El Silencio Del Destino / Tanjirou X Tu * Terminada *

Parte 40

POV Mei

Él sonrió de forma repugnante cuando lo nombré.
Busqué con mis ojos rápidamente a Hanako y Takeo, ambos estaban siendo cuidados por Zenitsu e Inosuke.
Ambos sintieron mis ojos sobre ellos y de alguna forma me hicieron sentir que no me preocupara, ellos se encargarían de protegerlos a ambos.
Les sonreí en forma de agradecimiento.

Volví mi mirada a Tanjirou y él imitó mi acción. Solo con mirarnos sabíamos lo que debíamos hacer.

- Oyakata-sama - habló Tanjirou sin quitar la vista del frente - Por favor entre a la residencia junto a su familia, nosotros los cazadores con los pilares nos encargaremos de esto - dicho aquello todos los pilares presentes sacaron sus armas y tomaron posición formando así dos bandos.

El patrón retrocedió y fue llevado a un sitio más seguro junto a su esposa e hijos, es importante mantenerlo a salvo bajo cualquier precio.

- Nos encargaremos de él después - habló Muzan aún con esa sonrisa en su rostro.

Él y los demonios comenzaron a caminar entrando a la residencia, mientras avanzaban las glicinas que habían en el lugar comenzaron a marchitarse cómo sí fuese un acto de magia.

- Me tomó algo de tiempo descubrir una forma de sacar esas odiosas flores hasta que finalmente lo conseguí - habló orgulloso entrando a la residencia.

- Puede que te hayas desecho de las glicinas, pero aún tienes que luchar contra nosotros - habló Uzui.

- Ustedes solo seran un entretenimiento para mis demonios - dicho eso las lunas demoniacas y los demonios se lanzaron sobre los pilares, pero aún así Muzan no se movía de su lugar.

Él estaba de pie con ambos brazos cruzados con una amplia sonrisa en su rostro, él no venía por Oyakata-sama ni por unos cuantos pilares, él venía por quién más temía.

- Hanako - susurré.

Sin pensarlo dos veces corrí con velocidad hacía donde se encontraba Zenitsu e Inosuke. Tanjirou que me había escuchado susurrar siguió mis pasos y ambos llegamos junto a los chicos.

- La quiere a ella, viene en busca de Hanako - aunque trataba de calmarme, pensar en que mi miedo más grande se había vuelto realidad provocaba que mis manos temblaran.

- Mei - la voz de Inosuke me sacó de mi red de pensamientos - No te olvides que estas hablando con el gran Inosuke Hashibira, no dejaré que ningún miembro de mi mánada sea tocado por ese demonio - por primera vez él dijo bien mi nombre, y además había logrado hacerme entrar en razón.

- Gracias Inosuke - dije calmando mi respiración.

- Lo mejor será luchar en grupo, mientras más lejos estemos de Muzan mejor - habló Zenitsu.

- Me pregunto por qué no se estará moviendo de allí - susurró Tanjirou

- Tiene que estar planeando algo...podría tener alguna carta bajo la manga, algo que le haga sentir tener el poder sobre la pelea...- miré a mis alrededores y no encontraba pista alguna, sus ojos estaban ahora cerrados cómo sí estuviese esperando ser atrapado.

Busqué con la mirada entre los pilares que luchaban contra las lunas demoniacas, se encontraban hasta ahora todos bien.
En nuestro grupo estabamos todos, Tanjirou, los bebés, Inosuke, Zenitsu y Nez-

- ¡Nezuko! - grité.

Muzan abrió sus ojos y esa sonrisa en su rostro solo se amplió aún más.
Él hizo un gesto con sus dedos como un chasquido y de un momento a otro Tanjirou, Inosuke, Zenitsu, los bebés y yo junto a él y un par de lunas demoniacas habíamos sido "transportados" a un lugar distinto.