Las lágrimas no paraban de bajar por sus mejillas, por más que trataba de contenerlas era imposible no llorar, tenía puesta la mirada en un punto fijo de la nada, podía escuchar como si corazón se estaba rompiendo con una dolorosa lentitud, su respiración era cada vez más agitada, sus manos temblaban su mente solo repetía una sola frase.
Está saliendo con alguien.
Se llevó las manos al rostro y se apoyó en sus rodillas retraídas hacía él. Dejó que el llanto se apoderara completamente, quizá eso calmaría un poco el dolor.
Solo necesitaba eso.
—Fluke ¿Qué pasa? ¿Por qué estás llorando en el piso? —preguntó Note poniéndose en cuclillas frente a Fluke— Fluke.
El castaño no podía hablar y solo negó con la cabeza sin levantar la mirada.
—Lo viste ¿Cierto? —cuestionó poniendo una mano sobre el hombro de Fluke— ¿Quieres hablar sobre eso?
Fluke volvió a negar sin decir ni una sola palabra.
—De acuerdo, solo recuerda que no es el fin del mundo ¿Está bien? Te esperaré en el coche. Tómate tu tiempo.
Sabiendo que el castaño no respondería, Note se puso de pie y dándole una mirada a Fluke, se fue de ahí.
(...)
—¿Te sientes mejor? —interrogó en cuanto Fluke abrió la puerta del coche y se subió.
—Creo que sí —dijo Fluke con una voz débil mientras jugaba nerviosamente con sus manos en su regazo y mirando a la nada.
Fluke se puso sus lentes oscuros para ocultar sus ojos rojos.
En auto se puso en marcha. El trayecto fue muy silencioso, lo que preocupó a Note ya que Fluke siempre fue muy hablador, siempre estaba sonriendo y riendo de cualquier tontería, pero ahora era como si Fluke estuviera mentalmente en otro lado.
Pronto llegaron a su destino y Fluke automáticamente bajó del vehículo caminando detrás de Note con la vista en el piso.
—Que bueno que llegaron —dijo News acercándose— Hola Fluke —saludó con una sonrisa— ¿Por qué no vas donde Ohm?
Fluke asintió e hizo el esfuerzo de sonreír, pero solo salió una triste sonrisa.
El castaño caminó lentamente. No quería encontrarse con Ohm, no quería hablarle, porque temía romperse aún más.
Con la mirada trató de buscar un lugar vacío al que ir, faltaba para que el evento empezara así que tenía tiempo para pensar.
Soltando un suspiro empezó a caminar hasta una banca vacía.
—Hey, hola Nong —saludó Ohm desde atrás de Fluke.
El castaño detuvo su andar y miró al frente.
¿Qué debía hacer ahora?
¿Quizá correr?
¿Quizá fingir que estaba bien?
¿O simplemente llorar en frente de Ohm?
—¿Fluke? —insistió Ohm acercándose más al castaño.
De acuerdo, había tomado una decisión, y no importaba si su corazón se rompía más.
Respirando profundamente, por fin enfrentó a Ohm.
—Hola Ohm —dijo con una leve sonrisa.
—¿Por qué traes lentes oscuros? —preguntó el azabache tratando de quitárselos.
