Cap.16-Creando Vinculos

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Malquiur llevo a Alexander de regreso a su habitación y le pidió al Coronel Honesto que les acompañara pues parecía comprender el problema que enfrentaban.

-Toma-le dio un vaso de agua-bebe despacio.

-¿Te verdad te parece TEPT?-pregunto Malquiur.

-Como dije, lo he visto, entre compañeros de la milicia.

-Bueno, vino directo de una guerra apocalíptica, tiene sentido.

-¿Qué tiene sentido?-pregunto el príncipe-por favor, levante mi mano contra un elemental, viole mi juramento, debo saber porque.

-Se llama Trastorno de Estrés Postraumático o TEPT, si lo quieres corto, es...-el coronel movió los dedos como buscando las palabras indicadas.

-Atravesaste una experiencia traumática-aporto Malquiur-y dejo secuelas.

-Pero no estoy herido.

-No en tu cuerpo, en tu mente, eso no se recupera tan rápido, lo que te paso hace un rato fue un ataque de pánico.

-¿Pánico?

-Algo que viste te pudo de vuelta en el trauma-dijo el Coronel-¿olvidaste donde te encontrabas?, ¿te costaba respirar y sentías que ibas a morir?

-Yo...no tenia pánico-apretó los puños-un caballero no siente pánico, no soy un cobarde.

-No se trata de eso, Alexander-Malquiur trato de tomar su hombro pero se levanto.

-Pelee para evitar que esas cosas infestaran el mundo y sin Magnameris no puedo destruirlos, ¿Cuántos hay?

-Franco los hizo pro accidente, ya he hablado con los chicos y Njeri, tienen prohibido crear golems asique solo son las piedritas.

-¿Qué hay del grande?

-¿Toñita?

-Te oí llamarle Olivia.

-¡Ah!, ella no es un golem, es otro tipo de criatura, cuida de los niños, por eso te ataco.

Volvió a sentarse, eso estaba bien, un guardián enorme y fuerte para los niños, debía agradecer que le detuvieran porque jamás se habría perdonado en caso contrario.

-Nadie cree que seas un cobarde-le dijo Malquiur.

-¿Qué soy entonces?

-Alguien que necesita ayuda.

-El destino me envió a mí a ayudar-otra vez se levanto, poniendo distancia-lo que sea esto lo superare y ya.

-No solo lo superas y ya-dijo el Coronel Honesto-tómatelo en serio, he visto a veteranos llorar como niños y arrojar sus vidas a la calle porque no aceptaron ayuda a tiempo.

-¡No soy débil!-estallo-¡Soy el Caballero Blanco de Daira!, ¡El elegido de Antagon!

-Lo estás haciendo de nuevo-apunto Malquiur, las bombillas titilaban-esos poderes, ¿no puedes controlarlos?

-No vienen de mí-pero usualmente podía controlarlo-es la armadura, se forjo con los huesos y escamas de Antagon.

-Tendrás que quitártela entonces, hasta que veamos que no seas un peligro.

-Haz eso y te dejamos en paz, para que pienses las cosas.

Ser considerado un peligro le hirió profundamente pero tomo la oportunidad para que le dejaran solo...realmente lo estaba, Magnameris se había creado con un colmillo del gran Dragón y su voz se proyectaba desde la hoja, sus sabios consejos le ayudaron en los momentos más difíciles, pero Magnameris estaba rota, su voz se había ido, todos se habían ido de un modo u otro, Simon estaba cautivo en alguna parte y Lyon había acumulado tanta experiencia como un espíritu en las páginas del grimorio que resultaba intimidante, estaba solo y, peor, parecía estar dañado, roto, igual que su espada.

LP-Next GenerationWhere stories live. Discover now