House of Cards - BTS [TRADUCCIÓN]

Capítulo XIX: Ataque de pánico [Parte 2]

Cr. img: A quien corresponda

~*~*~*~

No pasó mucho tiempo después de que JungKook y TaeHyung salieran de la suite y terminara de limpiar todo el desastre, cuando JiMin decidió vestirse. Ese día no iba a repetir los eventos del anterior —acostarse y emborracharse—, ese día iba a salir con Wangbi y ver a YoonGi mientras los otros dos estaban ocupados trabajando. JiMin estimó que podría tener unas pocas horas para pasar en la compañía de YoonGi si no estuviera ocupado trabajando, y en esas pocas horas no habría champaña ni llanto. Incluso evitaría la oferta de porros si eso surgiera. JiMin simplemente había decidido que había terminado con perder todo el día sintiéndose triste y solo. Quería una pequeña oportunidad de felicidad, incluso si era solo temporal.

Simplemente sentado en la oficina con YoonGi, hablando de "estupideces" que nadie más sabía, eso era algo que necesitaba; que ansiaba. Hablar con el otro hombre parecía ayudar a eliminar los malos sentimientos que solía contener y que ahogaba con una botella de champán. Además, JiMin quería volver a verlo.

No había nada de malo en querer ver a... un amigo de nuevo, ¿verdad? Oh, solo pensar que podría tener un amigo era emocionante y un poco aterrador para él. JiMin en realidad se aferró a la barandilla mientras subía la escalera para ir al dormitorio, con las piernas temblando un poco. ¿Cuánto tiempo había pasado desde que había tenido un amigo? ¿Un buen amigo y no un compañero de trabajo de Nam? Parecía no recordarlo y cuando entró en el vestidor pudo sentir que las comisuras de sus labios se levantaban vertiginosamente. YoonGi no era como JungKook o TaeHyung. YoonGi era algo diferente, algo que lo ponía nervioso, pero también feliz. Pudo mantener su interés con sus palabras y sus gestos, incluso cuando en realidad no estaba hablando de nada interesante, y JiMin podía escucharlo hablar de todos modos. Pero supuso que la diferencia más importante era el hecho de que YoonGi también lo escucharía hablar y lo vería con mucha más atención que los otros dos.

YoonGi no lo estaba haciendo porque al final tendría una recompensa sexual. Al estar en su compañía, JiMin había descubierto que el otro hombre le había dado algo más... una recompensa emocional.

Ese pequeño sentimiento divertido en su estómago era mucho mejor que la excitación, JiMin estaba seguro de eso.

Cuando salía del bloque de apartamentos, JiMin solía vestirse de manera bastante conservadora: camisas blancas o negras escondidas debajo de su abrigo, pantalones ajustados y zapatos elegantes. Tenía que verse bien porque todos los que lo conocían, lo conocían por JungKook. Eso significaba verse presentable para el hombre más joven. Pero JiMin no iba a la apertura de una tienda ni a una pasarela, no estaría parado en una velada mirando a los hombres más altos y delgados presentes y sintiéndose como el modelo anticuado en la línea de montaje; iba a la guarida de drogas durante unas horas para hablar con YoonGi. ¿Necesitaba verse tan... conservador cuando se reunía con un amigo?

—¿Qué dices, Wangbi? —JiMin se inclinó en lapared para mirar a la gata, viendo que estaba tumbada en la cama—. ¿Aburrido y rígido o casualy... amigable? —Ella solo movió las orejasen respuesta. Se volvió hacia su armario, apartando la ropa hasta que sus dedosrozaron algo suave; de piel. JiMin sacó la percha para ver un suave jersey de visón* rosa. Ajuzgar por la sensación contra sus dedos, nunca lo había usado y se perdió ensu pensamientos tratando de averiguar dónde lo había comprado o quién se lohabía regalado. Lo estudió por un momento antes de recordar cómo YoonGi parecía vivir como esos animalitos mientras trabajaba y eso fue lo que lo hizo sacarlo y encogerse de hombros sin preocuparse.

—Bueno, al menos combina con tu collar —comentó a Wangbi.

Varios minutos después, conun jersey combinado con un par de jeans negros y unos pumps*, Wangbicon su collar de diamantes y correa, JiMin estaba sentado en el diván aplicandouna ligera capa de base sobre su piel. Después de la desventura bastante tontade anoche con Valium y champán, se veía algo muerto. Bueno, él había estadoexperimentando bastantes días de desventuras en realidad. Por eso ya casi habíadejado de tomar las píldoras, y probablemente era una señal para ya no detomarlas.