Departamento 504 [×Frerard×]

#504 II: Capítulo 10 {Smut}

Una de Led Zeppelin (Gerard)

Frank estaba más delgado y su piel se sentía diferente, quizás estaba más suave porqué había olvidado lo que era tocarlo de esta manera. No va en mi ser cursi pero ¡Dios! Lo había extrañado tanto y no me dí cuenta hasta que me besó sin importarle algún rechazo. Sus labios seguían siendo los mismos pero era no sé qué de "te extrañé" los hacía aún más deliciosos.

Ahora estaba perdido de nuevo en él y aterrado, tenía miedo, no de caer porqué ya lo había hecho, pero sí de volver a perderlo, no sé si podría soportar de nuevo su pérdida.

Es que yo amo a Frank ¿Sabían? Creo que sí, y mi verdadero yo, el que oculto con él resto, sale con él como si nada.

Y estaba perdiendo de nuevo, arrastrando mi pelvis sobre su hombría mientras mis manos se apoyaban sobre ambas golondrinas bajo su abdomen, él acariciaba mi cintura y la apretaba de vez en cuando. Ver sus párpados descansando y cayendo para sentir como nos volvíamos a unir era un balde de agua fría. Podíamos haber estado disfrutando esto antes y debíamos hacerlo así, engañando a quienes nos intentaron recuperar de la perdida de ambos.

- Gee - rompió el silencio -, extraño tu boquita - rió, luego llegó su dedo índice a mis labios y los acarició -. Mucho - mi lengua se paseó por su dedo, luego el bajó con este dejando una línea de saliva hasta llegar bajo mi ombligo - ¿Y? - asentí sin decirle más nada

Me acomodé sentandone cercano a sus rodillas, bajé su pantalón y su bóxer y oh... Sí tenía un piercing ¡El idiota se hizo un piercing! ¿Pará quién? Ya me enojé.

- ¿Por qué te perforaste el frenillo? - pregunté molesto

- Uhh... Sólo gusto, cariño - sonrió -. No te molestes

- ¡Pero Jamia lo disfruto antes que yo! - me crucé de brazos y miré hacía otro lado

- No - rió -, no hice nada con ella, fue para joderte, bebé - su mano fue hasta mi mentón y lo volteó para mirarlo -. Ahora ven con esa boquita ¿Si?

- Está bien, pero eres un imbecil - suspiré

Él asintió desesperado. Me incliné hacía delante. Llegué con mi boca entre abierta a su miembro, jugué con mi lengua y su glande, mi mano comenzó a subir y bajar por toda su longitud, luego recorrí cada parte de su anatomía con mis labios y debes en cuando con mi lengua, dejando rastros de saliva por cada centímetro. Él estaba entregado, como siempre. No sé qué tenía Frank que con sólo verlo podía sentirme satisfecho, es que su manera de gemir, de mover sus labios al hacerlo, de tocar su pecho con sus manos tatuadas y jugar con la cadena de plata que aún llevaba.

¡Me va a matar y aún no me lo mete!

Esto es demasiado. Saqué su pene de mi boca, él me miró con un puchero, quejándose de haberlo abandonado de esa manera. Me levanté un poco para sacar mi bóxer y sentarme sobre él. Si algo había aprendido de Gabe eran las cochinadas de las películas y me gustaba demasiado. Aún que el porno en al vida real era bastante diferente, un poco más doloroso y con lubricantes baratos. Oh... Pero aprendí hacerlo yo solo, según Gabe era mucho mejor.

Humedeci dos de mis dedos, los llevé a mi entrada y jugué con ella lubricando un poco. Cerré mis ojos y en movimientos extraños comencé a sentir un leve dolor que se convertía en placer, Frank me miraba mientras con mi otra mano lo masturbaba, bajando, en círculos, presionando y a veces haciéndola chocar con sus testículos. Él me miraba perdido. Cerré mis ojos y el calor en mis mejilla comenzó a llegar, noté como comenzaban a ponerse rojas y un poco de sudor comenzaba a brotar de mis poros.

Frank estaba impresionado y lo sabía por sus gemidos y sus maldiciones a los mil demonios y ángeles.

- Subate - exigió -, vamos Gee - tomó mi mano para sacarla de su miembro, luego llevó las suyas a mi cintura y me ayudó a acomodarme sobre él, saqué mis dedos y le sonreí -. Vamos - suplicó

Apoyé mi mano derecha en su abdomen para poder levantarme, con la otra tomé su miembro y lo rocé con mi entrada ya lubricada, me dí un impulso para sentarme sobre él, cuando sentí su inicio dentro de mí, lo solté y comencé a sentarme lentamente. Frank llevó su mano como puño a su boca y la mordió, cerrando sus ojos mientras yo disfrutaba como iba entrando en mí.

Sí que lo extrañaba.

- Mierda... - rió entre gemidos, devolvió sus manos a mi cintura y me impulsó a dar saltos cortos y rápidos sobre él

Lo hice por un rato y luego me dejé caer, sintiendo cada centímetro de su anatomía dentro. Solté un gemido largo, me arrastre lentamente, moviéndome en círculos sin despegarme de él. Sentía como mi hombría se acariciaba con él abdomen de Frank. Mi ritmo comenzó a aumentar para que el roce fuese más placentero y sentir cada parte de Frank dentro me iba a llevar a mis límites.

- Ah... Frankie - gemí -, te extrañé demasiado, uhm... - lleve mis manos a su pecho para apoyarme en él -, demasiado

- Y yo a ti, no sabes cuanto - soltó entre jadeos y cortos gemidos - Oh...

Luego de algunos minutos él me volteó quedando sobre mí, comenzó a mover sus caderas lentamente, entrando y saliendo haciendo círculos marcados ¡A la mierda, esto es mejor que una porno! Este hombre es mejor que cualquier actor porno. Me vuelve loco.

Su mano tatuada fue a mi cuello, su rostro se acomodó en mi clavícula, sus movimientos eran lentos, profundos y delicados, me estaba desesperando. Cuando Frank lo notó, se acomodó apoyando ambas manos a cada lado y comenzó a entrar rápido, sin dejar pasar los segundos, yo ya estaba gritando, gruñendo y... Su piercing me estaba dando justo en mis nalgas.

- ¿Qué qué te pasa? - preguntó, solté una carcajada -Gerard - me miró molesto, dejó de moverse quedando dentro de mí

- No, Frankie ¡Sigue! - exigí haciendo un puchero - ¡Vamos!

- ¿De qué mierda te ríes entonces? - se movió brusco y mi espalda se encorbo, dio justo en mi prostata

- Ah... Es que - reí -, tu piercing me da cosquillas - tapé mi rostro con ambas manos

- Eres idiota - suspiró -. Pero estoy demasiado excitado como para molestarme rió y sacó mis manos de mi rostro -. Déjame verte

Volvió a entrar y a moverse fuerte, dando golpes precisos en mi próstata y a mí se me olvidó el cosquilleo de su piercing. Frank estaba tan sudado que me excitaba aún más sentir su cuerpo humedo sobre el mío.

- Me quedo callado, soy como un niño dormido que puede despertarse con apenas solo un ruido. Cuando menos te lo esperas, cuando menos lo imagino. Sé que un día no me aguanto y voy y te miro...

Mierda... No, no ahora

- ¿Qué es ese ruido? - Frank se detuvo

- Sale, sale... - lo empujé, escuché a Frankie ladrar. Me en volví en las sábanas y salí al balcón.

- Yo, yo no me doy por vencido, yo quiero un mundo contigo. Juro que vale la pena esperar, y esperar y esperar un suspiró, una señal del destino. No me canso, no me rindo, no me doy por vencido... - Gabe me sonrió al verme salir. Estaba con unos tipos tocando guitarra. Las vecinas no tardaron en la salir y la señora Milagro se les unió - ¡Chanchito! Yo puedo perdonarte todo

- ¿Me estás jodiendo? - escuché decir a Frank desde el marco del ventanal, le hice una señal de que se queda ahí

- ¡No me daré por vencido! Perdóname por ser tan celoso, sé que necesitas más atención - y siguió cantando

Tapé mi rostro con las sábanas, mi pecho estaba comenzando a presionarse.

¿Por qué hace esto? Quiero llorar.

- ¡Ya perdonalo! - escuché a algunas vecinas - ¡Te ama!

- ¡Gerard, te amo! - gritó Gabe - No me canso, no me rindo, no me doy por vencido, oh... - terminó -. Te amo - sonrió

- Ahora tocate una de Led Zeppelin - salió el idiota de Frank en bóxer - ¡o el venado! - rió

Frank es un verdadero idiota y yo también.

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Cualquier error los arreglo luego 😳

Pobre Gabe 🥺💔

De mi ñaña @miaucife 🖤