015

951 128 84
                                    

╭─━━━━━─╯ADIÓS╰─━━━━━─╮

Después de lo que había pasado con Ron y su envenenamiento, Harry no había buscado a Ania y ella tampoco a él, la chica se veía muy poco por los pasillos y mucho menos en la clases, muy pocas veces comía en el comedor, pero las veces que lo hacía ...

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Después de lo que había pasado con Ron y su envenenamiento, Harry no había buscado a Ania y ella tampoco a él, la chica se veía muy poco por los pasillos y mucho menos en la clases, muy pocas veces comía en el comedor, pero las veces que lo hacía Harry la veía agotada.

El Gryffindor no sabía qué pensar sobre la chica en ese punto, de alguna manera sospechaba de ella y de Malfoy por lo que le había pasado a su mejor amigo, así que le pidió a Kreacher y Dobby que siguieran a Malfoy por un tiempo, no quería meter en eso a Ania, no por el momento.

Después de este supuesto accidente las cosas entre él y sus dos amigos se arreglaron considerablemente, Hermione comenzaba a tratarle bien de nuevo, eso lo alegraba muchísimo porque lo último que él quería era perderla, estaba consciente de que ese trato amable por parte de su amiga también se debía a que no lo había visto junto a Ania.

El chico quería acercarse a Ania y hablar como si nada, pero no podía, algo le decía que ella era la culpable de algo, ahora que su mejor amigo había estado tan cerca de la muerte entendía que debía llevar más en serio el asunto con Voldemort, debía tomar más precauciones con Ania, pues podría ser lo que fuera, pero estaba casi seguro de que era una mortífaga al igual que Malfoy. Agradecía que no se parara mucho por los pasillos o en el comedor pues cuando lo hacía perdía el control sobre sus acciones y simplemente le gustaría besarla.

Algo le decía que debía dejarla, algo le decía que Ania simplemente no era lo mejor, en ese punto tenía miedo de lo que pudiera traerle la chica a su vida.

Y pensaba todas esas cosas mientras entrenaba con su equipo, pero se llevó tremenda sorpresa al final del entrenamiento, pues en la entrada del campo de quidditch le esperaba Ania totalmente erguida, con cara de aburrimiento y sus manos en los bolsillos de su túnica.

Todo el equipo de Gryffindor la miró con cierto coraje, para después voltearlo a ver a él esperando que él supiera qué hacer, pero ni él lo sabía, lo único que tenía claro era que ella quería hablar, pues no hacían falta palabras, con el simple hecho de que ella estuviera ahí esperándolo le hacía entender que era algo importante.

—Adelántense sin mí —todos sus compañeros de casa se miraron entre ellos y se adelantaron, Ron caminaba un poco más lento y no dejaba de verlo a él y a Ania alternadamente. Sabía que lo único en lo que pensaba su amigo era en Hermione. Harry le había contado sobre los sentimientos de Hermione en busca de ayuda alguna, la cual su amigo no pudo brindarle.

Cuando estuvieron totalmente solos Ania fue la primera en hablar.

—¿Crees que yo envenené a tu amigo? —Harry definitivamente no esperaba aquello y a pesar de que estaban en marzo sintió como si un frío los envolviera, hasta tuvo que comprobar que no había dementores cerca.

Tenebris [ Harry J. Potter ]Where stories live. Discover now