Tequila

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"El deber esta en tu corazón"

- Mulan 


Ella no era la única que tenía una nueva conquista y definitivamente Maca necesitaría un buen premio una vez gané esa pelea.

Luego de verla en con esa actitud tomé la botella de Tequila de Jack y di un gran trago a ese licor sin despegar la mirada de ella para después con toda la actitud que siempre me ha caracterizado girarme para quedar frente a Pinkie y sonreír malvadamente.

—vamos a embriagarnos y a perrear toda la noche —afirmé a la rubia.

—¡Perreo! —gritó Pinkie como si fuera un grito de guerra.

Decidí sacarla de mi mente y no prestarle atención estaba segura de que todo lo que estaba haciendo era con el propósito de lastimarme, ¿Por qué? No lo sé, pero cada vez lo confirmaba más.

Incité a las ponys a bailar conmigo en lo que la pelea de Maca comenzaba, después de un par cervezas y tequilas la música se apagó anunciando que empezaría la pelea.

Necesitaba tener un lugar estratégico para poder ver a Maca y recordé el balcón donde Poché y yo habíamos visto la última así que sin decir nada subí por las escaleras. Un grave error.

Justo al entrar a ese balcón me encontré con una escena que no sé si fue desagradable o devastadora para mí. Ahí estaba Mini Cruella sentada en una especie de silla con la chica con la que la vi llegar sentada a ahorcajadas sobre ella, las manos de Poché se aferraban al trasero de la chica mientras su boca atacaba el cuello y los senos descubiertos de la otra mujer.

Me detuve en seco y traté de irme sin hacer ruido, pero fue tarde ella me vio, traté de sostenerle la mirada solo que no lo logré, Sin yo quererlo mi mirada cayó al suelo y solo pude dar media vuelta y regresar por donde vine.

—¡Espera! —escuché a alguien gritar detrás de mi cuando apenas estaba bajando por las escaleras— Dani.

—¿Qué? —dije casi gritando.

Esperé a que ella dijera algo, pero no lo hizo solo se quedó de pie ahí mirándome con esa mirada suya tan intrigante, casi podía sentir como su cerebro estaba trabajando a mil revoluciones por segundo y aun así no dijo nada.

—¿Qué? ¿Qué quieres? —repetí exasperada.

—¿Por qué estas aquí? —preguntó.

—Maca me invitó, pero eso a ti no te importa —dije

—regresa a tu celda —ordenó de pronto tomando mi mano y tratando de tirar de mí.

—¿Qué te pasa? Suéltame —reclamé soltando mi agarre.

—¿Qué carajos te pasa Poché? —escuché reclamar a alguien cerca de nosotras, al voltear vi a la morena que hasta hace un par de minutos estaba con Poché cerca de nosotros.

—¿Qué? —Respondió Poché de mala manera.

—¿Quién carajos te crees? ¿en serio crees que me vas a dejar botada solo porque sí? —reclamó la chica a quien por primera vez me tome el tiempo de observar.

Era pequeña, delgada de tes morena y cabello negro. Era linda.

—te lo dije y no te voy a repetir, desaparece de mi vista —sentenció Poché.

—¡eres una malparida de mierda! —escupió la mujer a Poché justo al pasar a nuestro lado.

Por un momento compadecía a la chica pues por lo poco que había visto de Mini Cruella deduje que solo planeaba pasar un rato con ella y aparentemente su tiempo ya caducó. Toda esa bizarra situación estaba comenzando a molestarme y no quería perderme la pelea de Maca así que comencé caminar lejos de ese lugar solo que Poché me volvió a detener.

TU CONDENA, MI DELITODonde viven las historias. Descúbrelo ahora