Sentimiento oprimido.

CAPITULO CUARENTA Y SIETE.

Llegaron al hospital, Taehyung corrió con el cuerpo de Jungkook en sus brazos el personal médico se acercó de inmediato y se llevaron al omega hacia cuidados intensivos, Jimin y Taehyung se quedaron en la sala de espera el alfa no despegaba la mirada de la puerta dónde Jungkook había desaparecido con los médicos. Por otro lado Jimin le marcaba a Yoongi necesitaba de su alfa, necesitaba que la voz de su alfa le dijera que todo estaría bien, que su amigo estaría bien.

-  Jiminie, te siento angustiado, paso algo.

Y para el fue inevitable que las lágrimas no salierán de sus ojos y los sollozos de su boca, Yoongi se alarmó y agarró sus pertenencias del estudio para salir corriendo hacia el auto.

-  Minnie, dime dónde estás cariño.

-  En el hospital, Jungkook... Te necesito alfa, por favor.

Jimin sentía un nudo en la garganta cada vez que recordaba a Jungkook, como lo arrastró escaleras abajo, luego Jennie encima de su amigo, volvió a sollozar más alto no solo él, su omega, su lobo estaba llorando de miedo, pedía a su alfa, pedía a su amigo, pedía que por una vez las cosas fueran normales para su familia, su manada.

-  Vida, envíame tu ubicación por un mensaje, estaré a tu lado pronto, respira Jiminie, nuestro cachorro te necesita, yo te necesito amor.

Así Yoongi no pudiera verlo asintió con su cabeza y colgó la llamada enviando su ubicación al alfa, cuando esté recibió el mensaje agradeció que Jin estuviera cuidando de cachorro junto con Namjoon. Jimin seco sus lágrimas y pudo sentir que la mano de alguien acariciaba su cabeza torpemente, se topo con la mirada angustiada de Taehyung le causó gracia que lo consolara como si estuviera acariciando un perro.

-  Sabes que hay mejores maneras de consolar verdad.

-  Digamos que es mi mejor manera para consolar a un desconocido, además tienes alfa, no quiero morir todavía.

Jimin sonrió que Taehyung no tuviera los recuerdos de antes no le quitaba su escencia, ambos tomaron asiento en la sala de espera, los ojos de Taehyung dejaban ver su característico color dorado y ámbar estos siempre atentos a cualquier señal sobre Jungkook, Jimin después de todo se permitió sonreír.

-  ¿Lo quieres?- Taehyung desvío la mirada hacia el omega que tenía a su lado y la regreso a dónde la tenía inicialmente más respondió su pregunta.

-  Creo que la palabra querer se queda corta para expresar lo que siento por él, se que perdí la memoria, pero mi lobo y mi corazón se sienten diferentes cuándo estoy a su lado, verlo sonreír, verlo con ese pequeño bultito en su vientre genera mil emociones que no puedo explicar. Sabes la memoria se pierde con los años, los recuerdos se vuelven borrosos cuando envejecemos pero el alma nunca olvida, ella permanece joven, intacta con todos las emociones a flor de piel, por eso dicen que cuando mueres ves tú vida pasar, porque tú alma te ayuda a recordar todo aquello que habías dejado en el olvido.

-  Tu cerebro olvido todo lo que viviste con él, pero tú alma no será capaz de olvidarlo.

-  Exacto.

Todo volvió a quedar en silencio y para Jimin fue inevitable no pensar en Yoongi, el también sentía una conexión especial con su alfa, tal vez su alfa ere ese hilo rojo de la leyenda japonesa. Y lo sintió, pudo sentir a Yoongi corriendo hacia él por lo que solo alzo su mirada y al instante pudo ver a su alfa agitado buscándolo.

-  Yoonie- y aquel susurro fue suficiente para que Yoongi diera con él corriendo a abrazarlo y Jimin aferrándose a su espalda.

-  Jiminie, que pasó, por qué tienes sangre en tu ropa, estás bien, hablame pequeño.