Capítulo N°21

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Capítulo 21: Confesiones

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Capítulo 21: Confesiones.

Podría optar por mentir, pero de nada serviría ocultar la verdad más que para traer problemas innecesarios por lo que bajo la cabeza y busco las palabras correctas.

—Salimos por un tiempo. —Admito.

Jax no parece sorprendido ni por un segundo.

— ¿Qué fue lo que pasó? —me mira con atención.

—No lo sé. —niego. —Había muchas cosas en contra.

— ¿Cómo qué? —inquiere interesado y se acomoda mejor en su lado de la banca.

—No había pasado mucho tiempo de que terminará con Elizabeth y siempre me comparé con ella mientras salía con él. —explico. —No es que Dave me hiciera menos, al contrario, pero todo ocurrió tan rápido que creí que todo lo que pasaba era irreal. Y había algo...

— ¿Algo qué no encajaba? —completa y no me queda más que asentir.

—Sí, no sé cómo explicarlo. —cruzo los brazos una vez que terminó de comer. —Es como cuando deseas algo con tantas ganas que una vez que lo tienes no te parece tan bueno como lo creíste. No quiero decir que Dave no sea genial, pero sé que no había superado a Elizabeth, no del todo.

— ¿Y tú ya lo has superado a él?

—Al principio creía que no, pero ahora sé que sólo puedo verlo como un buen amigo. —me encojo. — ¿Qué hay de ti?

— ¿Qué quieres saber?

— ¿Por qué te interesa saber tanto sobre lo que pasó entre Dave y yo?

—Simple curiosidad. —se pone de pie y le sigo. — ¿Quieres ir a ese auto cinema ahora?

Doy un saltito y asiento.

—Jax. —le detengo, se gira y sonrió. —No te salvarás de mis preguntas.

Achica sus ojos y lanza un guiño. —Vamos.

Me guía de vuelta a su auto y una vez nos encontramos dentro enciende la calefacción, ya ha comenzado a refrescar y ninguno de los dos venimos muy abrigados.

—Por cierto, creo que no lo había mencionado, pero luces bellísima Lane. —comenta como si nada y siento mi rostro arder.

—Gracias, esperaba que no me llevarás a un pub o algo por el estilo. —Jax ríe.

—Estuvimos a punto, no hay mucho de dónde escoger.

— ¿Me vas a contar cómo conseguiste este auto? —inquiero cuando sale del estacionamiento y le señalo la bodega dentro del mismo centro donde se localiza el auto cinema. —Recién has llegado y ya nos dejas a todos impresionados.

—Es un regalo de mamá. —se encoje.

—Deben de tener dinero.

—No te imaginas. —bufa, recién agotado.

Lane Lake ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora