♕ 34: Luz - FINAL. ♕

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La sangre goteaba de las manos de Perrie, roja, espesa; el vestido que llevaba hecho jirones tenía salpicaduras también, así como las puntas de su cabello rubio. Su mirada era ámbar, oro líquido recién fundido sobre sus pupilas, Louis casi sintió la calidez de su mirada ardiente.

El mundo a su alrededor se tensó, un dolor ajeno le nació en la base del pecho... Harry..., esa sangre... el príncipe omega palideció y tropezó hacia atrás. Ser Isaak lo recibió entre sus brazos y lo estabilizó.

—Louis Tomlinson, es un honor verte de nuevo, aunque no voy a mentir, estoy un poco decepcionada de que no estés muerto —la bruja sonrió y se dobló en una burlesca reverencia mientras el resto de la sala la miraba con temor. Niall Horan desenfundó su espada sin pensarlo, la apuntó contra ella—, oh, príncipe Niall ¿Cómo está su hermosa esposa?

—Da la vuelta y vete —siseó Niall sin un ápice de miedo, Skyler, a su derecha, detrás de su hombro, comenzó a reaccionar de su shock; aún tenía lágrimas en las mejillas, pero la furia que le quemó en el pecho se oscureció por los segundos que le tomó hilar sus pensamientos. Había sangre en las manos de la bruja... goteaba, se deslizaba entre sus dedos delgados y ella... Skyler no sentía a Chris.

—Si yo fuera tú, príncipe, bajaría esa espada y me iría. Esta pelea no te corresponde a ti —exclamó la bruja mientras miraba a Skyler, una sonrisa oscura se pintó en sus labios carnosos—. Tampoco para ti, princesa, pero creo que hoy has perdido más de lo que alguien soportaría, así que no voy a causarte más dolor... mientras te mantengas alejada de mi.

Skyler la ignoró:

— ¿Dónde está Christopher? —su voz era helada, su mirada era glacial, su piel se tornó aún más blanca.

Perrie la fulminó con la mirada, pero la sonrisa permaneció en sus labios. Sus ojos dorados siguieron escaneando la habitación hasta que reparó en el omega moreno a un lado de Louis, alzó las cejas en impresión cuando repasó la figura de Zayn y la de su hijo entre sus brazos.

—Ah..., tu debes ser el omega de ese alfa.

Zayn palideció.

— ¿De qué estás hablando? —Niall no bajó la espada, no hoy, no nunca. El brillo del acero valyrio resaltó bajo el último destello del atardecer, la noche que lo llevó consigo segundos después.

Louis solo la miró con los ojos arremolinados de lágrimas; seguía sintiendo el dolor de Harry, aún lo notaba con vida, pero Liam... la misma emoción se pintó en los ojos del omega a su derecha. Su mejor amigo debería seguir con vida, si no, Zayn ya lo habría sentido pero... ¿De quién era esa sangre?

Skyler gritó entonces:

— ¡¿Dónde está Chris?! —el horror trepó en su cuerpo y agarrotó sus músculos, pero el miedo se leía en su rostro, la ira se combinó. Aire frío y aire caliente, un tornado nació en la princesa.

Por primera vez, los ojos de Perrie perdieron un poco de su brillo, y por un pequeño instante ella se apagó, como una estrella a la que se le acababa el brillo.

—El amor es peligroso, ¿no? —dijo esta con la voz hueca, sin dirigirse a nadie en particular—. Aquí está la prueba. Han perdido mucho hoy, pero siguen luchando. Y pueden perderlo todo, pero seguirán luchando ¿no es así? Heme aquí. Pero mi hermano... —Perrie negó con la cabeza—. He perdido tanto, pero nunca pensé que lo perdería a él, no pensé que yo tendría que hacerlo.

Skyler gritó, la furia encarnada mientras se lanzaba a la princesa, pero Niall la retuvo al mismo tiempo en que Perrie alzó la mano como si ella solo fuera una mota de polvo en el aire. Un destello púrpura y ambos primos salieron lanzados por el salón, golpeándose en la pared y perdiendo la consciencia.

Drakhae [l.s]Where stories live. Discover now