❇ 인형 ❇ (boydoll) .Ten. [Terminada]

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Su estancia en el hospital se alargó dos semanas en los cuales le llevaron con el neurólogo y estuvo bajo exámenes en los cuales descartaron que algún golpe hubiese fracturado el cráneo o que algún coagulo de sangre se formará, pero nada de eso sucedió y solo le dieron analgésicos para su dolor de cabeza. Tal como lo prometió Chittaphon él estuvo en cada uno de sus exámenes y le apoyo en todo pero ella solo se preguntaba ¿Cómo pagarían todo aquello?

Al fin después de tres dias más le dieron de alta, como muestra de tanto tiempo le quedaban los horribles moretones de sus venas ante la intravenosa, mientras que él mayor le ayudaba a ponerse la chamarra color vino ella le observó con cuidado. Era el mismo Chittaphon que ella conocía solo que un poco más reservado aunque aveces podía ponerse pegajoso, eso le encantaba.

—¿Cómo vamos a pagar esto? —cuestionó una vez que salió del trance cuando él mayor se agacho y le coloco las pantuflas que hacían conjunto con su chamarra.

Chittaphon sonrió mientras volvía a estar a su altura y acomodaba un mechón rebelde que caía por su mejilla —Tu no te preocupes por eso, además puedo descontarlo de tu mesada — terminó guiñandole el ojo y se dedicaron a esperar en silencio al camillero.

Al final ella no supo cuánto dinero había costado todo aunque Kun había intendado calmarle diciendo que como era familiar de él, tenían que hacerle un descuento. La camioneta negra en la que iban era lujosa y demasiado, mientras observaba de reojo la cuidad también le daba pequeñas miradas a Chittaphon quien iba concentrado en la carretera y que vista tan buena tenía.

Les tomó veinte minutos en llegar a su hogar, ella realmente esperaba que fueran a su departamento pero comenzó a sudar frío cuando vio la casa:

Aquella era la casa que Chittaphon le había regalado y donde había encontrado a taeyong...

—¿Puedes caminar o quieres que te lleve? — cuestióno el moreno y ella simplemente bajo por su cuenta de la camioneta, estaba en shock por la casa —La entrada es por acá —indicó su novio y deslizó la tarjeta dándoles acceso a la casa.

El aroma a cítrico inundó sus fosas nasales ¿donde estaba el aroma a vainilla? Mientras el mayor se adelantaba para dejar las cosas, ella seguía viendo las fotos donde aparecía la familia de Chittaphon y ella con Sicheng, la voz femenina de su madre le hizo tensarse.

—¡Oh dios mío! Al fin estás en casa —su madre le estaba abrazando y ella simplemente estaba tensa ante tal acción de parte de su madre, ¿Qué rayos estaba pasando? —Se que estas confundida pero no me mires así, Hana —Se que tuvimos nuestras diferencias pero eres mi hija y te quiero — los ojos de su madre se volvieron cristalinos y pronto se seco las lágrimas.

—Basta, HeSui la estás asustando —la figura de su padre estaba sentada en el pequeño sillón café, ahora sí que tenía que despertar, sus padres estaban ahí y sin decirle algo hiriente vaya que debía estar muerta —¿Cómo te sientes, corazón? — observó como su novio aparecía con una charola y vasos con agua color rosa junto a trozos de fresa moviéndose dentro del vaso.