Fanfiction sobre la relación de los protagonistas de la película erótica Polaca 365DNI
Anna Maria Sieklucka y Michelle Morrone.
Todo lo narrado es producto de mi imaginación, investigación de campo acerca de sus vidas y de las propias anécdotas de l...
Me escabuyo de debajo del brazo masiso de Lukazs. Dios que ha tardado en dormirse esta vez aun cuando he decidido ver la película más aburrida del mundo. Lo escucho roncar ligeramente, lo que es una señal de que no se despertará así la tercera guerra mundial de inicio incluso a su lado. Me coloco mi bata de noche encima del pijama y salgo de la habitación, no si antes esconderle el teléfono en la maleta deshecha y dejarle una nota escrita en la mesa de noche por si despierta. "No puedo dormir, fui a dar un paseo nocturno. Regreso pronto".
Mientras voy de camino al encuentro con mi coestrella me siento mal por lo que he hecho. Odio mentir y mucho más a las personas que aprecio pero no estaba lista para mantener relaciones con él y se lo atribuí al cansancio. Lukazs cómo todo un caballero no insistió con el tema y nos acurrucamos a ver la tele mientras mi cabeza estaba en cualquier lugar menos allí.
Texteo a Michele de que estoy llegando pero no es necesario que me responda porque es la única persona que está en el jardín a éstas horas de la noche. No me ha sentido llegar ni tampoco el mensaje que le he enviado y sólo se percata de mi presencia cuando estoy parada justo sobre su cabeza.
-Buenos dias.- le sonrío a sus ojos nublados que me miran de manera dulce y en un movimiento rápido estoy en sus brazos, como un bebé, acunada. Por algún motivo espero un beso apasionado, cargado de toda la tensión sexual que se respira entre nosotros y de toda la excitación que teniamos unas cuantas horas atrás pero no llega. En cambio me acaricia el rostro, mirándome bonito y me besa la frente.
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-Ahora si son buenos- sonrío, no puedo dejar de hacerlo. Me siento tan bien con él y olvido por éste instante todo el drama que está sucediendo con Lukazs. -¿cómo estás?
-Ahora bien.
-¿Estuvo demasiado mal con tu novio fantasma?- se encoge, apenado.
-Ahora haz visto que no es un fantasma.
-Es tan feo como uno.- abro mi boca, ofendida pero a la vez incapaz de no reír. Él se vitorea por el chiste de mal gusto y le golpeo el pecho.
-¡Micky!- su rostro está radiante con una sonrisa y se niega a que salga de sus brazos así que me acuna nuevamente la cabeza con las manos y me atrae hacia él de manera firme. Como diciendo "Es aquí que debes estar y punto" y me río por lo bajo, encantada de la vida. -No hablamos del tema. Se disculpó por la escena de celos de hace unos días.- le informo. Tenía que conseguir el valor para enfrentarlo tarde o temprano. Nos quedamos así por no se cuanto tiempo. De esas veces que no necesitas hablar o entablar una conversación para sentirte a gusto y de no ser porque todo mi ser está demasiado alerta al tenerlo tan cerca me hubiese quedado dormida allí, en sus brazos. -¿Y qué te pareció la escena?- me encojo en él, recordando mis manos intrépidas y atrevidas de esa mañana. Por culpa de la llegada de Lukazs no había podido ver el resultado de las tomas así que no tengo idea de cómo se había visto. Me muerdo el labio ante el recuerdo de su masculinidad en mis dedos, su cara de sorpresa, sus gestos al estar excitado.
