Cap.29-Avecilla Roja

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Julie adoraba sus lecciones de ballet, al principio la cola había sido un inconveniente que chocaba con todo pero ya había aprendido a mantenerla baja y como equilibrarse con esta, hizo una pirueta y miro a su madre, que esperaba en la banca larga del otro lado del salón.

-¡Hola, mami!-saludo.

-¡Julie!-le llamo una amiguita-¡Ven!

-¡Chao, mami!-corrió a unirse con el grupo.

Aredia le regreso el gesto y miro hacia el reloj en la pared, inquieta, usualmente dejaba a Julie en la clase y regresaba por ella después pero esta vez se había quedado, como Vidente la mayoría de sus predicciones partían de presentimientos inmediatos y algo le decía que debía estar allí.

Un hombre con capucha se sentó a su lado, quizás otro padre, iba a mirarle y saludar por cortesía cuando sintió el cañón del arma en su costado.

-Antes que nada-dijo Jhorad-quiero disculparme, eres de las pocas personas que cree que valgo más que el esfuerzo necesario para darme un tiro por la espalda, y yo aprecio eso, pero no me dejan opciones.

-Entiendo, ¿te dijeron que estoy embarazada?

-¿Estas...?, esos infelices-el arma regreso a su bolsillo.

-¡Mami, mírame, mami!

-Dioses, es idéntica.

-Solo en el aspecto.

-Voy a llevarme-noto como Aredia se tensaba.

-Eso no, deja que la mande a casa y te quedas conmigo.

-No estamos negociando, me la llevo y Malquiur puede ir a recogerla a la dirección que te daré.

-Es una niña-le tembló la voz-se va a asustar mucho.

-No si le dices que soy un amigo, la cuidare bien.

-No eres tu quien me preocupa-Jhorad sonrió, él era lo que le preocupaba a todo el mundo.

-No permitiré que le hagan daño, la tendrás de vuelta en unas horas, palabra de elfo.

-¿Y Malquiur?

-He de suponer que confías en él más que en mi.

-Por supuesto.

-Entonces ten fe.

-Es ridículo, todo lo que hacemos es suponer cosas.

-Es lo que ocurre cuando vives en el sueño de un Dragón.

Al finalizar la clase, Julie esperaba que fueran por helado y de vuelta a casa pero su madre se había encontrado con un amigo.

-Cariño, él es el señor Shae, lo conozco desde hace tiempo.

-Mucho gusto-hizo una pequeña reverencia.

-Que avecilla tan encantadora, ¿ya vuelas?

-No, señor, mami dice que hasta que seamos más grandes.

-Julie, escucha-Aredia le tomo de las manos y noto que temblaban-el señor Shae te va a llevar a un lugar, quiero que te portes bien y no te separes de su lado, papá ira por ti en un rato, ¿entendiste?

-Entiendo-también que allí pasaba algo-¿Mami...?

-Todo irá bien-la abrazo-papi ira a buscarte.

-Vamos, deprisa-insto el otro, Aredia le clavo una mirada dura.

-Jhorad...

-No necesitas decirlo.

Había recibido toda clase de amenazas en su larga vida, le divertía coleccionarlas, pero no quería una de una madre furiosa capaz de ver el futuro; tomo a Julie de la mano y la condujo dos calles hasta un callejón, donde esperaba Memed junto a una camioneta de la A.C.C, otro miembro del grupo estaba al volante y Jhorad se preguntaba porque no habían podido mandarle a Lace.

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⏰ Last updated: Jun 16, 2020 ⏰

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