Capítulo 30

152 27 1
                                    

Me desperté llorando, pero al mismo tiempo, respiré de alivio al saber que solo fue un sueño, uno muy horrible. He soñado con el funeral de Tristán, me he soñado abrazando a mi padre mientras me consolaba y yo, estaba vestida de negro, como todas las personas que estaban reunidas en mi sueño. Ni siquiera había podido mirar su ataúd y recuerdo a Matías decirme que mejor me quedara con el último recuerdo que tuve de él. Solo fue un sueño, y quería que solo se quedara en un sueño. Pero nada parecía avanzar con su salud y es lo que me tiene ansiosa y preocupada.

Tallé mis ojos y al mirarme los dedos manchados de negro supe que me fui a dormir sin tan siquiera preocuparme por desmaquillarme, últimamente he estado tan metida en lo de Tristán que me he olvidado de las pequeñas cosas como desmaquillarme o hacer un par de tareas de la universidad a las que no les he prestado atención. Solo tomé mi celular del buró e hice lo que he estado haciendo estos últimos días, le escribí a Eduardo y a Marisol para intentar saber más sobre él, pero todo parecía seguir igual, me decían lo mismo: está delicado y los pronósticos no son buenos. Todos los días me levantaba con la esperanza de que me llegara un mensaje de su novia o de Matías diciéndome que ya lo han pasado a piso y que se encuentra mucho mejor, pero nada parecía cambiar.

—Hola baby, mover cielo, mar y tierra se está haciendo complicadísimo para mí. Verás, estuve hablando con Eddy, el hijo del mejor amigo de mi papá que estudia medicina para intentar saber de ti, su novia conoce a un residente de tu hospital. Pero lo único que nos han dicho que es no estás estable y que... —Mi voz comenzaba a cortarse a medida que continuaba grabando el audio—. ¡Ay Tristán! No sabes el vacío que estoy sintiendo ahorita sin ti, no sabes cuánto quiero abrazarte, verte, escuchar tu voz...

Envié el audio antes de que mi voz se quebrara aún más, dejé el celular a un lado y volví a acostarme, abrazando a la almohada mientras me soltaba a llorar una vez más. Toda esta incertidumbre de no saber qué es lo que va a pasar con él me está aniquilando lentamente, solo pensaba en él y en lo que sería de mí si me llegase a faltar.

Mi celular me sacó de los pensamientos cuando lo escuché vibrar, inmediatamente lo tomé y lo desbloqueé con la esperanza de que Marisol me haya escrito, pero era Daniel, quería saber si nos vamos a ver hoy, con todo lo de Tristán me he olvidado hasta de las citas que ya tenía programadas con él.

Daniel Morán: ¿Quieres que nos veamos otro día?

No en realidad, creo que sí necesitaba salir de mi casa y distraerme. No podía quedarme aquí todo el día, esperando el mensaje que he esperado durante toda la semana, tenía que levantarme y salir de mi cama, era lo más sano para mí. Dan ha organizado una cita para mantenerme distraída y tenía que apurarme, hemos quedado a las dos y yo sigo aquí, sin tan siquiera bañarme.  

—Sé que es imposible, pero en estas horas espero que realmente enfoques tu atención en otra cosa

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

—Sé que es imposible, pero en estas horas espero que realmente enfoques tu atención en otra cosa. Quiero que te dejes consentir hoy, ¿de acuerdo?

—Bien, ¿a dónde me llevas?

Solo te quiero para que juegues conmigo [2]Where stories live. Discover now