Capitulo 15-. Un Año Doloroso

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Narración Omnisciente

La Estrella fugaz empezó a recordar, lo que había en ese gran día, donde por un momento había paz, donde ella fue la que trajo paz al mundo, o al menos entre un ser inmortal y la persona que tiene seis dedos, entre ese rencor que tenían, por fin se pudo perdonar, aquella destrucción, con aquel Raromagedon se pudo olvidar, gracias a la Estrella fugaz, porque en un día cualquiera, hace un año, donde los gemelos Pines, estaban de nuevo en Gravity Falls, aunque Dipper era el más emocionado, aun así la Estrella Fugaz aún sonreía con todo su amor por esta gran ciudad.

El Año Pasado

Ahora una vida en Gravity Falls, ya había pasado mas de un mes que se habían mudado a esta gran ciudad donde pasaron los sucesos más extraños del mundo, la que en verdad se le estaba dificultando establecerse en su nuevo hogar era Mabel, que por días enteros quería estar en esta ciudad disfrutar de ella, ahora se esta retractando, ya no era lo mismo, ya no quería estar mas tiempo sola, así es, en la secundaria de Gravity Falls estaba realmente sola, no era como ella lo imaginaba, en esa secundaria lo mas extraño es que todos se comportaban de una forma fría, no eran todos contra todos, si no todos contra Mabel, ya que habían oído que era la responsable de las catástrofes de hace un año.

Para Mabel era muy complicado, pidió miles de veces disculpas, pidió por muchos días que fuera olvidado, pero nadie le dijo que "Tal vez sea bueno olvidarlo", "No tuviste la culpa Mabel" , " Seamos amigos Mable", pero nadie lo decía, solo amenazas, burlas, golpes, siempre era alejada por todo el mundo, no podía tener un amigos ya que después se alejaban de ella, sus mejores amigas del pasado, estaban lejos de ella, por campamentos, nuevas ciudades que visitar y mudanzas, todo era un desastre para ella, ya quería salir de una pesadilla interminable.

Nunca dijo nada, ya que Dipper, su hermano gemelo, a el le iba bastante bien, consiguió muchos amigos, porque todos creían a Dipper el héroe del mundo junto a sus tíos, la vida de Dipper ya estaba resuelta, ya nada le faltaba, tenia las mejores calificaciones, grandes amigos, era estudiante de uno de los mejores científicos del mundo, todo para el era perfecto, aunque simplemente se salió de la escuela para investigar con grandes profundidades los misterios de la tierra con su tío que era todo lo que deseaba, era todo lo que necesitaba, el héroe de Gravity Falls, una leyenda que esta incompleta, aun faltaba el resto, aunque él lo decía varias veces, nadie le creía que Mable también salvo el mundo, las palabras ya no son creíbles.

Nunca le dijo a Dipper la verdad de todo lo que le pasaba a ella, ya que ya no quería ser un estorbo, gracias a todas las humillaciones que ha tenido Mabel, su autoestima, su seguridad su alegría, cambio todo, ya no era lo mismo que hace años, ya no era la misma, ya no quería ser de nuevo aquella Mabel que tenia la culpa de un Raromagedon, ya no quería estropear más, ya no quería ser de nuevo un estorbo, así que ella nunca se quejo de lo que le pasaba, nunca se vio llorar, siempre se escondía, pero no era todo, ella solo le mentía a su familia, lo que no era normal en ella.

Pasaremos a un día especifico, donde todo cambio, donde el villano que antes amenazaba la humanidad, se convirtió en alguien que ahora, solo esta en paz, pero fue difícil al principio, convencerlo, de que tenía que ser más pacífico, todo era tan difícil, para la Estrella fugaz, tratar con quien un día tuvo grandes peleas, pero un gran sentimiento tuvo ella, uno en que se sentía por algunos momentos como aquel demonio.

Era ya tarde, después de las clases, Mabel, siempre salía corriendo hacia su casa ya que no quería recibir alguna burla, así que lo mejor era salir corriendo a toda velocidad posible, no se detenía para nada, así que en un momento a otro llego a la casa, estaba agotada, así que subió los escalones en dos en dos, llegando lo más rápido a su cuarto, aventó la mochila sobre la cama, se acostó ella, se cubrió con su cabello su cara, no quería que la vieran llorar.

Mabel-. ¿Por qué esto me pasa a mí?, ¿Por qué paso esto?... Si merezco algo de culpa, pero no siempre toda, o al menos eso creo... Me siento tan sola -Un suspiro tras otro, no se podía creer que de nuevo está llorando, de que en verdad se pregunte las mismas cosas de siempre.

Lloro menos de una hora, sus ojos ya estaban hinchados y rojos, ya se había cansado por ahora de llorar tanto, ya quería terminar con este sufrimiento, empezó a dar grandes bocanadas, era su forma de controlar el llanto, solo respirar, a veces era imposible, controlar algo, mientras que con todas sus fuerzas quiere salir, por ahora lo está logrando, por ahora.

Mabel-. Ahora que estoy sola, solo tengo que desquitarme con algo, porque están difícil estar sola, parece que soy como una estatua sin valor, que no es preciada por nadie en el museo... Estatua...- entre esas palabras una resaltaba en su cabeza, dando tantas vueltas, que ya era imposible sacarlas de su mente.

Esa única palabras, la hizo sentir un poco molesta, pero a la vez se sentía peor, ya que esa estatua, le recordaba a Bill, se sentía también culpable de lo que estaba pasando también a ese demonio, si no fuera por su codicioso deseo, también ese demonio no estaría solo en una estatua, sin poder salir, también le tenia que pedir disculpas, ya que ella también acaba de arruinar la vida de un demonio, su mente ya estaba tan perdida.

Mabel-. Tengo que pedirle disculpas, aunque no creo que me perdone, ya que nadie lo haría, pero al menos tengo que intentarlo, solo por ahora – suspiro pesadamente, lo decía de una forma bastante desanimada.

Se levanto de la cama, se empezó a arreglar su cabello, y lavarse la cara para que no la notaran que estuvo llorando por varios minutos , empezó a irse lejos, saliendo d ella cabaña, pero antes aviso a sus tíos que iba a salir, solo que les dijo que iba con unas amigas, otra mentira mas para la lista, ahora mientras que iba hacia el bosque, se preguntaba el cómo estará el demonio, si es que la escuchara, solo necesitaba pedirle disculpas, era necesario, después de horas de caminata, encontró por fin la estatua de Bill.

La estatua estaba en unas condiciones menos favorecidas, estaba llena de polvo, estaba toda mugrienta, estaba con algunas grietas, aun así esto hizo que Mabel se sintiera peor, olvidado, llevado lejos de donde antes se podía decir que era su hogar, hasta esa vida arruino la Estrella Fugaz, aunque se lo merecía aquel demonio, pero ahora no se sentía feliz Mabel, por verlo de esa forma, se sentía triste, y avergonzada, quería arreglar algo que ella descompuso, que ella era culpable.

Mable-. Bill... He venido para pedir disculpas...

Mi Demonio Fiel (Mabill)Where stories live. Discover now