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Cuando se estacionaron en la carretera y caminaron dentro del bosque, el castaño se imaginó que el alfa quería mostrarle una cascada, un huerto tal vez o un campo de flores, pero jamás pensó que estarían parados frente a una pequeña casa abandonada. El lugar había sufrido un incendio y casi todo estaba destruido; el techo tenía agujeros, las paredes se estaban cayendo y el aire aún olía a humo.

En medio de lo que antes fue la sala había un baúl que se destacaba por su buen estado, como si no perteneciera ahí. Harry fue el primero en acercarse, abriéndolo lentamente. Dentro del baúl había un tocadiscos, un vestido, algunos libros y una fotografía.

La fotografía fue lo primero que llamó la atención de Louis, en ella había una hermosa omega con un niño pequeño de cabello rizado en sus brazos. Obviamente era Harry.

"No tienes que hacer esto" el omega murmuró. Pero H si quería hacerlo, por primera vez, deseaba hacerlo.

"Está era una casa de prostitución" El alfa pronunció lentamente "Aquí retenían a los omegas, entre ellos, mi madre- y yo"

Louis comenzó a dar vueltas por el lugar, atento a la historia del rizado; no podía ignorar el sufrimiento que escondían las paredes pero intentaba imaginarse a un pequeño niño con cabello alborotado corriendo libre por los pasillos.

"La mataron en la habitación de al lado" el alfa dijo, Louis volvió a la realidad con un escalofrío "En cuánto tuve oportunidad, envié a todos los omegas a Las Cuevas y quemé este asqueroso lugar con todos los alfas que lo custodiaban"

El omega se arrodilló frente al baúl, examinando las cosas dentro. El tocadiscos estaba roto, la fotografía y el vestido tenían algunas manchas de sangre seca y todos esos libros empolvados- a su madre le encantaba leer sobre amor.

Extendió su mano hacía un libro de pasta roja; viejo y maltratado, las hojas se estaban desprendiendo y parecía haber sido releído miles de veces. 'La bestia y el cachorro' se podía ver en letras doradas que se estaban despintando. Estaba por abrirlo, cuando el libro le fue arrebatado de las manos. 

"¡No!" Harry comenzó a hiperventilar, aferrándose al libro como si fuera un tesoro y una maldición "No puedes leer esto- no puedes, ¡vas a dejarme si lo lees!"

"¡Esta bien!" Louis frunció el ceño, guiando las manos del alfa hasta que el libro quedó guardado en su abrigo "Yo no quiero saber de nada que pueda alejarme de ti. Si quisiera leer ese libro, ya te lo habría quitado de las manos"

La mirada de Louis era tenaz, pero en su rostro había una sonrisa, esas que solo le mostraba a él.

Louis era su cachorro, salvaje y testarudo, que también era educado y bondadoso. Tan tímido que le parecía imposible que siempre fuera el centro de atención. Siempre comprensivo, pero jamás dejaba de retarlo. ¿Eso se sentía estar enamorado?

"¿Quieres bailar conmigo?" El castaño preguntó para distraerlo, tomando su mano para guiarla hasta su cintura.

"No tenemos música"

"No la necesitamos" Louis comenzó a moverlos, bailando alrededor de la habitación como si en verdad hubiera una orquesta tocando la canción más hermosa del mundo.

"¿Debería preguntar cómo es que bailas tan bien?" Harry preguntó, recuperando la calma, sonriendo.

"Clases de baile, por supuesto" Louis dijo y ambos se rieron "No hubiera sido el omega perfecto si no me obligaban a bailar con vestidos ridículos, ¿no?"

cachorro [ls]Where stories live. Discover now