PROHIBIDO [z.m]

Capítulo Setenta: Por el bien de ambos

Capítulo Setenta: Por el bien de ambos.

[Char]

Lunes 18 de Agosto.

Mi celular vuelve a sonar con la insoportable canción que he llegado a odiar ya. Lo ha hecho desde ayer en todo el día y toda la mañana de este día. No he salido para nada de mi habitación y es un alivio que Louis no me haya venido a echar un vistazo ya, creo que no estoy lista para que me pregunté qué es lo que tengo.

Mamá salió muy temprano y me mandó un mensaje diciéndome que había comida en el refrigerador y que solo teníamos que calentarla, no he comido nada, ni tengo hambre. No me ha dicho nada tampoco pero me dio una mirada extraña ayer por la tarde, me pregunto que tenía y yo le dije que estaba cansada. Obviamente no se tragó el cuento pero no preguntó más. Estoy casi segura que cuando regrese del trabajo subirá a mi habitación y me preguntará que es lo que tengo y querrá la verdad, y yo no podré negarme a decírsela.

Me acomodo mucho mejor en mi cama y observo hacia mi ventana. El día esta nublado y es una perfecta excusa para no salir de aquí. Suspiro cansada y pongo mis manos sobre mi rostro, cuando toco mis ojos rápidamente me da vergüenza, me da vergüenza haber llorado ayer por la noche cuando puse un pie en mi habitación. Y ahora tengo la garganta seca y quiero agua pero no pienso bajar por ella.

Si me preguntaran en este momento, como me siento, no sabría qué responder para ser sincera. Me siento triste, enojada, traicionada, confundida, cansada de volver a pasar por esto de nuevo. Creo si me vuelve a pasar una tercera vez no lo soportaría. Y solo de recordar a Zayn hablando por teléfono me dan ganas de llorar de nuevo.

Trato de contener mis lágrimas y me abanico el rostro con las manos. No sé si ayuda pero de cierta forma me calma.

— ¿Por qué mierda no contestas mis llamadas Charlou?

Doy un brinco en mi cama cuando oigo la voz de Harry y grito en el proceso. Mierda, me ha asustado y yo estaba tan concentrada que no escuche sus pasos por el pasillo. Hasta me ha espantado las lágrimas.

>>He estado tan preocupado por ti, así que decidí venir a verte.

Aunque él está cerca, siento lejana su voz. Entonces posó mis ojos en él y su figura se ve imponente, tiene el ceño fruncido y los brazos cruzados, sí, está enojado. Yo sin embargo, no digo nada y bajo la mirada a mis mantas.

— ¿Qué tienes? —pregunta sentándose a un lado de mi cama y levanta con cuidado mi mentón— Charlou, ¿qué pasa?

—No quiero hablar de eso —me zafo de su agarre y vuelvo a observar hacia mi ventana.

—Pero yo sí.

—Yo no Harry.

Nos quedamos en silencio y le agradezco que me entienda. En este momento no estoy de ánimo.

—Zayn me pregunto por ti —ni me inmuto de lo que dice, lo ignoro— le dije que vendría a verte y me dijo que él vendría más tarde.

Eso sí que logra captar mi atención y lo volteo a ver.

—No, no quiero que él venga.

— ¿Por qué?

—Sólo no quiero que ponga un pie en esta casa.

—Acaso, ¿discutieron?

Una risa carente de humor sale de mi garganta y niego con mi cabeza.

—Eso hubiera querido.

—Entonces, ¿qué fue?

—Nada.

—No me puedes decir que no es nada, cuando te ves de la mierda y tienes los ojos hinchados. Eso no es nada Charlou, ¿qué mierda te hizo Zayn? —su voz se eleva y tiemblo por el cambio tan repentino— juro que si Zayn te hizo algo, no vivirá para contarlo.