La Reunión

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"Casi todos los hombres prefieren negar la verdad antes que enfrentarse a ella"

-Tyrion Lannister


-Calle, Calle, Calle... -repetía constantemente una voz chillona que apenas y podía escuchar a los lejos.

-mmmm -me quejé queriendo que dejaran de moverme y poder seguir durmiendo.

-DESPIERTA -gritó esa maldita voz chillona.

-¿Qué? -dije gritando y abriendo los por fin encontrándome a un par de ojos saltones pertenecientes a una chica rubia que me miraban fijamente.

-te traje el desayuno -anunció Pinkie Pie sentándose en la silla cerca de la mesa.

-¿me despertaste solo por eso? -reclamé -¿Dónde está Poché?

Tardé un poco en darme cuenta de que ya no estaba a mi lado, después de lo que pasó entre nosotras en la azotea terminé completamente agotada y nos tomó un tiempo estar listas para bajar.

-no sé, no estaba cuando yo llegué -explicó sonriendo.

Me sentía cansada y lo último que quería era tener a Pinkie aquí, necesitaba poder aclarar que es lo que había hecho con Poché. Sentí el color inundar mis mejillas al pensar en nosotras.

Fue mejor de lo que yo había imaginado que sería, cada caricia, su forma de tocarme y tomarme fue simplemente... alucinante. No dejaba de penar en la manera en que pudo pasar de dejarme ser yo quien controlara a ser sumamente tierna y como de un momento a otro sus caricias que fueron tan delicadas se convirtieron en su opuesto.

Poché es la representación perfecta de la dualidad en persona. Lo que me asustaba no era ella, me asustaba lo que estaba sintiendo. En aquella azotea dejé a Poché hacer lo que quiso no la detuve y no me detuvo en realidad nuestras voces callaron y dejamos que fueran nuestros cuerpos lo que hablaran y eso me asustaba.

Fue la primera vez que me sentí protegida y cuidada, Poché tenía algo en la forma en que me miraba que me hizo sentir que no había nadie más especial que yo, sus besos en mi cuerpo decían que yo era como su propio tesoro.

-¡basta Daniela! -me prendí a mí misma.

-¿Qué dices? -preguntó Pinkie.

-na.. nada Pinkie -traté de sacar de mi mente pensamientos sobre Poché.

-hoy te toca ayudar a organizar conmigo -dijo la rubia mientras prendía la televisión- va a ser super, porque haremos muchas cosas y esta noche ya no tendré que estar con nadie...

-¿Qué? -pregunté desconcertada -¿estar con alguien?

-¿qué? -

-dijiste que no tenías que estar con nadie -repetí- ¿a quién te referías?

-ah... pues que ahora no tengo ningún trabajo adicional -se justificó de manera rápida antes de ponerse a comer y fingir que no era importante.

-entonces ¿Qué haremos hoy? -pregunté después de un rato de silencio incómodo.

-iremos a organizar, Cele nos quiere a todas ahí -afirmó

-¿organizar qué? ¿estará Poché? -pregunté

-supongo que sí y organizar la reunión que preparó Celestia, dijo que era muy importante pero no sé muy bien porque nunca me nadie me dice nada-

-y no me explico porque -susurré con sarcasmo.

Continuamos comiendo, le pedí me dejara ir a las regaderas a bañarme porque el día anterior no había tenido oportunidad y me sentía increíblemente incomoda. Después de eso ambas bajamos hasta el patio central y después seguí a Pinkie hasta la bodega de la sección de "máxima seguridad".

TU CONDENA, MI DELITODonde viven las historias. Descúbrelo ahora