Capítulo 14| Recuerdo, inocente.

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Viernes 8 de Noviembre.

Admito que Dann me hacía sentir algo extraño desde el momento en que lo conocí. Extraño en casi todos los sentidos, sentía que lo conocía y eso me hacía querer averiguar de dónde, y por lo tanto mantenerme a su lado.

Y después de saber lo que esa marca significaba todo parecía haber cobrado sentido.

Si bien aún estaba dudosa sobre el cambio tan repentino en sus palabras, pasar del odio al tal vez resultaba confuso.

Dann se fue luego de despedirse de mí y con un apretón de manos que resultó incómodo y gracioso.

Caminé hasta el instituto, pero me sorprendió ver que no habían muchas personas.

—¡Hola, Rachell! —se acercó Rob, dando brincos hasta mi lado— ¿Qué haces aquí?

—Hola. Bueno, yo venía a lo de siempre, para ayudarles.

—¿Nadie te dijo? —cuestionó él— Hoy no vendrán muchos chicos a ayudar, están más enfocados en lo de la fiesta de esta noche.

—Oh, cierto. La fiesta.

—Irás, ¿verdad? —preguntó poniéndose frente a mí— dime que sí. He reservado los boletos, prometo que será una noche divertida —trató de convencerme con una sonrisa ladina y un golpe de codo.

Se veía muy emocionado, y ver que no era muy cercano a otros compañeros me hacía creer que era igual de solitario que yo. Y eso me convencía de ir con él.

—Sí, iré —respondí y de inmediato comenzó a reír.

—Chicos, que alegría verlos aquí. ¿Asistirán a la fiesta?

El señor James llegó de repente, parecía apresurado por los últimos detalles; sus manos llenas de tierra y la ropa manchada.

—Si. Estaremos allá, ¿usted irá? —le averigüé.

—Bueno... —agachó la cabeza mientras se sacudía las manos, nervioso— Estoy un poco ocupado, lo mas seguro es que no pueda ir.

—Oh. No sé preocupe, lo entendemos —dije.

—¿Estuvo de caza, profesor? —inquirió Rob, captando nuestra atención y luego al punto donde miraba: los zapatos del profesor.

—¿Disculpe? —él parecía más enfadado que confuso.

—Sus botas tienen lodo, parece que fue una buena caza. Aunque tengo entendido que está prohibido en esta zona —se inclinó a él para decirle algo en susurros—. Si quiere mi consejo, hágalo los fines de semana después de las cinco de la mañana, los oficiales toman descanso de su revisión a esa hora.

Él sonrió un poco incómodo, no respondió, al contrario, cambió de plática.

—Bien. Los dejo, porque aún falta mucho por hacer. Espero que la pasen de maravilla, chicos —finalizó el señor James y se fue.

Observé las escasas marcas que sus zapatos dejaban en el camino. También tenían forma de triángulo y hexágono. Era demasiado sospechoso que él y Rob tuvieran los mismos zapatos, incluso que los mismos tuvieran lodo.

Pero decidí alejar aquellos pensamientos de mi cabeza por un momento, no era posible que yo sospeche del señor James, ¡mucho menos de Rob!

—¿Qué harás ahora? Yo no tengo mucho por hacer y aun queda mucho para la fiesta —mencionó Rob, mirando el reloj en su muñeca—, así que... ¿Qué te parece un helado?

Yo acepté de inmediato y ambos comenzamos a caminar, entre algunos juegos sobre los colores de los autos y cosas del pueblo.

—¿Tienes hermanos? —decidí preguntar.

Luna de Noviembre [Oscuros #1] [FINALIZADA]Where stories live. Discover now