Capítulo 14

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JungKook se encontraba mirando al techo de la habitación, estaba recostado en una camilla, la mitad de su cuerpo se encontraba tapado por una sábana blanca, la cual cubría su pie vendado y en el dorso de su mano tenía una pequeña aguja clavada, la cual le transfería suero.

Una enfermera le había realizado una serie de preguntas referentes al accidente y también sobre algunos datos personales. Mientras que otras dos se encargaban de curar las heridas, que anteriormente Jimin había limpiado. Las mujeres al notar que sus cortes estaban limpios le preguntaron y él les tuvo que decir que un "amigo" le había ayudado. Las enfermeras elogiaron a Jimin por haberlo hecho, después le dieron de tomar algunos analgésicos para el dolor muscular y posteriormente se encargaron de su tobillo.

JungKook liberó un suspiro, se sentía extraño y no precisamente por lo del accidente. No podía dejar de pensar en el beso que se había dado con el pelinegro. Se golpeaba mentalmente por no haber hecho nada para detenerlo y para detenerse. Él no era gay y estaba seguro de que Jimin tampoco lo era. Por el amor de dios, Jimin tenía novia.

La puerta de su habitación se abrió, JungKook miró de inmediato y cuando vio a su madre entrar, no pudo evitar llorar. Su madre entró casi corriendo y lo abrazo suavemente, aunque deseaba hacerlo con toda su fuerza.

—Hijo ¿Cómo estás?— lágrimas escapaban de sus ojos.

JungKook tenía muchos hematomas adornando su rostro y brazos, aumentándole las cortadas. Ha-neul no se quería imaginar el resto del cuerpo.

—Ahora que estás aquí, me siento mejor— correspondió a su abrazo —Perdón mamá, perdóname por haberte tratado mal... Yo pensé que moriría...

—Ya hijo... Tranquilo— acarició suavemente su cabello —No tienes porqué disculparte, tu padre y yo somos los que deberíamos de hacerlo... No te dijimos lo de tu abuela y eso obviamente te dolió. Créeme que te entendemos, por eso dejamos de insistir tanto en el tema.

—Mi abuela— rompieron lentamente el abrazo —Quiero verla, ¿sigue de viaje?

La señora Jeon limpio sus lágrimas —No le queríamos decir al principio, para no preocuparla. Pero sabíamos que tú ibas a pedir verla y que si ella se llegaba a enterar de tu accidente más adelante, nos mataría a tu padre y a mí por no decirle —Ambos rieron —Puedes estar tranquilo, hace rato le marcamos y nos dijo que tomaría el primer vuelo para Seúl.

—Gracias mamá— sujeto su mano —De verdad gracias.

—No hay nada que agradecer— sonrió—Por cierto... Tu padre y yo, ya conocimos a tus salvadores.

JungKook enarco una ceja al escuchar "salvadores", su mamá libero uno pequeña carcajada, ante la confusión de su hijo.

—Me refiero a tus amigos Hoseok y Jimin.

El castaño se tensó al escuchar salir de la voz de su madre, el nombre del más bajo.

—Son unos amores de personas. Una vez que te den de alta deberíamos de invitarlos a cenar a nuestra casa, como agradecimiento. También hay que invitar a tu otro amigo Yoongi, quien por cierto se tuvo que ir, porque tenía un asunto importante... O algo así me comentó Jimin.

JungKook trago saliva — ¿Quiénes siguen en el hospital? — Deseaba de todo corazón que el pelinegro ya se hubiera retirado.

—Afuera esta tu papá, tus amigos Hoseok y Jimin— JungKook apretó un poco la mano de su madre —Yo de verdad estoy muy agradecida con ellos — con sus dedos colocó un mechón de cabello, detrás de su oreja — Sobre todo con Jimin, por que fue él quien te sacó del barranco y quien te estuvo cuidando todo ese tiempo en el que estuvieron incomunicados y alejados de los demás.

MI DULCE KARMA #1 - (JIKOOKMIN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora