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H A R R Y

El alfa despertó de golpe en cuanto Louis se removió entre sus brazos. Ambos sabían que no fue una decisión sabia dejarse llevar por el deseo y terminar juntos en la cama, conociendo la crítica condición de salud del castaño (y la crítica condición de sus corazones), pero para los jóvenes amantes, todo siempre iba de un extremo a otro. Se amaban, se odiaban y se amaban incluso cuando se odiaban.

Tal vez fue la manera en la que Harry le besó el cuello o la forma en la que Louis se montó sobre él, dejándolo poner las manos en su vientre mientras lo anudaba. Tal vez fue la luna, que presenció todas las noches que se extrañaron y los iluminó con cariño cuando por fin encontraron su camino de regreso al otro.

Harry no recordaba cómo era estar sobrio, hasta que regresó a Louis. Muchos alfas enamorados dicen que la esencia de sus omegas los altera, pero eso estaba muy alejado de su realidad. El castaño le traía paz, un hogar al que pertenecer y la mejor versión de si mismo. Su hijo y su omega estaban junto a él, a salvo, y era más de lo que un hombre podía pedir para ser feliz. Más de lo que una bestia merecía.

Louis brincó de la cama, corriendo hacía el baño con pies descalzos y una manta arrastrándose. El remordimiento también lo siguió de cerca; su cuerpo era evidencia del amor que seguía sintiendo por Harry, aunque deseaba que no fuera así. El rizado tenía morfina en los dedos y su toque, siempre cuidadoso, le decía que todo lo que necesitaba podía hallarlo en él.

Harry lo siguió de cerca, inclinándose con él para que pudiera vomitar en el escusado. Después tomó todas las almohadas y mantas de las que disponían y las llevó al baño, rodeando a Louis con ellas para que pudiera estar cómodo. El omega recargó su cabeza sobre el pecho de Harry y cerró los ojos cuando sus manos acunaron su estómago.
Era demasiado difícil pelear con el orgullo que lo detenía de abrir su corazón a H, pero aún más complicado ignorar el instinto que le rogaba que se entregara al alfa.

"Tal vez te sentirías mejor con un buen desayuno" Intentó animarlo "¿Qué tal un cóctel de frutas?"

Louis alzó la vista y H juró que esos lindos ojos cansados serían su muerte. Como si fuera heroína, el omega se metía en su sistema y lo intoxicaba.

"Estaba pensando más en un hot dog con crema batida y helado de limón encima"

"Pequeño cachorro raro" Harry sonrió amplio, pero se detuvo cuando la manga de la bata de Louis se alzó, revelando su muñeca, antebrazo y palma de la mano llena de cortaduras y arañazos viejos "¿Qué te pasó?"

Louis desvío la mirada, escondiendo el brazo de inmediato, enojado "Nada"

"No mientas"

"No preguntes"

H suspiró, desafiando con la mirada al único ser que podía ser tan necio como él. En un tiempo, el alfa conocía cada pensamiento de Louis. Ahora, frente a él, estaba el mismo chico de mejillas rosadas, pero había una sombra cubriéndolo.

"Te amo, Louis" el alfa enfrentó la dulce rendición y casi sonrió cuando el cuerpo del omega tembló.

"No puedes amarme. Ya ni siquiera me conoces" el castaño soltó con amargura. Y Harry sabía que tenía razón. Ya le había causado tanto daño que le parecía justo si Louis decidía apuñalarlo en el corazón: la daga ya estaba en posición, el castaño tenía el cabo en la mano.

cachorro [ls]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora