~BNHA one-shots x lectora~

Kirishima Eijirou- Pillados

El golpeteo constante de las pieles chocar se hacía oír resonando por el cuarto junto a los gemidos.

—k-kirishima~

A altas horas de la noche, cuando todos debían dormir, eijirou kirishima y su "amiga" solían reunirse en alguna habitacion, usualmente la de la muchacha, entrando al cuarto entre besos apasionados, apresurados en hacer volar la ropa para lanzarse sobre la cama.

Y esa noche no era una excepción.

El pelirrojo sujetó tus mejillas, guiando tus labios hacia los suyos para poder besarte.

—eres muy ruidosa— ronroneó atrapando tu labio inferior entre sus dientes para tirar suavemente de él— te oirán...

No era una advertencia o simple provocación, era una realidad y lo sabías.

—e-es tu culpa...— tartamudeaste echando la cabeza hacia atrás ante una repentina penetración— aah~

Por mucho que kirishima dijera aquello, no pretendía que te callaras, quería oírte más, arriesgándose a ser descubierto por alguien.

Pero eso ahora no importaba, en ese momento solo existían dos amigos queriendose bajo las sabanas, disfrutando cada jadeo ajeno, cada beso y cada estocada. La adrenalina se mezclaba con el placer y cada vez se veía más cerca de correrse.

—_-______— gruñó ocultando la cabeza en tu cuello— creo que voy a venirme...

—k-kiri~

Unos golpes en la puerta os hicieron detener, quedaros estáticos en el lugar, y aún más cuando aquellos golpes se repitieron casi reventando la puerta.

—¡¿QUE MIERDA ESTÁS HACIENDO?!

kirishima salió de encima tuyo apresurandose en coger unos pantalones de pijama para ponérselos.

—¡b-bakugo!— exclamó nervioso.

—¡ABREME LA PUTA PUERTA!

—dile que no— le rogaste levantandote también.

—¡p-por favor, espera!— le pidió el pelirrojo.

—¡COMO NO ABRAS TU PIENSO REBENTAR YO LA MALDITA PUERTA!

—va a abrir— te aseguró eijirou algo asustado— escondete y cuando cuando se vaya sales.

—¿p-pero dónde?

—¡KIRISHIMA BASTARDO!

—¡no se!

Bakugo golpeó la puerta con más fuerza.

—bajo la cama.

El pelirrojo fue apresurado a abrir mientras tu te escurrias bajo la cama ocultandote con las sabanas que colgaban de la cama llegando casi al suelo.

La puerta fue abierta y enseguida escuchaste a katsuki bufar.

El cenizo repasó el cuarto a oscuras analizandolo todo.

—¿donde mierda la has metido?

—¿q-que?— eijirou se hizo el tonto apoyándose en el marco de la puerta para impedir la visión del otro.

—¡ahora no te hagas el idiota, os escuché desde mi maldito cuarto!

—no se a que te refieres.

—¿¡me estás llamando tonto!?— bakugo se cruzó de brazos frunciendo el ceño—¡te escuché gemir y decir su maldito nombre como perro en celo! ¡Por la mierda si aún estás duro!

Kirishima se sonrojó, intentando tapar aquel bulto con sus propias manos.

—no es lo que parece...

—¡¿ah no?! Por que parece que te estés reuniendo con esa perra solo para follar como conejos y ahora la escondes en algun sitio tan estúpido como bajo tu maldita cama.

—puedo explicarlo— insistió kirishima.

—vamos, intenta crear una excusa medio creíble.

—s-solo me aliviaba...— murmuró eijirou— soñé cosas y cuando me levanté dolía bajo el pijama...

Bakugo calló aún con los brazos cruzados, mirando fijamente al chico que empezaba a sudar de los nervios.

—¿esa mierda es tu excusa?

—no es una excusa.

—sus tanga está en el suelo.

—es mio.

—¿también el sujetador?

—no— soltó enseguida— es para ti.

—¿para-?

—tu deberías usar sujetador con lis pectorales que tienes— empezó a reír el pelirrojo consiguiéndose una parada del cenizo.

—¡mira! ¡¿Sabes que?! ¡Me importa una maldita mierda lo que estuvieras haciendo con la perra! ¡Pero como los escuché solo un maldito segundo más me encargaré de que se enteren todos!

Y todo seguido, katsuki abandonó la habitación cerrando de un portazo.

Oíste a kirishima suspirar.

—por fin...

Saliste de bajo la cama riendo.

—¿con que la tanga es tuya?

El pelirrojo también empezó a reír volviendo a acostarse.

—es lo que se me ocurrió.

—durmamos ya— le dijiste después de una risita, subiendo a la cama para acomodarte entre sus brazos— no veo una opción seguir.

El chico asintió tapándoos con las sabanas.

—buenas noches _________.

—buenas noches kiri.