Os dirán que soy resentida, pero no son contarán que vuestro padre asesinó al mío. Mi padre que solo protegía nuestro hogar, que hizo de todo por salvarme. No os dirán tampoco que Amaury secuestró a una de mis amigas más queridas pensando que era yo, que la entregó al legado Arnaldo para que pasara los peores tormentos, y la dejó morir. 

Os dirán que fui cruel con vuestro padre, pero no os dirán que él intentó aprovecharse de mi vulnerabilidad para hacerme daño. Luego se arrepintió, es cierto. Pero el daño ya estaba hecho. Y cuando lo encanté por primera vez, yo ni siquiera sabía de mi poder. 

Él rompió su promesa conmigo. Le di un hogar, alivié a vuestra madre Alix de sus tormentos. Le di una casa, un apellido, una herencia y comodidades. Y él me pagó esa prosperidad con traición. Ya veis que una moneda tiene dos caras, y a mi parecer, mis acciones con él están plenamente justificadas.

En cuanto a Jehane, lamento con sinceridad las cosas por las que tuvo que pasar en sus últimos años. Fue muy tarde para arrepentirme, y cuando mi ira ya había pasado, no había nada que remediar.

Debéis saber que no ordené la muerte de ninguno de sus padres. Lo de Guillenma en verdad fue de esperarse. La encerraron en una abadía por hereje, estoy segura de que las monjas aguardaron la primera oportunidad para deshacerse de ella. Yo no he puesto un pie en esa abadía en años, me causa malos recuerdos.

En cuanto a mi ex esposo, Peyre Roger, es cierto que fui a hacerle una visita. Por mucho tiempo le guardé un afecto especial. Él fue amable conmigo durante nuestro matrimonio, aunque también abusó de mí en varias oportunidades. Solo que en ese entonces yo no lo veía de esa manera. Para todos en esa sociedad es normal entregar a una muchacha de catorce a un hombre mayor, y esperan que solo abra las piernas para satisfacer a su marido, cosa que hice con dolor y muy a mi pesar. Era su deber de esposo, supongo. Ni Actea ni Iseth están muy contentas cuando les cuento de esas vivencias, ellas lo ven de otro modo. Y después de mucho tiempo yo también lo he entendido.

Tal vez así, al ser consciente de lo que viví en ese matrimonio, fue que empecé a sentir rencor hacia él. Por esas noches de abuso, por su silencio cuando su hermano Jourdain me mortificaba. Por mentirme, por complotar con Guillenma el aborto de mi primer hijo. En fin, supongo que vos entendéis bien lo que es un matrimonio infeliz. Así que por eso fui a verlo, porque quería saber si estaba arrepentido. Le hice pedirme perdón, y así lo hizo. Me quedé satisfecha con eso. Y luego me enteré que mi encantamiento duró más de lo esperado, y que eso lo llevó a la locura. Fue la culpa y el arrepentimiento lo que lo mató. 

Me declaro culpable de hacer que Jehane no llorara la muerte de su madre, me aproveché de esos trágicos sucesos para vengarme de ella. Sigo convencida de que se lo merecían. No me arrepiento de eso, para qué voy a mentiros. Quería que ella supiera, que lo viviera. Que entendiese lo que yo sentí al saberme sola, sin afecto de nadie, incapaz de llorar porque ya nada tenía sentido. Por lo que me contasteis ayer supongo que el resultado fue un éxito.

Si, también alejé a Luc de Maureilham de ella, y me atrevo a afirmar que ese ha sido mi encantamiento más exitoso hasta ahora. Me apena mucho saber que el hijo de mis amigos falleció en la cruzada, pero sé que fue feliz desde que se alejó de Jehane. Tuvisteis que estar allí para entenderlo. No visteis sus ojos, su sonrisa, su calma. No me arrepiento de eso, pues al borrar a la mujer que amó sin ser correspondido, le devolví la paz a su alma. 

Esa táctica de encantamiento no funcionó bien con Caleb de Entenza, por lo que me contáis, una parte de él era consciente del daño que le hacía a Jehane. No quise que fuera de esa manera, pensé que lo hice tal cual como pasó con Luc. Supongo que cuando los sentimientos son más intensos es necesario hacer un esfuerzo adicional para borrarlos.

Los diarios de Jehane de CabaretWhere stories live. Discover now