My Sugar Daddy

3- Encontré a mi Sugar Daddy, oh*

*I found my sugar daddy, oh: Sugar Daddy de Patsy Gallant

- ¡Ay cariño eres tan gracioso!-dijo un alegre joven sentado en las piernas de Tony.

- Me halagas primor, pero sabes soy mejor en otras en otras áreas- susurro en el oído del joven pelirrojo, posando su mano la pierna de este.

 -Me encantaría comprobarlo en este escritorio, señor Stark- hablo melosamente el colorado para luego empezar a darle besos en el cuello de Stark.

-¡Anthony, te necesito ahora, llegas tarde- Entro furiosa Pepper -

-Mi querida Virginia rompes el momento, no ves que estoy en algo importante- decía el azabache haciendo gestos con sus ojos.

- Cinco minutos- Cerrando de un portazo la puerta de Stark, se retiró la asistente en jefe.

-Agggh es tan odiosa- mencionó con frustración el acompañante

- Es trabajo bebe, pero no debes poner esa cara, se te hacen arrugas- dijo un tony jocoso. El preocupado joven empezó a estirar su piel, quedando sensible por lo dicho. Luego de corroborar en un espejo que no tenía ninguna marca en su cara, procedió a decir cautelosamente -Tony, amor, entonces ¿Quedamos en ir a la boda de mi hermano el próximo finde semana?-

-Emm creería que no, es que sabes que las bodas no son los mio, además no estamos en nada serio cariño- con una sonrisa intentaba calmar a su joven acompañante.

-Eso no decías ayer mientras estábamos en mi cama, querido- furioso el pelirrojo se salió de su agarre y se dirigió a la puerta- además sabes que, no estoy para este tipo de juegos, se te fue la oportunidad conmigo, Tony "nada serio" Stark- termino su frase escupiendo con rabia cada palabra. Luego dramáticamente salio de la oficina, sin olvidar el característico portazo de indignación.

-Era muy bueno con la boca, una lástima- reflexiono el empresario cuando una llamada lo distrajo-

-¡Anthony Edward Stark! dije cinco minutos, sabes que te esta esperando Daniel Souza- Se escuchaba a Pepper irritada por el aparato- ¿Ya terminaste con el chico del mes? o ¿Era de la semana ?- preguntó sarcásticamente su amiga.

-Ay que insensible eres, sí sí termine, aunque siento pena sabes que los colorados son un gusto especial en mí. Ahora puesto está desocupado, si quieres puedes unirte lindura- bromeaba el empresario.

-No estas en mis ligas Tony y si no quieres que tu lindo trasero tenga incrustado mi zapato te recomiendo ir a la charla con Daniel-

-Oye por fin reconoces mi buen atributo Pepper te ascenderé- del otro lado de la línea se escucharon pitidos, dando a entender que la llamada había sido finalizada. Con pesadez se dirigió a la sala donde se encontraba su amigo Daniel Sousa, un empresario emergente, que todavía no tenía los suficientes recursos para emprender en totalidad su plan

Tony lo había conocido en la Universidad, estudiando economía pero la vida dio giros inesperado en la vida de Daniel cuando luego de casarse con Peggy Carter, novia de la adolescencia de este, tuvieron que hacerse cargo de un niño abandonado por causas del fallecimiento de los padres del infante. En ese momento las vidas de los amigos se separaron, ya que Daniel se mudó de estado junto a su familia, mientras Tony se emprendía como empresario multimillonario. Hace pocos meses establo comunicación con Daniel, en una reunión de ex compañeros de la Universidad, en donde quedaron en contacto para realizar un proyecto en conjunto.

-¡Daniel querido! que bueno verte, espero no haberte hecho esperar demasiado-

-No te preocupes estoy con tiempo, Peggy está de visita donde sus padres y no tengo en casa a nadie que me vaya a regañar por llegar tarde- soltando esto último con una gran carcajada.