Capítulo 15

1K 54 0
                                    


Tres días llevamos con Julia en este inmenso bosque, ninguna de las dos tiene energía para seguir. El tiempo pasa sin consuelo, no hay manera que podamos dejar atrás la inmensidad de este bosque que nos rodea. El hambre nos consume, mi estómago vive gruñendo de hambre creo que mis pupilas gustativas ya han perdido todo rastro de gusto. El sueño me vence ya casi no me puedo mantener parada, los pies me duelen de tanto caminar. Julia está mucho peor que yo, parece un fantasma andante ya casi ni hablar solo asiente a mis ideas.

El día de hoy amaneció nublado, creo que se viene un tormenta solo espero que nos dejen de buscar algún tipo de refugio para que pueda dormir un rato, necesito descansar pero tengo mucha necesidad de vivir. Pienso en mi familia, en Lorena y Nicolás ¿me estarán buscando? Hace un par de días que siento mi estómago revuelto, rengo arcadas pero debe de ser producto de la falta de alimentación.

Estaba metida en mi mundo imaginario cuando escucho un estruendo - ¿Qué fue eso? – le pregunto a Julia pero no nos podemos tener a pensar ya que cada vez se escuchan más.

-¡¡¡Nos disparan!!! – grita Julia y ambas salimos corriendo entre la desesperación y el miedo, presas del pánico nos separamos. No me detengo a respirar sigo corriendo, saco fuerzas del fondo de mi alma aunque mi piernas me duelan y sienta que se desprenden con cada paso que doy. Necesito vivir, quiero vivir.

No sé cuánto tiempo estuve corriendo, habrán sido minutos u horas pero no me detengo sigo avanzando, mi vida depende de ello. Llego a la orilla de un río y me doy cuenta que tengo demasiada sed, tomo agua con mis manos y bebo.

Mis labios están quebrados por la sequedad y la falta de agua, no sé cuánto tiempo estoy bebiendo agua pero de golpe siento náuseas y devuelvo todo lo que había bebido. Mi estómago está vacío y creo que lo me abusé tomando demasiada agua de golpe. Vuelvo a intentar tomar agua pero más tranquila y de a poco.

Me relajo un poco, necesito descansar un segundo para poder seguir hasta que me doy cuenta que estoy sola ¿dónde está Julia? ¡MIERDA! Espero que esté bien, y ahora qué hago ¿sigo o me vuelvo a buscarla? Pero este bosque es inmenso no la voy a encontrar nunca, todo nos va a suceder a nosotras. Suspiro indignada, era lo último que me faltaba: perder a Julia.

Termino de beber agua, ya estoy saciada, levanto la vista para observar el lugar que me rodea y ver si hay algún lugar donde me pueda esconder. Entre la persecución y la lluvia que se está por largar no sé cuánto tiempo duraré, solo espero que sea el suficiente hasta que la ayuda llegue ¿llegará? No lo sé pero voy a tratar de mantenerme con vida aunque lo creo medio imposible dado que tengo que volver a buscar a Julia.

Veo que hay unas rocas cerca de un árbol capaz pueda subirme y escalar un poco para taparme con la arboleda. Al primer intento no lo logro, no tengo la fuerza suficiente como para elevar el peso de mi propio cuerpo, pero no bajo los brazos a pesar del dolor que me produjo las raspaduras con el árbol, vuelvo a intentarlo y lo consigo.

Logro sentarme en una de las ramas, todo el cuerpo me duele trato de silenciar el dolor que me consume lentamente. De golpe viene a mí una frase que siempre me hace pensar en Nicolás "En mi recuerdo se queda tu vida". Lo extraño a más no poder, me hace falta su presencia, sus abrazos, su contención. Quiero volver a sentir en mis sentidos ese aroma a tierra mojada y madera. Ese futuro que veía juntos armando una familia, ahora lo veo lejos y distante, todo va a quedar como un simple recuerdo de lo que podría haber sido felicidad.

No me doy cuenta que me quedo dormida con la imagen de Nicolás sonriente en mi mente. Una sonrisa se dibuja en mi rostro mientras caigo rendida al sueño. La lluvia se cierne sobre el bosque y el agua cada vez cae con mayor fuerza, me despierto y sonrió al estar, un día más, viva. Ese olor a tierra mojada conocido y desconocido al mismo tiempo hace que algo en mi interior se despierte.

MI LUGAR EN EL MUNDOOnde histórias criam vida. Descubra agora