❀•[22]•

745 96 188
                                    


—Por supuesto que hay que poner una demanda Taehyung.

El nombrado trago saliva avergonzado, sintiendo un poco de culpa por ocasionar aquella preocupación en Seokjin, jugó un poco con el helado que estaba comiendo, Jimin había sugerido ir a un lugar mas seguro para poder hablar de aquello, desde que había ido a recoger a Taehyung no había dejado de pensar que tal vez aquella persona que acechaba a Taehyung los estuviese siguiendo en esos momentos.

—Pero no se de quien se trataba.

—Tae, esa persona puede haber estado al acecho desde hace mucho.

—Jimin, no creo que eso sea de mucha ayuda. —Seokjin poso una mano sobre la de Taehyung, quien haía comenzado a pellizcar su dedo.

—Lo sé, pero hay que ser realistas, si no ¿cómo ese sujeto sabía su nombre? ó ¿cómo sabía que él estaba ahí? Seguramente lo ha estado vigilando desde hace tiempo.

—Hasta ahora no había sentido que alguien me haya estado siguiendo. —Taehyung trataba de recordar si alguna vez había tenido la sensacion de ser perseguido.

—Creo que deberíamos de hablar con Hobi, tal vez él sepa mejor cómo actuar en estos momentos. —Sugirió Seokjin.

—Si, pero Hobi regresa hasta mañana, y probablemente vaya directamente al hospital. —Aquello había sonado un poco decepcionante por parte de Jimin, soltando un gran suspiro, tomó un sorbo de su smoothie.

—Dos pajaros de un tiro, veremos a Yoongi y encontraremos a Hobi.

Seokjin no sabía si aquello era algo bueno para Jimin o no, pero al fin de cuentas todos eran amigos primeramente. Pero ahora, no sabía si era bueno que aquellos dos estuviesen juntos ya que ambos tendrían un mismo interes por el palido.

Después de llegar a un acuerdo Seokjin había aceptado que Taehyung regresara a su casa, el menor no quería sentirse cómo un peso, además, sabía que para Jungkook no era agradable su presencia dentro de aquella casa.

—¿Estas seguro que estaras bien?

—Lo estaré. —Sonrió de forma tranquila al mayor, en esos momentos si era sincero, claro que se moría del miedo, pero sabía que no podía vivir así y mucho menos depender que los demás lo estuviesen protegiendo cómo un niño de cinco años.

—No dudes en llamarme, vendre aún así sean las dos o tres de la mañana ¿Entendido?

—Lo haré, así que vaya con cuidado.

Resignado, Seokjin asintió dandole su espacio al menor, se había cesiorado de que no hubiera nadie escondido dentro del apartamento de Taehyung, no quería arriesgarse a que ese demente hubiera aprovechado la oportunidad para esconderse y luego atacarlo a media noche cómo ocurría en aquellas peliculas de asesinos.

—Vendré por ti mañana.

—Aquí estare.

Sin saber muy bien que hacer, Seokjin tomó con delicadeza y ternura una de las mejillas de Taehyung para acercar sus labios y depositar un tierno beso en su mejilla libre, provocando así un leve sonrojo por todo el rostro del contrario, quien se había quedado helado en su lugar, siendo sorprendido por aquel pequeño detalle.

—Hasta mañana.

Taehyung entro a su apartamento despues de ver cómo el pelinegro se perdía entre las escaleras, camino hacía el baño un poco aturdido por aquellos labios tocando su piel, era verdad, ya se habían besado de forma pasional y descarada, pero aquel beso en la mejilla había sido tan repentino que no le había dado el tiempo suficiente para reaccionar.

Nuestro Destino Rojo [JinTae] #Wattys2019Where stories live. Discover now