LP-Next Generation

Cap.04-Marbel Vannister

Una de las reglas básicas del grimorio era que si un don nominal era débil o se reprimía durante una generación se duplicaba para la siguiente, y dado que había nacido durante la época en que el grimorio estuvo sellado, al embarazarse Grech supo que debía prepararse.

Los psicocamaleones no solo se vuelven físicamente invisibles, también pueden ser empáticamente invisibles y cuando Marbel comenzó a caminar aquello fue un lio, poseía una vena curiosa, heredada seguramente de su padre, y cuando algo o alguien llamaba su atención lo asediaba, una vez había seguido al cartero por hora y media hasta que se canso y se dejo notar para que le llevaran a casa, le dio un buen susto a todos y recibió un regaño pero nada se hizo realmente para evitar que se repitiera.

Al final quien no quería ponerle un freno era la misma Grechen.

-Pase toda mi infancia encerrada, no quiero que ella le tema al mundo.

-Yo entiendo, amor-le dijo Luka-pero tampoco puede estar siguiendo a la gente, le puede pasar algo.

-Hay que ver que este a salvo y regrese siempre.

-Un GPS no va a solucionar esto, Grech.

-Eso no, le voy a pedir ayuda a Elijah.

-¿De nuevo?-no pudo evitar torcer el gesto.

Cuando Marbel nació, Grech le pidió a Elijah que fuera su padrino, la monstruosa acromantula que vivía en los bosques cercanos a Aka'Magost acepto honrado y puso una marca en la bebita que le hizo inmune a todos los venenos; como padrino era una figura distante, Marbel lo conocía como "El tío Eli" y recibía seis veces al año pequeños obsequios de su parte, usualmente figuritas talladas en huesos, pero no tuvo un recuerdo fiel de su aspecto hasta que la llevaron de nuevo a verle, cuando tenía tres años.

-Asique eres una pequeña aventurera-le dijo, haciéndole cosquillas con una velluda pata.

En la sana teoría, Elijah aun debía ser un niño, pero su cuerpo de acromantula tenia el tamaño de una camioneta y su edad mental rondaba los sesenta, había tomado varias hectáreas de bosque como su territorio y mantenido una relativa paz con el resto del mundo pero Grech era su único contacto verdadero con el exterior y, tal vez, con lo que quedaba de su humanidad.

-Ustedes dos-llamo a dos arañas casi al azar-a partir de ahora cuidaran de esta niña, si sufre algún daño lo lamentaran por el resto de sus patéticas y cortas vidas.

Los bichos se estremecieron y enseguida se pusieron junto a la bebe, en actitud servil, eran acromantulas de octava generación, no más grandes que perros medianos y con una inteligencia apenas mayor.

-Velaran por ella-continuo, con un chasquido amenazante-y verán que esté en su hogar antes de que oscurezca.

-Gracias, Elijah, sabía que podía contar contigo.

-Siempre.

-Malquiur aun quiere hablarte-la araña se removió, incomoda.

-No tengo asuntos con el hechicero.

-Algún día-dijo ella, dándole una palmadita cariñosa, Elijah fingió no oírle.

Desde entonces Marbel fue libre para vagar, nombro a las arañas Tobi y Carmelita y aunque al principio saltaban agresivamente sobre los extraños y hasta mataron a un par de perros, con el tiempo Marbel los fue domando y se convirtieron en dos dedicadas niñeras, le vigilaban a escondidas y hasta cargaban cosas para ella.

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Por supuesto, el Coronel Honesto no sabía nada de aquello en el momento en que Marbel decidió mostrarse, aunque sí que le habían presentado a los Vannister y estaba seguro de que no habían venido con ellos.