Dos skaters y una amistad (EN EDICIÓN)

Capítulo 27

Era sábado, hoy iba a tener las entrevistas con mis representantes y estaba de los nervios.

Ross me propuso venirse conmigo a las entrevistas, ya que él sabía un poco más que yo de este mundillo, por lo que aparte de solo acompañarme también pasaría conmigo a todas las entrevistas.

Al principio me negué, ya que hoy era el cumpleaños de Riker, y ya que yo me lo perdía por culpa de esto, no quería que Ross se lo perdiera por mi culpa, pero me dijo que no pasaba nada por que cuando volviera a casa ya podría estar con él.

La primera entrevista era a las 8:30 y era en el centro de la ciudad, por lo que mi alarma sonó a las 6:30 para empezar a prepararme, lo bueno es que me había duchado la noche anterior por lo que tendría tiempo para elegir el outfit perfecto para dar una buena impresión.

No quería parecer demasiado mayor, a si que después de buscar durante un rato me decante por una camisa de cuadros, unos pantalones negros y mis converse negras. Esto lo iba a acompañar con un bolso negro.

Agarre mi movil para escribirle un WhatsApp a Riker felicitandole y después me fui a mi baño para peinarme el pelo, el cual me alise un poco y me lo dejé suelto y después me maquille un poco, sin que fuera demasiado recargado.

Metí en el bolso mi teléfono, algo de maquillaje por si me tenía que retocar, unas gafas de sol y mi cartera y después bajar a la cocina donde estaba mi madre desayunando.

-Buenos días, ¿estás muy nerviosa?- me pregunta mi madre cuando entro en la cocina.
-Un poco, pero creo que porque viene Ross no lo estoy tanto- me sirvo una taza de café.
-¿Hay algo entre el rubito y tú?- me pregunta mi hermano entrando en la cocina.
-No, solo somos amigos- contesto.
-Eso ya lo veremos- dice y como estaba pasando a mi lado le di un pequeño golpe en el brazo.

Me estoy terminando el café cuando Ross me manda un mensaje diciendo que me estaba esperando con el coche en la puerta, a si que me despido de mi madre y mi hermano con un beso en la mejilla y salgo de mi casa después de agarrar las llaves de esta y me montó en el coche de Ross.

-¿Nerviosa?-me pregunta Ross cuando entro en el coche.
-Un poco- respondo mientras me muerdo el labio inferior.
-Seguro que entre esos cuatro representantes esta el perfecto para ti, a si que relax- dice Ross mientras me mira.
-Eso espero- Ross se me deja un beso en la mejilla.
-Vamonos- Ross arranca el coche.

Tras 20 minutos en coche, llegamos donde habíamos quedado con el primero, era una cafetería bastante pequeña, cosa que me extrañó un poco ya que era un sitio informal y no una oficina, pero tampoco le di mucha importancia. Bajamos del coche y yo me coloco el pelo y la ropa de nuevo.

-Estas preciosa, a si que no hace falta que hagas eso- dice Ross mientras se acerca a mi haciendo que me ponga roja.-¿Entramos?-me pregunta Ross con una sonrisa.
-Entramos- doy un gran suspiro.

(......)

Salimos de la oficina dando por finalizada la mañana de "representantes" y decidimos ir a comer al MC'Donals.

Agarramos la comida para llevar y Ross conduce hasta una playa que conocía, donde, nos paramos en un aparcamiento y empezamos a comer.

-Me han encantado todos los representantes- me como una patata frita.
-Ya, la verdad es que todos eran muy majos, pero él que mejor "sensación" me ha dado a sido el segundo- Ross hace comillas con los dedos.
-¿Harry?, a mi también me ha parecido muy majo, creo que le voy a escoger a él- bebo de mi Fanta de Naranja. -Gracias por venir conmigo-
-No hay de que, tenía ganas de pasar un día a solas contigo aún que fuera de trabajo- me contesta
-A mi también me apetecia pasar un día a solas contigo- digo para abrir mi hamburguesa.

Terminamos de comer y decidimos ir a dar una vuelta por la playa, y como el coche estaba muy cerca, me quito los zapatos para sentir la arena en los pies, por que era una de las sensaciones que más me encantaba.

-Necesitaba esto- digo mientras andamos.
-Y yo- Ross entrelaza nuestras manos
-Estoy cansada de andar, a si que llévame a caballito- Ross para de andar.
-Tu sueñas ¿verdad?- dice Ross medio riendose.
-Porfiiiii- digo poniendo cara de cachorrito.
-Vale, pero solo porque amo esa carita- se agacha un poco para que me pueda subir.

Me subo encima de él y empezamos andando lento, pero luego empieza a acelerar la velocidad y termina corriendo, por lo que pensaba que en cualquier momento me caería al suelo.

En un momento Ross para haciéndome bajar y poniéndome enfrente suya, cosa que hizo que mi corazón empezara a latir fuerte.

-¿Contenta?- me pregunta.
-Mucho- digo haciendo que en su cara aparezca una pequeña sonrisa.
-Pues esta ha sido la última vez que te vas a subir en mi, que lo sepas- levanto mis cejas.
-¿A sí?, eso ya lo veremos- respondo.
-No, no veremos nada- me lleva la contraria.
-Di lo que quieras, pero cuando me vuelva a subir a caballito en ti, te recordaré esta conversación- Ross me abraza por la cintura.

-¿Siempre tienes que conseguir todo lo que quieres o me lo parece a mi?- Ross me apega más a él.
-Soy una chica que no se rinde facilmente- respondo por lo que el rie.
-Eres una chica fascinante- dice haciendo que se me corte un poco la respiración, por lo que me sale solo abrazarle, sabiendo que había cortado un poco el "rollo".

-¿Te quedas a mi casa esta noche a dormir?- me propone Ross mientras caminamos de vuelta al coche.
-Claro, le pongo un WhatsApp a mi madre y ya esta- digo sacando el teléfono y escribiendo le a mi madre.

Nos montamos en el coche, donde me vuelvo a poner los zapatos y hacemos el mismo camino que a la ida para ir a la casa de Ross.
Cuando llegamos a esta los chicos están jugando videojuegos y Rydel está mirando su teléfono.

-Ya estamos en casa- dice Ross mientras entramos en el salón.
-¡Felcicidades Riker!- me acerco corriendo al nombrado dándole un gran abrazo.

-Muchas gracias, pero contarme ¿qué tal todo?-me pregunta Riker parando el juego, haciendo que Rocky le mire un poco mal, al igual que Ryland.
-Pues bien, todos han sido súper majos pero creo que hemos elegido uno- les cuento.
-¿Y como se llama al que has elegido?- me pregunta esta vez Ryddl
-Harry- contesta Ross por mi.

Seguimos hablando un rato hasta que Mark y Stormie llegan con una tarta mientras le cantan "cumpleaños feliz" a Riker, a lo cual nos unimos.

Le entregan el regalo a Riker y después cortamos la tarta, la cual estaba muy rica, ya que la había hecho Stormie y ella siempre cocinaba genial.

Después de comer tarta nos ponemos a jugar un rato a las cartas, ya que a Riker le encantaba y como era su cumpleaños le tocaba a él elegir que haríamos.