No soy ciega [✔️]

💙 Capítulo 02 💙

—¿Ustedes saben que carajos va a ver en la fiesta? —apenas nos sentamos y Julieta ya está interrogando a los amigos de mi hermano.

—Sí —responde uno de ellos seguido de estrepitosas risas.

¿Estas mujeres no pueden esperar al viernes? Dudo que logren sacar información.

Por naturaleza se me podría considerar impaciente. De pequeña me desesperaba no saber nada de mi entorno, quería conocerlo todo, aun hasta la fecha me tranquiliza tener controlada la situación, saber lo que sucede a mi alrededor y a las personas que me rodean. Pero me gustara o no, tuve que aprender que hay cosas que no voy a saber en un periodo de tiempo corto, largo o nunca y no debe afectarme, no de la manera en la que lo hacía antes, con enojo.

Me como mi emparedado mientras escucho como mis amigas, bastantes curiosas he inquietas de información, hacen un show.

—Porfa Matt... Luis, John, Arturo, Esteban, Ty tu si me dirás ¿no? —suplica a los miembros del equipo e incluso a un amigo de ellos.

— ¿No hablaran? —insiste Raquel un tanto derrotada.

—No —se limitan a decir para segundos después estallar en carcajadas.

—Váyanse a la... —murmura con odio Julieta dejando la frase a medias.

Todo el equipo de F. A se desasen en risas hasta que uno de ellos comienza a toser exageradamente, supongo que se estará ahogando, pero solo logra que las burlas aumenten de nivel.

—Que boquita —le dice Erick.

¿Ya mencioné que mi hermano es el capitán del equipo y casi todos sus amigos son parte del F. A? Sé que estoy siendo un poco repetitiva, pero es que a veces me fastidia la comodidad de ser "La hermana de..."

Giro la cabeza a la derecha donde sé que se encuentra Erick. Me aseguró de que es él colocando mi mano en su hombro.

—¿Hermanito? —hablo con voz melosa y sonrió un poco queriendo parecer inocente.

—¿Si? —suena preocupado.

—¿Tú si nos dirás cuál es la sorpresa verdad?

—Lo siento, pero soy una tumba —sentencia.

—Ya que, más vale que sea algo bueno porque donde solo sea el rumor tendrán a toda una escuela furiosa —aviso.

—Pues será más de una escuela, las porristas estuvieron anunciando a todo cuanto conocieran de ello —cuenta Julieta más para nosotras que para los chicos.

—¿Cómo sabes? —pregunto.

—Hace poco me uní al equipo —confiesa en un susurro.

—¡Oh wow! —soltamos Raquel y yo al unísono.

Seguimos platicando entre nosotras hasta que el timbre suena y nos retiramos a nuestras clases.

* * *