Chaejik

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Jimin y yo hicimos el amor un par de veces más una vez que descansamos. No pudimos evitarlo después de tanto tiempo lejos, además, estaba contento de saber que dentro de él crecía otro hijo mío.

No podía enojarme con él, era quien cargó a mis hijos y ahora lleva a otro, sólo puedo amarlo y amarlo por el resto de la eternidad. Jamás pensé amar a una persona de la manera en la que amo a Jimin.

Mi madre debe estar feliz, encontré a una persona que me ama, tenemos altos y bajos como cualquier pareja, y me encanta. Porque sé que siempre encontraremos la forma de perdonarnos y volver a amarnos con locura.

Jimin ahora me acariciaba el pecho con cariño mientras ambos nos dábamos un baño en la tina, él me sonrió cuando le mojé su cabello.

—Entonces, ¿qué habitación de la casa usaremos para el nuevo bebé? —le pregunté con suavidad, él se miró el vientre y puso su mano encima.

—La de los gemelos es lo suficientemente grande para los tres, ¿no crees? Además, es mejor tenerlos a todos juntos —asentí, si eso era lo que quería, lo haría—Aunque luego claro que querrán su privacidad —se acercó un poco más a mí con sus piernas a los costados de mis caderas.

Pensé en todo lo que haría por él, y todo lo que daría por siempre estar a su lado. Lo abracé con esos pensamientos en mente. Él me estaba dando lo mejor de sí y más, me daba una familia y un futuro normal, cosa que nunca creí posible antes de conocerlo.

Cuando entré a la mafia jamás pensé que llegaría a formar mi propia familia junto a un hermoso chico que me robó el corazón sin piedad. Jamás creí caer de rodillas ante un ángel.

Busqué los labios de mi esposo y me deleité cuando lo escuché gemir gustoso. Realmente bello y angelical, no podía creer que él era mi esposo. No podía creer que me había casado con él.

Que hermoso era todo.

—Otro nieto —murmuró Baekhyun cuando vio a Jimin sostener el ultrasonido de nuestro bebé. Estaba contento y feliz de verlo, iba a llorar como la primera vez que le enseñamos a los gemelos. Chanyeol lo abrazó.

—¿No es mejor así? Una familia grande, imagina Baek, nuestros nietos corriendo en nuestro patio mientras nos hacemos viejos —Jimin sollozó ante el pensamiento, se alejó de mi lado para abrazarlos. Yo sonreí.

Jimin tenía casi cinco meses cuando supimos que nuestro bebé sería una niña. Lo abracé con euforia, tendríamos una pequeña niña.

Besé su vientre cuando llegamos a casa y Jimin se recostó para descansar. Los gemelos estaban en la cama gateando por ella para estar cerca de nosotros, Junho puso su mano en la piel del vientre de mi esposo y yo sonreí.

—Aquí está tu hermanita, Junho —el bebé repitió mi acción al besar el vientre de su padre, Jimin quiso llorar, lo noté en sus ojos. Daehyun se le acercó para buscar mimos que mi esposo le dio gustosamente—Mi pequeña Chaejik —susurré casi sin pensar.

Jimin me miró con el ceño fruncido.

—¿Chaejik? —preguntó dudoso con una sonrisa tranquila, le sonríe también mientras subía mi mano para acariciarlo.

—Era el nombre de mi mamá —entonces vi la mano de Jimin tomar la mía, sus ojos me miraron compresivo y con amor.

—Creí que tu madre se llamaba Hana —asentí y me moví de mi lugar para estar a su lado y así poder verlo a la cara mientras mi mano aún se movía por su pancita.

—Era su nombre falso, así como el mío es Lee. Pero en realidad se llamaba Chaejik —jugué con los dedos de Daehyun tímidamente ante la petición que estaba a punto de hacer—Y... me gustaría que nuestra niña se llame Chaejik —las suaves y pequeñas manos de Jimin me tomaron del rostro para besarme con dulzura. Esa misma dulzura de la primera vez que nos besamos aún seguía viva en los labios del amor de mi vida.

Jimin's Man |Yoonmin|Where stories live. Discover now