Capítulo 10| Eternidad.

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Dann había estado alejado desde aquella noche. Se sentía cansado, con un estrés y algo que parecía perseguirlo a donde fuera.

Su transformación en hombre lobo comenzaba a ser dolorosa, algo que le era insoportable a decir verdad. Y fue cuando no pudo lograr su transformación que cayó de rodillas y manos al suelo, y frente a él encontró su reflejo.

Su cabello obscuro estaba arruinado por ese color blanco que había aparecido de repente.

—Mierda —lamentó en un susurro. Mientras que a su mente, los vagos recuerdos se hicieron presentes.







Hay pocas luces, la única está a lo lejos y no es más que una antorcha.

Con dos sombras sentadas en el suelo frente a frente; a la derecha se observa a una mujer de cabello muy largo que mantiene atado con trenzas y mechones colgando de su frente. A su izquierda hay un niño muy delgado y jorobado.

Muéstrame la mano —dijo ella.

El niño le extendió su mano sin chistar y ella la observó. Tomó una benda de cuero que se encontraba a su lado con lo que le cubrió la mano derecha.

—¿Puede repetirme para que es esto? —mencionó el niño.

—La marca para la eternidad. Solo la gente como tú tiene esta marca tan especial. En el mundo solo existen dos personas con una misma marca, a veces el destino la pone en personas completamente diferentes —explicaba Ella con toda la calma posible.

—¿Por qué? —cuestionó el joven Dann mientras seguían cubriendo su mano.

—Esto pasa solamente con la raza de lobos. Es trabajo del lobo encontrar a la otra persona que comparta su misma marca.

—¿Cual es su propósito? —preguntó cuando terminaron de cubrirle la mano.

Entonces Ella lo miró y le regaló una sonrisa, esas sonrisas que cuando las miras entiendes que puedes confiar a ciegas.

—Un lobo nace y obtiene un alma gemela, con la cual debe pasar el resto de su vida. A veces el alma gemela se refleja en un hermano, en una madre, en un hijo, una pareja, amigo e incluso en alguien que no conoces.

Dann estaba curioso por saber más sobre eso.

—¿Cómo se siente? —averiguó.

—Es un sentimiento tan incondicional e imposible de describir. Cuando encuentres la tuya, entenderás.

—¿Y qué pasa si no lo encuentro? —intentó entender ya que no obtuvo una respuesta clara a su anterior pregunta.

—No encontrar no es lo mismo que perder. Cuando un lobo pierde su alma gemela pierde su vida, porque sin uno no funciona el otro.

—Oh —soltó, agachando la cabeza. Era tan joven e ignorante que realmente no entendía nada.

Pero entonces, Ella quiso ser más clara con él, pues veía en su mirada la insistencia. Y no quería dejarlo en duda.

—Algo en ti va a cambiar, y lo vas a notar de inmediato. Tus acciones, tu físico, tus sentimientos y pensamientos van a pasar de nada a todo en tan solo un instante —finalizó.







Dann parecía estar en una encrucijada. Cada vez que pensaba en Rachell, aquella marca en su mano se hacía presente en su mente, y se negaba absolutamente a creer que ella sea la portadora.

Luna de Noviembre [Oscuros #1] [FINALIZADA]Where stories live. Discover now