El novio de Chile, parte 2

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A la mañana siguiente, España se levantó y llamó a todos sus críos para desayunar, pero faltaba alguien..., a Chile:

-Oye..., falta Chile...-Dijo Venezuela.

En ese momento, España hizo un largo suspiro:

-Déjala, no va a venir...-Dijo el fastidiado español.

-Pero, ¿donde está?-Preguntó Panamá, preocupada.

-No lo se, tan solo déjala, desayunaremos los que estamos.

Mientras tanto, Chile ya se encontraba en la casa de Second Reich, lista para conocer a la familia de su novio:

-¿Estás lista para conocer a mi hijo y a mi nieto?-Preguntó el alemán mayor, bastante feliz.

-Si rectangulito, ¡estoy lista!-Decía Chile, de forma amorosa.

Es ahí donde Second llevó a su novia a una habitación donde allí se encontraba Third Reich con Alemania bebé, en brazos de su papá:

-Vater ("Padre"), ¿quien es esta mujer?-Preguntó Third, un poco molesto.

-Es mi nueva novia hijo, se llama Chile...-Presentó Second.

-Hola..., un gusto Third Reich...-Saludó la chilena, bastante asustada. Sabía a la perfección quien era ese Alemán, el más peligroso de toda Europa.

-El gusto es..., mío..., este es mi hijo, se llama Alemania. Nació hace ya 3 semanas...-Decía el de esvástica, presentando al bebé.

-Awww, es muy tierno, felicitaciones...-Felicitó la de la cola de serpiente.

-Muchas..., gracias-Dijo Third, un poco molesto e incómodo.

-Bien jungs ("Chicos"), vengan, tan solo vamos a desayunar...-Propuso el de cabeza rectangular.

Los dos alemanes y la chilena se dirigieron a la cocina. Ya Second tenía preparado todo, pero varios comentarios dejaron incomoda a Chile.

Pues, en el desayuno, ambos alemanes empezaron a hacer comentarios muy fascistas, en un intento de convencer a la chilena para que pensara igual que ellos:

-El fascismo es de lo mejor..., ¿no es así, vater ("padre")?-Preguntó Third, mostrando esa sonrisa sádica que tanto lo caracteriza.

-sicher ja sohn ("Claro que sí hijo")...-Relataba Second, poniendo aún más incómoda a Chile.

En todo el desayuno, padre e hijo hablaron maravillas de la ideología política. Mientras más avanzaba la charla, más alagos recibía el fascismo por parte de los alemanes, algo que hizo que Chile tomara una decisión:

-Emm, muchachos, me tengo que ir...-Mintió la Chilena.

-Pero, ¿warum? ("¿Porqué?")-Preguntó el de cabeza rectangular.

-Nada, solo que..., no quiero molestar a Third..., tiene que atender a su bebé y, además, le prometí a mi papá que esta tarde tenía que hacer algo con él...-Sudaba de temor la Chilena.

-Emmm, está bien estrellita..., luego nos vemos, adiós...-Saludó cálidamente a su novia.

Chile llegó a su casa muy asustada. Abrió silenciosamente la puerta para que nadie se despertara pero España lo estaba:

-¿Donde estabas cría?-Preguntó el español, enojado.

-Oh..., papá..., emmm, me fui a comprar...-Mintió nuevamente la chilena.

-¿Entonces donde están las cosas que compraste?-Preguntó España, aún más enojado.

Chile empezó a sudar, ya no podía mentir más, por ende, dijo la verdad:

-No papá, no fui a comprar nada, fui a ver a..., mi novio...-Dijo Chile.

-*Suspira fuertemente*, TE DIJE QUE NO FUERAS ALLÍ...-Gritó España.

-Escucha pa..., no estoy de humor para pelear, estoy muy asustada y confundida, quiero ir a dormir...-Aclaró la chica de cola de serpiente.

-Pero, ¿te pasó algo?-Preguntó preocupado el español.

-No..., estoy bien...

Mientras el tricolor español veía a su hija irse a su habitación, se quedó bastante pensativo y preocupado. Conocía bien a Chile, no estaba bien, algo le estaba pasando.

Españita, un padre ejemplar Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora