al que estaba a mi lado.

-______.-susurré y traté de extender mi mano para tomar la suya pero sentí una fuerte presión en mi brazo.

-Bien.-me sonrió la encargada y pude ver como era su pie el que estaba sobre mi brazo.-sigues vivo. Qué suerte. Llegaste a ver el desenlace.-me apuntó con el arma pero la distrajo un sonido a mi lado.

-Ben... Ben... No... Cinco...-______ estaba viva pero estaba alucinando.

-Oh.-resopló La Encargada con lástima.-tenemos que acabar con su dolor, ¿no crees Cinco?.-me preguntó y se aprovechó que estaba moribunda, soltó mi brazo y lo puso sobre la cabeza de ______.

Sentí un repudio total por esa persona que alguna vez fue mi jefa.

-Un completo desperdicio de talento y potencial de ustedes dos, hubiéramos logrado grandes cosas niños.-fingió una mueca de tristeza.

Su pie presionó más la cabeza de ______ y lo noté por la mueca de dolor de ella.

-Basta. Basta. Basta.-repetí como pude.
-Bien, sólo por ti.-me dio una corta sonrisa, le apuntó y disparó.

Cerré mis ojos y miré hacia arriba evitando a toda costa ver la escena que me había terminando de romper en mil pedazos.

-Maldita. Mil veces maldita.-le escupí con todas mis fuerzas pero sólo llegó a sus pies. Me miró con asco y de igual manera me apuntó, me di por vencido y cerré los ojos esperando que me matara pero ese momento no llegó ya que una persona se adelantó.

Abrí mis ojos y vi como La Encargada se desplomaba sobre el suelo, se acercó alguien por detrás, el sueco.

También me apuntó.

"Tal vez tu apetito excede tus habilidades. Empieza de a poco. Segundos, no décadas".

Ese recuerdo junto con otros llegaron a mi mente dándome la fuerza que necesitaba.

Vi como el sueco retrocedió y me di cuenta que lo estaba logrando.

La Encargada se reincorporó.
Volvió a apuntarme, se alejó.

Se colocó al lado de ______, la bala regresó al arma.

La Encargada me miró y me apuntó de nuevo, regresó unos pasos.

Lila se reincorporó también, la Encargada le apuntó.
Lila se agachó junto al cuerpo de Diego.
La Encargada retrocedió por la entrada al igual que el sueco por la entrada.

Yo me levanté.
_____ se levantó.
Klaus, Allison, Vanya, Diego, Luther también se levantaron.

Aún con mis poderes en funcionamiento corrí hacia dónde iba a aparecer la Encargada.

Y dejé que el tiempo corriera normal una vez que me resguardé.

Lo logré.
Lo hice.

You're Not Better Than Me 2 | Número 5 y Tú Waar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu