9. Esto es impulsividad

51.4K 4.6K 3.6K
                                    

En el autobús de vuelta, me senté al lado de Deku. Él sacó su cuaderno y empezó a escribir mientras murmuraba en voz cada vez más alta.

De pronto todo tu asiento se sacudió. Bakugou, que estaba sentado justo detrás, acababa de darle una patada.

- ¡Cállate ya, nerd!
- ¡Lo-Lo siento, Kacchan! - exclamó Deku volviendo a la realidad - Perdona, ____ , me pasa de vez en cuando, no puedo controlarlo - me miró avergonzado.
- Ya me he dado cuenta, no te preocupes. - le sonreí - ¿Qué apuntabas?
- Oh, pues... una descripción de cómo reaccionó mi quirk al frío de ayer - me contó emocionado - pude mantener el calor bastante bien pero mi potencia se ralentizó un poco y...

Me observó con atención y se puso pálido de repente.

- O-oye, esa no es... ¿la sudadera de Kacchan? - dijo bajando la voz.

Abrí mucho los ojos y me ruboricé. Inconscientemente cerré más mi abrigo para intentar ocultarla. Noté como Katsuki se revolvía incómodo en el asiento de atrás.

- ¡¿Qué?! ¡¿Cómo va a ser su sudadera?! - me reí tratando de sonar convincente.
- Lo siento, qué tontería - respiró aliviado y se giró hacia atrás - Pues se parece mucho a tu sudadera favorita, ¿verdad, Kacchan?
- ¡¿Ah?! ¡¿Qué sabrás tú de mi sudadera favorita, Deku?! - contestó Katsuki  gritando todavía más que de costumbre - De todas formas, la mía es mucho mejor que la que lleva esa inútil.

Me dirigió una mirada seria de aviso y yo moví los labios con un "lo siento". Subí un poco más la cremallera de mi abrigo.

Katsuki me había prestado su sudadera preferida, ese chico cada vez me sorprendía más. Mañana mismo se la devolvería.

Finalmente llegué a casa y me tiré en el sofá. Acababa de pasar por una situación muy dura y estaba bastante cansada.

Había algo a lo que no había dejado de darle vueltas en todo el día: ¿Por qué Katsuki no había usado su quirk para propulsarse y alcanzar la meta antes que yo?¿Por qué tampoco lo había utilizado para irse al refugio cuando las cosas se pusieron tan feas?

¿Por qué se quedó a mi lado?¿No quería dejarme tirada?¿Se preocupaba por mí? ¿Debería preguntarle por qué lo hizo?

Reí para mis adentros y negué con la cabeza. ¿Cómo iba Katsuki a preocuparse por mí?

Me quité su sudadera y la metí en lavadora mientras decidía que lo mejor sería no preguntarle nada. Seguramente su respuesta consistiría  en un montón de burlas e insultos inconexos.

De todos modos, quería hacer algo para agradecérselo. Sonreí y me dirigí a la cocina con una idea clara en mente.

Al día siguiente quise aprovechar el descanso de la comida para devolverle la sudadera a Katsuki.

- Hey ____, ¿vamos a comer? - me preguntó Uraraka, acercándose a mi pupitre acompañada de Deku, Iida y Todoroki.
- Id vosotros primero, tengo que hacer algo antes. - contesté sonriente - ¡Guardadme sitio!

Uraraka asintió y todos me miraron con curiosidad mientras abandonaban el aula. Poco después yo también caminé hacia la salida, rozando ligeramente la mano de Katsuki al pasar por su lado.

Fue algo muy sutil y pareció desintencionado, pero bastó para que él me mirase. Le indiqué con un ligero movimiento de cabeza que me siguiese hacia la azotea.

Hazme explotar (Katsuki Bakugou y tú )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora