My Sugar Daddy

15-Now I never, never get to clean up the mess I meed

*When I was your man de Bruno Mars

5 llamadas perdidas, se marcaban en el celular de Steve, mientras él estaba acostado en su cama siendo abrazado por Bucky .

El rubio no paraba de soltaba hipidos y de llorar dejando rojizos sus ojos color mar.

Las palabras escuchadas, las malditas palabras escuchadas fueron suficientes para que Steven perdiera su centro, su eje. Aunque puede ser que la halla perdido mucho antes.

-Hermano, va a pasar todo, te lo prometo- Angustiado por no poder ayudarlo  más, Bucky abraza cada vez más fuerte a su rubio amigo.

Steve intentaba creerle a James, pero le era imposible. Todo era su culpa, su culpa el haber intentado algo en el aire, en el haber apostado, en creer que Tony era lo que necesitaba. El debía ser fuerte pero no ahora. Lo único que intentaría esta noche es dormir a pesar de esa opresión fuerte en su corazón.

-Que iluso fuiste- Se decía el rubio mentalmente mientras se rendía ante el cansancio.

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Una semana de ese horrible día.

Ya no quería recordar más, pasó días llorando, gritando y recordando todo; especialmente sus besos, algo que hacia sangrar su herida, porque no podía olvidar la suavidad de los labios de Stark al besarlo. Lagrimas volvían aparecer pero tenia que retenerlas, estaba en su lugar de trabajo y no quería armar más escándalo del que le hizo a Bucky, toda la vida le agradecería por contenerlo esta semana. 

¿Cuánto tiempo faltara para volver a la normalidad?- Se cuestionaba Steve, sin encontrar una respuesta que lo conformara.

Seguía llamando el empresario pero el rubio lo evitaba, aunque a la noche cuando llegaba a su casa esperaba que ocurriera un milagro, Tony tocando la puerta, hablando con él, diciéndole que fue un error, que lo abrazara, que lo besara y que...

Oh demonios, las lágrimas no aguantaron más y se retiro al baño a llorar. 

Unos toques en la puerta se escucharon.

-Steve... mmm ¿Estás bien?- La voz de Peter se encontraba preocupada, eso hizo sentir peor a Steve; se lavo la cara y simulando una sonrisa en el espejo, hablo:

-Si-ii, todo bien Pet, es solo un poco de ...aler-gia... sii, alergia.

-Amm, bueno Steve, cualquier cosa me avisas- Sin perder la amabilidad en su voz, se retiro el castaño.

-Vamos un día más y estaré en casa comiendo una rica ensalada, con muchas papas fritas y hamburguesas- Termino de hablar para dar un último respiro y seguir fingiendo que todo iba excelente.

Al salir del baño, se llevo una sorpresa, en la galería se encontraba él.

-Hey, Brock ¿Qué haces por aquí?- De verdad no se esperaba que alguien como su ex novio le interesara el arte y menos las galerías.

-Steve, que bueno verte. ¿Enserio trabajas aquí?-

-Si, ¿Por?-Steve notaba que ahora venía el comentario pesimista que caracterizaba a Rumlow

-¡Que increíble Stevi! De verdad, muchas felicitaciones, siempre supe estabas destinando al éxito, por algo te elegí como novio, ¿no?-Mientras mostraba una sonrisa traviesa, le guiño el ojo.

Primera vez en el semana que alguien le sacaba una carcajada al rubio, soltando la tensión que cargaba en su corazón.

-Ves como te hago reír, soy el candidato perfecto para estar junto a ti- Entre broma y broma el pelinegro mostraba sus intenciones.