Capítulo 12.

169 14 1
                                    

- ¡Louis, deja ese espagueti en el plato ahora mismo!

- ¡Jamás me rendiré! ¡No podréis conmigo!

- ¡Pásalo Louis!

Louis y Niall se han aliado para mancharnos a todos de salsa carbonada. Ambos, de un momento a otro, se han levantado de la silla y van pegando espaguetis en nuestras caras. La primera víctima fue Daniela, quien se sentaba al lado de Louis. Al grito de: "¡Por las zanahorias!" logró plantar un espagueti justo en toda la frente de mi amiga. Niall se unió a él realizando la misma acción con Harry, quien llegó 10 minutos después que Niall a casa.

Así estamos todos, corriendo de un lado al otro siendo perseguidos por Niall y Louis.

En un momento, Harry y yo intercambiamos una mirada furtiva en la que ambos sabemos nuestro plan de inmediato. Harry corre por la espalda de Louis con sigilo. Cuando lo tiene agarrado sin escapatoria, agarro un puñado de espaguetis y me dispongo a restregárselo por toda la cara. Dulce venganza.

Sin saber cómo, el karma me devuelve la jugada justo antes de poder realizarla. Niall me tiene agarrada pasando su brazo por mi cuello desde la espalda. Mientras agarro su brazo intentando deshacerme de él, con la mano que tiene libre me estampa un puñado de espaguetis repletos de salsa por toda la cara.

- ¡Esto por intentar atacar a mi cómplice! La próxima te lo pensarás dos veces antes de actuar, pequeña.

Pequeña. Tanto tiempo sin escuchar algo cariñoso por su parte. Aunque tenga toda la cara manchada y unas ganas terribles de acabar con la vida del irlandés, echaba de menos jugar como niños y bromear como lo hacíamos en el campamento.

- ¡Y tú acabas de atacar a mi compañera! ¡Te voy a matar, rubio teñido! -grita Harry persiguiéndolo ahora a él.

Intentando esquivar los espaguetis que vuelan por los aires, voy aproximándome al baño para limpiar un poco mi cara. Maldito Niall. Debo planear una dulce venganza, esto no va quedar así.

Cuando entro al baño me miro al espejo. No me queda otra que reírme al ver mi aspecto. Tengo salsa y beicon por toda la cara, incluso un espagueti travieso cuelga por mi frente. Mientras intento retirar todas las manchas de mi rostro, alguien atraviesa con un gran estruendo la puerta del baño. Pequeño irlandés.

- ¡No veo! ¡Ayuda, no veo!

- ¡Para, Niall! ¡Deja que te ayude!

- ¡Mi ojo! ¡(Tn), ayúdame! ¿Dónde estás?

- Tranquilo, estoy aquí.

Coloco sus manos en mi cintura para hacerle saber que estoy junto a él. Agarro una toallita húmeda y voy limpiando cuidadosamente ese ojo azul cielo que tanto me gusta. Sería una pena no volver a verlo nunca por un maldito trozo de beicon. En ese momento, Niall me rodea con los brazos que había colocado yo previamente en mi cintura. Nuestros cuerpos se unen sin dejar espacio entre los dos. Mi respiración se entrecorta, y Niall sonríe. Sabe que estoy nerviosa.

- ¿Estás mejor? -digo cuando logro retirar casi toda la mancha de su ojo.

- Ahora que estas conmigo, sí.

No me esperaba esa respuesta. Mis nervios aumentan a niveles inimaginables. Entonces, Niall abre sus claros ojos haciendo que conecten directamente con los míos.

- Pero si no los tienes irritados. ¿No decías que te dolían?

- Una mentira piadosa ha logrado que volvamos a estar juntos, con la misma distancia que manteníamos hace 4 años. ¿Me perdonarás?

Todo había sido un teatro. ¿Zayn contaba la verdad? Tal vez sea cierto que Niall sigue teniendo esos sentimientos tan intensos que teníamos en aquel campamento. No se si preguntar o tal vez romperé el momento tan especial que se ha creado.

Niall retira un mechón de pelo de mi cara con su dulce mano.

- No sabes lo que echaba de menos estar así contigo.

¿En serio ha dicho eso? ¡Joder, (tn)! ¡Claro que lo ha dicho! ¡Y no es un sueño! Creo que me voy a desmayar. Su rostro comienza a restar distancia con el mío. Esta vez no hay alcohol de por medio, todo sale de su corazón. ¿Será verdad que es el comienzo de algo bueno?

- ¡Necesito el baño! ¡No aguanto, me lo voy a hacer encima!

Se escucha cómo Louis grita detrás de la puerta mientras la aporrea. Ambos nos miramos asustados. ¡Maldito Louis! Ahora sí que voy a matarlo.

Niall, muy a mi pesar, se separa de mí. Aunque antes de separarse por completo, agarra mi rostro con sus dos manos y besa mi frente tiernamente.

- Esto no se va quedar aquí. Tú y yo tenemos una conversación pendiente, pequeña.

Tras decir esto, abre la puerta y aparece un Louis con la cara descompuesta. Será verdad que se lo va a hacer encima. Me empuja fuera del baño y cierra la puerta. Observo como Niall vuelve a unirse al resto, los cuales se encuentran con fregona en mano recogiendo el desastre que se ha armado antes.

He sido una estúpida, no he pronunciado ni una sola palabra. Tal vez por los nervios o tal vez por el impacto que me ha causado el cambio de actitud de Niall, no lo sé. Sólo sé que algo dentro de mí ha resurgido con más fuerza que antes. Necesito a mi chico tan cerca como hasta hace unos minutos estaba.

Parece que Harry ha llamado a las chicas. Perla y Melanie llaman a la puerta de un momento a otro para unirse a la fiesta. Ahora sí, esto se parece más al campamento que nunca.

Después de recoger el salón, nos sentamos todos delante de la televisión. Algunos en el sofá, otros en los sillones y otros simplemente se tiran en la alfombra, la cual hemos adornado con cojines y mantas para hacerla más acogedora. Yo me encuentro en la alfombra junto a Niall. Una manta cubre nuestros cuerpos. Louis y Liam están al lado de Niall en la alfombra, Perla se acurruca con Harry en uno de los sillones, Melanie toma por propio el otro sillón, y finalmente Zayn y Daniela ocupan el sofá grande.

- ¡Ya estamos todos! ¿Por qué no recordamos viejos tiempos con una película de terror? Hace mucho que no nos reuníamos los nueve.

Creo que no me equivoco al decir que todos nos emocionamos con las palabras de Liam. Se ha vuelto a unir la familia que se creó hace 4 años. Lo echábamos en falta.

- ¡Sí! Pero espero que no de demasiado miedo, ya sabéis lo mal que lo pasé aquella vez -confiesa Perla.

- Créeme que no fuiste la que peor lo pasó... -dice Louis mirando a Harry.

- ¡Tu broma fue cruel! Pensé que te había perdido para siempre, Boo Bear -demasiado romántico.

- ¡Oye! Acabaré poniéndome celosa -reclama Perla.

- Asúmelo, chica. Jamás superarás nuestro amor -bromea Louis.

- ¡Bueno, vale! ¿Vemos "Anabel"?

- ¡Sí! -gritan todos.

- ¡No! -digo yo- Odio las muñecas, me dan pánico. Es mi casa y no consiento que se ponga esa película.

- También es mi casa, así que vamos a ver "Anabel". Somos mayoría. Si te da miedo, acurrúcate con tu irlandés. Estoy segura de que te va a proteger bien.

Todos se ríen mientras yo me ruborizo. Entonces noto una mano acariciando mi pierna con ternura por debajo de la manta. Lo miro extrañada, pero con la sonrisa que me dedica consigue que se vayan todos mis miedos.

Mi pequeño irlandés ha vuelto.


-----------------------------

Gracias por leer!!

M.xx

Remember my loveWhere stories live. Discover now