✡ Guerra de Dioses y Demonios 1: El Nacimiento del Guerrero Prodigio

✡ LXXXI

Capítulo 81: Naikon vs Kren

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Ambos compañeros se encontraban caminando a ritmo ligero por uno de los túneles de aquellas profundas cavernas.

Raidel, quien estaba más pensativo de lo normal, soltó un profuso suspiro.

—La verdad es que no lo comprendo —declaró—. No entiendo por qué le hiciste caso a ese monstruo cuando nos dio la supuesta localización del lugar en el que se encuentran las plantas... ¿Qué tal si es una trampa?

—No lo es —dijo Sylfer, muy seguro de estar en lo correcto—. Él decía la verdad. Lo vi en sus ojos...

—Tal vez sepa mentir bien —sugirió Raidel, en voz baja, sin muchas ganas de seguirle contradiciendo, pero alguien tenía que hacerlo.

—Lo dudo —insistió él, sin aminorar su marcha—. Confío bastante en mi capacidad para leer a las personas, en base a sus expresiones faciales, su postura, el tono de su voz...

—Sí, claro —replicó el muchacho sarcásticamente—. Una cabra debe tener muchas expresiones faciales...

—Más de las que te imaginas.

Dado que el muchacho estaba realmente escéptico con respecto a este tema, a Sylfer no le quedó otra alternativa más que demostrarle un poco de lo que sabía hacer:

—¿Sabes?, hasta una piedra podría darse cuenta de lo enamorado que estás de la princesa.

—¿Q-q-qué? —balbuceó Raidel, rojo de la vergüenza—. ¿D-de qué estás hablando?

—Yo no me acercaría a ella si fuera tú —le advirtió—. Ella es algo... especial. Su madre (la esposa del hijo del viejo rey) viene de un linaje superior, un linaje mucho más temido y respetado que el de cualquier nobleza o realeza que tus patéticos ojos hayan visto jamás, y el cual es más antiguo de lo que te puedas imaginar. —Se encogió de hombros—. Un simple mortal como tú no tiene ninguna oportunidad de estar con ella. Simplemente está fuera de tu alcance. Es como si... Bueno, es como si un simio rojo quisiera estar con una princesa; algo imposible.

Raidel entrecerró los ojos, algo ofendido de que lo hubieran llamado "simio rojo". Normalmente habría contraatacado con alguna ofensiva, pero tenía cosas más importantes en las que depositar su atención. ¿Qué clase de linaje "superior" se refería Sylfer? Y por cierto, ahora que lo pensaba, no había conocido a los padres de la princesa. Según las palabras del enano, el viejo rey tenía un hijo, y ese hijo era el padre de la princesa. Pero al parecer, nadie era tan importante como la madre de la princesa, quien, según Sylfer, provenía de un "linaje superior que es más respetado que cualquier nobleza o realeza".

¿Qué clase de linaje podría ser más respetado que una realeza? ¿Es que acaso la madre de la princesa era una diosa que había caído del cielo o algo por el estilo?

Se preguntó si todo esto sería una broma; una mentira; una estrategia para que Raidel dejara de fijarse en ella.

—No es ninguna mentira —dijo Sylfer, sereno—. Estoy hablando muy en serio.

—¿Ah, sí?

—Te sugiero ir con mucho cuidado porque el viejo rey es alguien que siempre se ha mostrado muy protector con la princesa, y si él descubre algo de tus sentimientos hacia ella... eres hombre muerto.

Raidel no dijo nada.

Nunca más volvió a dudar de la habilidad de Sylfer de leer a las personas.

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