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—¿Vas a ir a por Chan y Changbin? —pregunta Seungmin colgándose la mochila al hombro.

—Sí —dice Jisung, empezando a caminar junto a su hermano y Jeongin—. ¿Qué vais a hacer vosotros?

—Vamos a estudiar en su casa —responde señalando al pequeño—. ¿Vais a la cafetería de Woojin hyung? —Espera a que Jisung asienta—. Pues cuando acabéis venid a recogerme. Adiós.

—No te aproveches —comenta Jisung, pero Seungmin le da la espalda y echa a andar por el camino contrario.

Jeongin se gira y le sonríe con alegría.

—Nos vemos luego —se despide moviendo la mano.

—Venga, vete —responde, haciéndose el molesto.

El pequeño se acerca a él y le mira con el ceño fruncido y los labios entreabiertos.

—¿Te has enfadado?

Jisung le sonríe y le revuelve los cabellos.

—Claro que no, tonto. Pero si no te vas, Minnie entrará en tu casa por la ventana, y no creo que a tus flores les vaya a hacer gracia.

La expresión de Jeongin cambia a una asustada y, tras despedirse, se va corriendo.

Por su parte, Jisung sigue su camino hasta la universidad de sus hermanos y se queda esperando en la puerta, como cada jueves. De repente empieza a ponerse nervioso. Va a encontrarse con Minho después de la escenita del baño.

Mientras se replante seriamente el marcharse a casa, ve la mata de pelo de Chan y, al momento, su cara, la de Woojin y la de Minho.

—Hola, pequeño —saluda el mayor—. ¿Cómo te ha ido el día?

—Bien —responde, mirándole fijamente para evitar la mirada de Minho.

—¿Qué van a hacer Minnie e Innie hoy?

Los jueves es el día que Seungmin y Jeongin siempre pasan juntos. Aprovechan que los demás están fuera para pasar el tiempo jugando a videojuegos, comiendo chocolate o estudiando juntos.

—Estudiar —se limita a responder.

Se siente un poco incómodo y solo desea que aparezca de una vez Changbin y vayan a la cafetería de Woojin. Lo único que le puede hacer sentir bien ahora mismo es un café helado preparado por el mayor de todos.

Minho está observándolo, y cuando Chan asiente y se dispone a comentar algo con Woojin, se acerca un poco a Jisung.

—¿Hoy no has traído caramelos de limón?

Por fin dirige la vista a él. Asiente y saca un par de caramelos del bolsillo pequeño de su mochila.

—Toma —dice—. Come.

Minho sonríe feliz y abre el primero.

—Que nunca se pierdan las costumbres de que me des comida. ¿Hoy tampoco quieres?

—No me gusta el limón. Cómetelo tú.

Se lo mete en la boca y cierra los ojos para saborearlo.

Jisung no entiende cómo puede hacer como si no hubiera pasado nada. Se está comportando como siempre.

Cuando Minho se mete el segundo a la boca, Changbin aparece hablando con uno de sus amigos, con los que Minho no tiene mucha relación.

La verdad es que nunca ha sido de tener muchos amigos, pero cuida bien de los que tiene, aunque no suela hacerlo ver.

Changbin se despide y se acerca al grupo.

—¿Nos vamos?

Suben los cinco al coche de Chan y menos de veinte minutos después, Woojin, vestido con un delantal azul, deja frente a Jisung un vaso de café helado y se retira a por los pedidos de los demás. Chan y Changbin siguen hablando sobre las clases mientras Jisung mira con felicidad su bebida y se la lleva a los labios. Cuando vuelve a dejarlo sobre la mesa, Minho está observando el líquido con intensidad.

You Should Be Here [Minsung]Where stories live. Discover now