cachorro [ls]

1.5

L O U I S

"¿Dónde vamos?" El omega preguntó por quinta vez. El alfa que lo estaba escoltando lo había sacado por un corredor oscuro "¡Necesito que me respondas!"

"Silencio, omega" el guardia masculló y Louis tragó en seco.

Intentó dejar de caminar pero el alfa, de un simple jalón, lo arrastró hasta el final del corredor, donde dos camionetas negras los estaban esperando con otro par de lobos "Entra"

"No" Louis estampó los pies intentando que no lo metieran en el vehículo "Primero quiero saber donde esta H"

"¿H? Para estas alturas" uno de los hombres habló con burla "Olvidándose de ti"

Louis no lo creía. El guardia lo tomó de los brazos para lanzarlo dentro. Nadie hablaba, nadie se movía.

"Ya tenemos al omega, jefe" uno de los hombres que estaba sentado de copiloto hablaba por teléfono "¿Qué hacemos con él?"

Louis afinó su oído lo más que pudo, incluso se inclinó un poco para poder oír algo. El alfa a su lado le guiñó un ojo.

"Hagan lo que quieran con él pero no puede ser encontrado"

Louis contuvo el aliento mientras las lágrimas se escapaban de sus ojos. Harry no podía hacerle eso, ¿verdad? Pero entonces, estos eran los lobos de Harry y él ya no lo quería, ¿no?

"¿Q-qué me harán?" preguntó en un susurro tembloroso y el alfa sentado del otro lado lo miró morbosamente.

"¿Qué deseas, muñequita?" La mano callosa lo tomó de la mejilla.

"Déjalo Frank, nos darán más dinero por él si esta intacto" El otro alfa habló.

"Q-quiero irme a casa, por favor" Louis pidió intentando sonar valiente. La voz se le rompió.

"Lastima omega, en la manada de H ya no eres bienvenido" el copiloto se burló.

El incómodo viaje se alargó por varios kilómetros y Louis intentó bajarse del carro varías veces, pero como los alfas no podían lastimarlo, optaron que la mejor opción sería liberar feromonas en exceso para mantenerlo sumiso. Más tarde llegaron a un lugar extraño, parecía una casa pero era mucho más grande y no había nada más que carretera alrededor.

"¿Qué traen ahí, eh?" Una señora vieja salió de la casa, con un vestido entubado y un cigarro en su boca. Louis gimió de miedo cuando el aire lo golpeó y el olor fuerte de la alfa se hizo presente.

"Le trajimos mercancía, alfa Vany" al que llamaban Frank, habló "¿Cuánto nos da por esta preciosura?"

La señora los hizo pasar a la empolvada sala, donde inspeccionó a Louis. Se notaba que el lugar no estaba habitado, sin embargo, había alfas con pistolas custodiando por doquier. El omega cerró los ojos.

"Es lindo, tiene buen cuerpo, me gusta" les dijo mientras le soltaba el humo a Louis en la cara.

La alfa lo tomó de la barbilla para inspeccionar la piel tersa del cuello.

"Siéntate ahí" le ordenó y Louis acató la orden de inmediato.

"Es obediente y no está marcado" les dijo sonriendo, Louis se estremeció por sus dientes amarillos "Es perfecto, será aún más si es virgen..."

"No sabemos eso" uno de los hombros le contestó "Estuvo con un alfa pero fue poco tiempo.

"Bien, ya veremos... ¡Bebe!" gritó y una chica rubia entró corriendo al salón "Llévatelo y revisa la calidad de la mercancía"