Capítulo 19| Blanco en negro

667 111 60
                                    

Sábado 9 de Noviembre.

—No es necesario —comentó Dann al ver las intenciones de Rachell— Se va a curar sólo.

—Aún así hay que limpiar la herida. Sanará más rápido— ella sostuvo con fuerza el pie de Dann y lo miró directo a los ojos—. Déjame hacerlo.

Dann sabía que no saldría triunfante ante su mirada. Tragó grueso y liberó su pie de su agarre. Miró a Rachell hacer todo con suma cautela, no quería lastimarlo. El frío parecía más congelante al estar al lado del agua. Aunque Dann no lo sentía porque ya estaba acostumbrado, para Rachell la madrugada comenzaba a ser una tortura.

Se apresuró a sanar la herida de Dann, y por más que le ponía alcohol, a él parecía no dolerle. Pensó que otro en su lugar pegaría de gritos.

—¿No lo sientes? —curioseó Rachell. A lo que Dann solo negó con la cabeza—. ¿Y en verdad puede sanar sólo? Quiero decir, es que literalmente faltaba muy poco para que te arrancaran el pie —rió.

—Lo juro. Tal vez tarde como tres días en que se cree otro pedazo de piel que oculte el hueso.

Rachell entendió, limpió la sangre, y por último cubrió todo su tobillo con una venda blanca.

—Creo que ya quedó listo.

Él observó, y aunque no se lo dijo, quedó agradecido.

Vio a Rachell abrazarse a sí misma mientras observaba el lago, parecía preocupada y alerta, pues miraba a sus espaldas en cada minuto.

—Vamos a la cueva —anunció Dann al momento de levantarse de la roca

Rachell lo siguió de inmediato, y mientras caminaban decidió contarle lo que había ocurrido. Tal vez a Dann le interesaba saber, o tal vez no, pero sentía la necesidad de que supiera todo.

—Oye —le llamó—. Sobre la ropa que me diste... Terminó empapada de sangre y rota, así que tuve que tirarla.

—Está bien. Me pasa seguido.

—Te creo —añadió—. ¿Crees que pueda quedarme algunos días en la cueva? Después de lo de hoy, creo que April debe odiarme aún más.

—No lo hace.

—No lo sabes —contestó.

—Te lo digo porque lo sé. April es muy buena hasta parecer codependiente, y está muy ilusionada contigo, te considera una amiga —hizo una larga pausa, y luego añadió—: Además, ¿con quien te quedarías en la cueva?

—Pensé que podríamos estar juntos el fin de semana —soltó de repente.

Dann tragó grueso y sólo le regaló una sonrisa forzada. Le pareció descarada la manera en la que se lo había dicho, y también creyó que sonó tan cursi que fue capaz de ponerle la cara roja.

Mientras avanzaban, en cada paso sentía a Rachell más cerca de él. Y por un momento creyó conveniente alejarse, pero se regañó mentalmente. Si hacía eso estaría dando un paso atrás en su plan, así que su única opción fue dejar a Rachell que se acercara a él, y él quizá también acercarse a ella.

Rachell se abrazó a sí misma, de verdad que sentía frío. Incluso sus dientes chocaban cuando temblaba.

Con una sonrisa traviesa, se acercó a Dann y rodeó su brazo con sus manos. Haciendo al hombre lobo dar un salto. Dann respiró profundo cuando cerró los ojos, tragandose su propia molestia.

—Dann, ¿tú no sientes frío? —consultó.

—No.

—¿Cómo lo logras?

Luna de Noviembre [Oscuros #1] [FINALIZADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora