Cap.02-Julie y Eiden Malcon

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Los mellizos habían tardado cinco años en hablar, tanto que muchos pensaron que jamás lo harían...ahora parecía que nunca se callarían.

Debían estar compensando y de paso demostraban lo atentos que habían sido a su entorno en todo ese tiempo, hasta entonces habían sido más o menos iguales, Julie era más ruidosa y Eiden era sensible, delicado, pero tenían las mismas exigencias, usaban los mismos juguetes e incluso se dormían a la misma hora, ahora de pronto su nueva capacidad de comunicación había gatillado un desarrollo de personalidad e intereses inesperados.

A Julie le gustaba cantar, no era muy afinada pero vaya que lo hacía con entusiasmo, también resulto ser algo entrometida, se la pasaba escuchando las conversaciones ajenas e intentando meterse con lo primero que se le ocurría, además de que estaba ansiosa por crecer, agitaba sus alas con furia, pensando que eso le sumaria centímetros más rápidamente, asaltaba los estuches de maquillaje y los guardarropas, cuando cayó en la cuenta de que Divine usaba vestidos mucho más bonitos que su madre o Njeri comenzó a pedir que le llevaran a jugar allá en lugar de con Franco y Charley, quienes eran sus usuales por la cercanía de edades.

-¿Tú tienes novio, Njeri?

-¡Claro que no!

-¡Yo tengo dos novios!

-¿Dos?

-Papá y Cele.

-Tu papá no cuenta como novio.

-¿No?... ¡Bueno, pero Cele es mi novio!, ¡Es muy lindo!

Aredia pesco esa conversación sin querer y casi corrió a contárselo a Malquiur, quien la tomo con humor antes de reparar en su cara de haber bebido vinagre.

-¿Te preocupa algo en especifico?

-¿Debería?

-Muchas niñas actúan así.

-Muchas niñas no son hijas de ya sabes quién.

-Ok, ahora solo me estas replicando, ¿Cuál es el problema aquí?

-¡No sé, no sé!-sacudió la cabeza-está muy chiquita para andar pensando en novios, ¡y Celebrimbor!, ¿eso no te parece...demasiado?

-Los estuvimos tratando como a unos bebes más tiempo del debido, ahora de pronto ya son unos niños y en otro año irán a la escuela.

-¡Eso!, hay que enseñarle que no todo en esta vida es maquillaje y parejitas.

-Busquémosle un pasatiempo entonces, y en cuanto a Eiden.

-¿Qué con Eiden?, Eiden está bien.

-...recapitulemos, ¿te parece?

Eiden...Eiden no quería ser hechicero.

La noticia había sentado a Malquiur como una baldada de agua helada, sobre todo porque se dio el gusto de ignorar las señales durante casi dos semanas, la segunda palabra de Julie fue "papá" pero la segunda palabra de Eiden fue "Luna", de un momento a otro surgieron sus singulares obsesiones, su cuento favorito "Buenas Noches, Luna", su juguete favorito, el pequeño muñequito astronauta, sus programas favoritos, cualquier cosa sobre el espacio y le pidió a Luka las cajas de cartón de la mazmorra para hacerse un cohete; Malquiur había creído que era el momento perfecto para comenzar su educación y se había sentado con él varios días a estudiar el grimorio, pero el chico se aburría y un buen día simplemente lo dijo: No quería ser hechicero, quería ser astronauta e ir a la Luna.

-Pero bueno, no puedes obligarlo a seguir tus pasos, tampoco es como si a ti te hubiera encantado la idea.

-Yo lo supe cuando ya tenía hecha mi vida, si de niño hubiera sabido que era una opción pues...

LP-Next GenerationWhere stories live. Discover now