Capítulo 29: "¿Quién eres en realidad?"

100 13 5
                                    

Rami.

Pasaron algunos días después de lo sucedido aquella noche. Enfrentè tantas cosas en ese baile, emocionalmente estaba frágil, y estar así me dio el poder de terminar mi absurdo compromiso, y aún así, dejar ir al verdadero amor de mi vida. Maneje todo con madurez y como un adulto de mi edad podía hacerlo. Al día siguiente de todo eso, pasé la noche sin dormir, y a primera hora, fui a casa de Portìa.

—No me casaré contigo—espeté en cuanto Portìa abrió la puerta de su apartamento, de un aspecto de recién levantada con cruda y una bata de dormir. Su primera expresión fue de confusión y luego de culpa.

—Rami, lo de anoche... lo siento, no lo planee. Estaba ebria y muy molesta.

—No es por lo de anoche—hablé fuerte y claro—Aún que fue la gota que derramó el vaso, la verdad es que no te amo lo suficiente como para casarme, y tú tampoco—me miró un rato sin responderme—Sabía desde antes que me engañabas, y no ha sido la primera vez, pero el que estaba mal era yo, porque seguí contigo a pesar de eso, y es muy estúpido porque ya no te quería.

—Déjame arreglarlo--pidió casi llorando. 

—Puedes arreglar lo que hiciste anoche, porque heriste a una persona inocente, que fue víctima de las circunstancias.

—Jean no es ninguna víctima, supo sacar provecho de todo. Rami—me miró con súplica—Ella no te ama. Sabes que elegirá a otro chico más joven después de darse cuenta que ya no le sirves.

—No necesito que me atormentes más, he tenido suficiente para una vida. Esto se terminó—concluí. Di media vuelta y me marché.

Desde aquel día, entre en un desánimo y en una especie de depresión. No fui a trabajar en tres días y ni siquiera me daba hambre como para levantarme y hacer algo. Pensaba en Jean en muchas ocasiones, y tuve tiempo para pensar en varias versiones de lo que sucedió entre nosotros, lo último que pensé, fue que era cierto lo que dijo Portìa; ella solo tomo ventaja de la situación, y de mí, ¿Quién eres en realidad Jean Bradley? Te empeñaste en crear una imagen totalmente distinta de ti, lograste enamorarme. Quizá solo mentiste sobre tu familia, pero no sobre ti. Trato, Jean, de verdad trato de entenderte y de justificarte, porque te amo de verdad.

Unos golpes frenéticos sobre la puerta, lograron llamar mi atención. Me incorporé de la cama y fui hacia la entrada. Del otro lado, me encontré a un Ben agitado y con cara de asustadizo.

—¿Qué sucede, Ben?—pregunté con desgano.

—Tienes que venir a la firma, es un desastre—explicó.

—No tengo ganas, Ben.

—Estamos en quiebra.

—¿Qué?—exclamé confundido.

—Portìa firmó unos cheques en blanco, vaciaron todas las cuentas, las nóminas. El personal se está yendo y el banco está embargando todo—abrí los ojos al imaginarlo. 

________________________

Mañana ultimo capítulo! Gracias por todo, las amo!!

Déjame adorarte 《Rami Malek》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora