Capítulo 11.

158 10 1
                                    

- ¡Prométeme que no me harás nada cuando abra la puerta!

- ¡Abre de una vez y dime lo que tengas que decir!

- ¡Sólo saldré si me lo prometes!

- ¡Está bien, joder! Te prometo que no te haré nada.

Entonces, Zayn abre la puerta con cautela ante la atenta mirada de Daniela y mía. Su sonrisa inocente me enfada aún más, pero he prometido no hacerle daño.

- Qué me tenías que decir -con los brazos en jarra muevo la punta del pie con nerviosismo, mi paciencia se está acabando.

- Era broma -confiesa, aguantando la risa.

- ¡Te mato! -me abalanzo sobre mi supuesto amigo, pero éste sale corriendo.

- ¡Habías prometido que no me harías daño!

Tras una breve persecución, desisto. Me voy enfadada hacia mi habitación y cierro la puerta tras de mí. Ha jugado con mis sentimientos, un amigo de verdad no usaría eso para bromear.

- (Tn), Zayn tiene que decirte algo -escucho a Dani al otro lado de la puerta.

- ¿Otra broma? Creo que paso, gracias.

- (Tn), lo siento. Pensaba que no te molestaría.

- Pues sí que lo ha hecho.

- ¿Si invito a los chicos a casa me perdonarías?

- ¿Vendría Niall?

- Si tú quieres, se lo diré.

Me acerco a la puerta. Después de abrirla, recibo un abrazo por parte de Zayn. Realmente no se si quiero volver a invitar a Niall, seguramente reciba un "no" por respuesta.

- Pensándolo bien, no creo que quiera venir después de lo de esta mañana.

- (Tn), no es para tanto. Ya te he explicado la historia. Seguro que si le digo que tienes interés en verlo...

- ¡No! -le interrumpo- Zayn, ni se te ocurra. Si lo invitas, que sea por tu propia voluntad. Yo no quiero saber nada.

- Está bien, lo preguntaré por nuestro grupo de WhatsApp.

Mientras Zayn lo consulta con los chicos, Daniela y yo vamos a preparar algo para comer. Al rato viene Zayn a decirnos que vendrían todos, aunque Niall y Harry vendrían más tarde.

- ¿Niall ha dicho que quiere venir?

- Realmente ha dicho que le da igual. Supongo que al ver que todos van a venir, se ha animado también. ¿Qué vamos a comer? Los chicos estarán aquí en 15 o 20 minutos.

- ¿Preparamos pasta a la carbonara? -propone Daniela. Es nuestro plato estrella. Me guiña un ojo, sabiendo que ese es uno de los platos favoritos de Niall. Toda la comida en general es su favorita.

- Por mi guay -afirma Zayn.

- ¡Manos a la obra!

Al poco tiempo de comenzar a hervir el agua para la pasta, tocan al timbre. Deben ser los chicos.

- ¡Hey, guys! -grita Louis con tan sólo poner un pie en mi casa.

- ¡Qué pasa, chicos! -dice Liam chocando la mano de Zayn.- ¿Qué es eso que huele tan rico?

- Me alegra que te guste mi perfume, Daddy. Me vas hacer sonrojar -bromea Zayn.

- ¡Idiota! -Daniela le lanza un trapo de cocina a su novio en la cara mientras ríe- Estamos haciendo pasta a la carbonara, Liam.

- ¡Eh, que está mojado!

- ¡Buena elección, Dani! Vaya dos cocineras guapas -dice Louis, acercándose para besar nuestras mejillas.

- No cantes victoria tan alto, Louis. Puede que acaben quemando la casa. No sería la primera vez -ríe Zayn.

- Como sigas diciendo mentiras sobre nuestras dotes culinarias, te quedas sin comer -le amenazo con la cuchara de madera. Todos saben que Daniela y yo tenemos un don para la cocina.

Entre risas, logramos terminar la comida para el almuerzo. Justo cuando estamos preparando la mesa para todos, alguien toca al timbre. Todos tienen las manos ocupadas, así que me dispongo a abrir yo. Seguramente sea Harry y... Niall. Los nervios comienzan a aflorar en mi interior.

Miro por la mirilla y me sorprende no ver unos rizos voluminosos. Sólo asoma una cabellera rubia. Una preciosa cabellera rubia. Abro la puerta intentando parecer tranquila.

- ¿Y Harry? ¿No venía contigo?

- No hacía falta que expresaras tanta ilusión al verme. No sé para qué vengo.

- ¡No! Quiero decir, no me malinterpretes. Me gusta que hayas venido, pero pensé que venías con Harry.

- ¿Te gusta tenerme en tu casa? -dice divertido. Sabe que su presencia me pone nerviosa.

- Sabes a lo que me refiero, idiota -golpeo su hombro jugando.

- En realidad, no. Qué tal si me lo explicas.

- Qué tal si pasas y dejas de hacer preguntas.

Entonces, tras una risa sincera, se dispone a cruzar el umbral de la puerta pasando muy cerca mía. Demasiado, diría yo.

- He de confesar que a mí también me encanta estar de nuevo en tu casa, princesita -susurra en mi oído, para después besar mi mejilla.

Cuando se aleja un poco, reúno coraje suficiente para explotar.

- No decías lo mismo esta mañana.

Me arrepiento al instante de abrir la boca. Es cierto que necesito desahogarme, pero no quiero crear más tensión de la que hay. Parece que Niall ha venido en son de paz y yo lo único que voy a conseguir es retomar la guerra.

Para mi sorpresa, Niall reacciona de una forma peculiar.

- La gente comete errores, ¿no es cierto? - me guiña el ojo. Supongo que se refiere a lo que escuchó esta mañana sobre mi arrepentimiento del pasado y sobre mis sentimientos hacia él.- Propongo una cosa -dice volviendo a posicionarse frente a mí.- Qué tal si firmamos la paz.

Su mano se extiende esperando una respuesta por mi parte. Mi vista se clava en ella y a continuación en sus ojos azules. En su mirada se puede ver sinceridad, y eso me tranquiliza.

- ¿Paz? ¿Es posible que de ti haya salido esa palabra?

- Vamos, (tn). No me lo pongas más difícil. Lo estoy intentando, lo juro.

Confío en él. Por fin, después de muchos años, vuelvo a sentir algo distinto del odio entre nosotros.

Tal vez sea un nuevo comienzo de algo que nunca debió terminar.


---------------------

Gracias por leer!!

M.xx

Remember my loveWhere stories live. Discover now