Españita, un padre ejemplar

Dientitos de porcelana

-Alemania, a mis críos les pasó igual que a ti...

-¿En que?-preguntó el alemán, curioso.

-Sobre los famosos dolores de dientes...-Respondió España.

-Oh, ahora recuerdo, ya sabes lo que hizo mi Vater ("padre"), pero ¿qué hiciste tu para calmarle el dolor a..., 21 bebés?-Preguntó el tricolor Alemán, haciendo énfasis en las dos ultimas palabras.

-Bueno..., no fui al médico, me las arreglé sólo chaval...

-¿QUÉ?-Gritaron la mayoría de countryhumans.

-Jeje, si, déjenme contarles...-Reía el español, preparado para relatar otro recuerdo.

(COMIENZO DEL RECUERDO)

Era un día como cualquier otro. España se había levantado para limpiar la casa hasta que uno de los bebés comenzó a llorar fuertemente, algo muy raro en ellos, ya que siempre se levantaban con pequeños sollozos.

Curiosamente, Costa Rica comenzó el llanto, uno de los bebés que menos lloraba. España la alzó con el fin de calmarla:

-Shh shh shh, pequeña, no lloreis más, ¿porque estos llantos tan fuertes?, no es muy normal en ti bebé. Ven, vamos a la cocina así no despiertas a tus hermanos, shh shh shh...-Seguía calmando el español a su hija.

El tricolor español siguió meceando y calmando a su niña, pero veía que no lo lograba, ya estaba comenzando a desesperarse, pues no sabía cuál era su problema.

El español la revisó por todos lados, pero nada calmaba los fuertes llantos de Costa Rica:

-No se cual puede ser tu problema mi niña..., shh shh shh, ya calma Costa Rica, vais a despertar a tu hermano...

En ese momento, al tricolor español se le ocurrió una idea. No quería llevar a su hija al médico porque eso implicaba dejar solos a todos sus otros hijos, esa no era la idea. Llamó por teléfono a Francia, ella podría llegar a saber el problema:

-Francia, chavala...

-¿Oui? ("¿Si?")

-Necesito que me digas los posibles dolores de un bebé..., ademas de los cólicos...

-Oh..., son muchos Spagne ("España"), pero los más comunes son fiebre, dolores musculares, dientes...-Decía la francesa.

España, apenas escuchó todo eso, comenzó a desesperarse aún más:

-Ok, gracias vecina...-Cortó la llamada inmediatamente.

El padre tricolor empezó a tomarle la fiebre a su bebé, pero dio que tenía normal, así que ese problema fue descartado.

Empezó a tocarle lentamente los músculos, pero no le dolía absolutamente nada...

Entonces..., ¿pueden ser los dolores de sus primeros dientes?

España había escuchado de ese tipo de dolores, pero no sabía curarlos. Lo que se le ocurrió hacer fue darle algo congelado, siempre calma todo tipo de dolores.

El inexperto padre le dio a su hija un pequeño hielo sacado de la nevera para que lo pudiera morder.

Costa Rica comenzó a morder y chupar el hielo, eso hizo que dejara de llorar tan intensamente, como si el dolor ya hubiera calmado, lo cual fue un alivio para el español.

Dejó a su hija sentada en su silla de bebés y fue a buscar a sus otros hijos para alimentarlos.

Mientras que los demás se alimentaban solos, Costa Rica seguía con el hielo mientras que Chile era alimentada por su padre.

Ese mismo día, cuando la noche apareció, Costa Rica durmió con su papá, pues este tenía miedo de que le pasara algo con los dientes.

Durante toda esa noche, la pequeña se levantaba con fuertes llantos de dolor, lo cual un poco entristecía al español, quería que ese dolor se le pasara. Cada vez que lloraba, la calmaba con un nuevo hielo y ligeros meceos:

-Ya princesa, ereis muy fuerte chavala, eso es, muerde el hielo, eso debe calmar tu dolor. Menos mal que dormisteis conmigo esta noche,  espero que tu hermana Chile no se ponga celosa, jeje..., bien bebé, así se hace, ya calma, no tienes que temer, ¡papi España está aquí contigo!-Le hablaba el español a su hija, eso la distraía y la hacía dormir, ya que le hablaban cálidamente.

Y así el español pasó una larga y tediosa noche atendiendo los dientitos de porcelana de su hija.

(FIN DEL RECUERDO)

-Entonces, ¿a cada bebé le dabas un hielo para que lo masticara?-Preguntó Ucrania, un poco confundida.

-Pues claro, así hice con todos...

-¡Papá era muy cálido con nosotros!-Dijo Costa Rica con una gran sonrisa.

-Si..., con algunos wey...-Dijo Mexico, disgustado.