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El trato de Caleb había cambiado por completo. No se como, ni cuando, o por que sucedió de tal manera. Ahora no me miraba de manera intimidante, o como si quisiera ver mas allá de lo que ve, me miraba como una amiga, tal y como lo habíamos acordado pero diferente. Creo que ahora me ve mas como una amiga, que como antes. Gano confianza conmigo, y con confianza no me refiero a que me cuentes cosas sobre su vida, sino a que me cuenta cosas como "hoy me hablo Lucy, iré a verla a la salida del instituto" No me molestaba, por mas que Amber y Danny me digan que estaba celosa, no lo sentía así. Creo que lo que mas me molestaba era que mas que amiga, parecía un amigo.

Esta semana nos habíamos visto mucho mas tiempo de lo normal. Nos juntamos en mi casa para terminar el trabajo de comunicación, siempre en mi casa. Nunca en la suya, y nunca menciono el por que allí no, siempre evadía mi pregunta. Siempre a la salida del instituto, y mamá muchas veces lo invito a cenar. Ya le agradaba, le agradaba incluso a Max. Mi padre aun lo observaba como si se tratara de un experimento raro, pero su trato era bueno mas allá de esa mirada.

Su celular no dejaba de sonar en ningún momento, y era realmente molesto. Y siempre se trataba de una chica diferente.

¡Af! Debo acostumbrarme a este nuevo amigo.

El único amigo varón que había tenido desde siempre, es Danny. Pero Danny es totalmente diferente a Caleb. Debe ser por eso que no me acostumbro, y a decir verdad... jamas trate con chicos como él.

Era sábado, y hoy era la fiesta de la que habían hablado Amber y Danny. Como siempre, no tenia ánimos para salir. Pero al tener amigos que aman las fiestas, logras acostumbrarte... incluso cuando sientes que no encajas.

Llegamos a la casa en donde se estaba realizando la enorme fiesta, repleta de adolescentes y jóvenes adultos. Mis oídos tardan en adaptarse al sonido de la fuerte musica.

–¡Vayamos por algo de beber! –grita Amber por encima de la musica, y empieza a caminar por entre medio de las personas que se encontraban bailando. Con Danny la seguimos de forma costosa hasta llegar a la barra, el barman le pide identificación y Amber se la da sin problemas. No se de donde demonios la saco. Cuando la miro con el ceño fruncido se encoge de hombros sonriendo.

–Su cuñado se la hizo –me informa Danny lo suficientemente bajo para que solo yo pudiera escuchar.

–De hecho nos la hizo a todos.

Amber me pasa mi identificación, y me asombro al ver lo bien hecha que esta. 

–Como si la usara...

–Creeme, Isis. Lo harás.

Amber me sonríe con una botella de cerveza en su mano, sonrío negando con la cabeza para luego ver a Danny con una cerveza también. Ambos al obtener su bebida se dirigen a la pista de baile, mientras que yo me quedo en la barra riendo por sus pasos.

–Que sorpresa verte aquí, Donovan.

Miro hacia mi derecha y lo veo sonriéndome. Los botones de su camisa azul a cuadros estaban ligeramente desabotonados. Caleb no tenia el cuerpo de un Dios griego, pero eso no quería decir que no lo tenia bien trabajado. Normal, digamos. Su cabello castaño estaba algo revuelto, y una delicada barba comenzaba a nacerle.

–No, no lo es –le hago señas con la cabeza, y se gira para ver a Amber y Danny. Cuando ellos notan que los observan, lo saludan y Caleb a ellos.

–¿Quieres que te invite algo de beber?

–Dudo que lo que me invites sea agua.

–¿Alguna vez has bebido alcohol?

–No tengo la edad suficiente.

Tal vez (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora